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El candidato apoyado por Trump sigue liderando el conteo en Honduras al reanudarse tras nuevos fallos técnicos

  • El también conservador Nasralla, que va segundo, advierte de una carga del escrutinio "altamente irregular"
  • El Partido Libre, actualmente en el poder, "no reconoce" las elecciones por la "injerencia y coacción" de Trump
Una imagen del candidato presidencial Nasry Asfura.
Una imagen del candidato presidencial Nasry Asfura en un mitin político.
RTVE.es

El empresario de derecha Nasry Asfura, respaldado por el presidente estadounidense Donald Trump, sigue este lunes a la cabeza del conteo de votos de las elecciones de Honduras celebradas el 30 de noviembre, al reanudarse el escrutinio tras nuevos problemas técnicos que lo mantenía paralizado desde el pasado viernes. El aspirante del Partido Nacional consolida así su leve ventaja sobre el candidato liberal, Salvador Nasralla.

Según publica la prensa local, con base en datos del Consejo Nacional Electoral (CNE), con el 87,96% de los votos escrutados, Asfura, de 67 años y miembro del Partido Nacional (PN), se sitúa en primer lugar al congregar el 40,20 % de los votos —1.132.429 papeletas—, mientras que el también conservador Nasralla, presentador de televisión de 72 años y miembro del Partido Liberal (PL), consigue el 39,50%, un total de 1.112.610 sufragios.

La candidata oficialista del Partido Libertad y Refundación (Libre, izquierda), Rixi Moncada, sigue en el tercer lugar con 543.756 papeletas, el 19,30 % de los apoyos.

En su cuenta de X, Asfura, por ahora candidato ganador, dijo el viernes que "la estabilidad del país está por encima de cualquier ambición personal" y pidió "serenidad": "Es cuestión de tiempo, el CNE dará los resultados finales", sentenció.

Por su parte, Nasralla, mucho más activo en las redes, ha considerado este lunes que si bien "todavía no se puede afirmar fraude sin evidencia documental", el comportamiento de la carga es "altamente irregular y estadísticamente improbable"

"Después de realizarse las acciones técnicas necesarias (acompañadas de auditoría externa), los datos ya están actualizándose en la divulgación de resultados. Candidatos y candidatas deben estar pendientes y, en su caso, presentar las impugnaciones que correspondan de acuerdo a la Ley. ¡Seguiré informando!", ha escrito en sus redes sociales la consejera presidenta del CNE, Ana Paola Hall, quien ya había anunciado el domingo que se reiniciaba "de inmediato" el escrutinio, detenido desde la tarde del viernes por "problemas técnicos".

Sin embargo, no ha sido hasta hoy que se ha reanudado.

El jueves pasado, Asfura había recuperado la ventaja sobre Nasralla, quien venía teniendo mayores apoyos desde el martes 2 de diciembre. Ese día se vivió la primera interrupción del sistema y el ente electoral habilitó un centro de divulgación en un hotel para proyectar en pantallas los resultados preliminares, que desde entonces avanzaron con lentitud. Al día siguiente, el miércoles, la divulgación electrónica del escrutinio volvió a detenerse por "mantenimiento" de la empresa encargada del portal.

Los observadores llaman a "agilizar" el escrutinio

Este sábado, la Misión de Observación Electoral de la Organización de Estados Americanos (MOE/OEA) en Honduras hizo un llamamiento a "agilizar" el escrutinio de las elecciones garantizando las medidas de trazabilidad que otorguen "certeza en los resultados". Mientras, el partido de Moncada solicitó al CNE la nulidad del escrutinio ante el "desastre" en el sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP).

"Cabe señalar que los datos estadísticos recabados por las y los observadores de la OEA en las distintas juntas observadas confirman un resultado sumamente ajustado", subrayó la MOE/OEA, organismo que destacó la "marcada falta de pericia en el desarrollo y ejecución, especialmente de las soluciones tecnológicas, lo que ha causado retrasos en los escrutinios".

"Desde la noche del domingo y hasta el jueves, la Misión registró intervalos de disponibilidad del sitio de divulgación de resultados preliminares", aseveró el comunicado.

Salvador Nasralla, candidato presidencial del opositor Partido Liberal, habla con sus simpatizantes en Tegucigalpa el 5 de diciembre de 2025

Salvador Nasralla, candidato presidencial del opositor Partido Liberal, habla con sus simpatizantes en Tegucigalpa el 5 de diciembre de 2025 Orlando SIERRA / AFP

El partido oficialista "no reconoce" las elecciones

El Partido Libre, actualmente en el poder, señaló el domingo que "no reconoce" las elecciones por la "injerencia y coacción" del presidente de Estados Unidos y convocó a movilizaciones de sus bases.

"Libre no reconoce las elecciones celebradas bajo una injerencia y coacción del presidente de Estados Unidos, Donald Trump y la oligarquía aliada que han embestido al pueblo hondureño con un golpe electoral en curso después del envío de un millón de mensajes por diferentes plataformas amenazando al pueblo que si vota por Rixi no recibirá las remesas el mes de diciembre", subrayó Moncada.

Trump había animado a los hondureños a que votaran por Asfura, en contra de Rixi Moncada, a la que tildó de "comunista". Y alertó sobre posibles "consecuencias" si Honduras "altera" los resultados de los comicios.

Desde la cita electoral del 30 de noviembre, el CNE tiene 30 días para publicar los resultados finales.

La candidata presidencial hondureña Rixi Moncada, del partido gobernante Libertad y Refundación (LIBRE), en una conferencia de prensa este domingo Orlando SIERRA / AFP

Las elecciones se celebraron en medio de fuertes tensiones políticas, alta desconfianza institucional y acusaciones de posible fraude, en un país que arrastra problemas estructurales de pobreza y corrupción y que lleva tres años en un estado de excepción parcial para reducir los índices de violencia.

Al no existir en Honduras la opción de segunda vuelta electoral, quien obtenga el mayor número de votos será desde el próximo 27 de enero el sucesor o sucesora de la actual jefa de Estado, Xiomara Castro, primera mujer en el cargo y esposa del expresidente Manuel Zelaya, derrocado por un golpe en 2009.

El propio Zelaya consideró la semana pasada que los "actos injerencistas, deliberados y abiertamente hostiles" del presidente estadounidense buscan "torcer el mandato del pueblo hondureño" estigmatizar a Moncada y amenazar al electorado. "Pretendiendo manipular el proceso democrático para beneficiar a los mismos grupos de poder que han saqueado y sometido a la nación por más de un siglo", subrayó el exmandatario.