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Aliança Catalana igualaría a Junts como tercera fuerza política en el Parlament, según el CIS catalán

  • El partido de Carles Puigdemont perdería 15-16 escaños, y la formación de extrema derecha subiría de 2 a 19-20 diputados
  • El PSC seguiría el más votado (38-40 escaños), seguida de ERC (22-23); Vox (13-14) adelantaría al PP (12-13)
Aliança Catalana igualaría a Junts como tercera fuerza política en el Parlament, según el CIS catalán

El Centre d’Estudis d’Opinió (CEO) de la Generalitat de Cataluña (el equivalente catalán del CIS) sitúa por primera vez a la formación independentista de extrema derecha Aliança Catalana en un empate técnico con Junts per Catalunya, al otorgarles entre 19 y 20 escaños a ambos en el barómetro publicado este lunes. Aunque Aliança Catalana se mantendría por detrás en estimación de votos (11-14% frente al 13-15% de Junts), el reparto de escaños equiparía a ambas formaciones, según los resultados del sondeo.

En esta tercera oleada del año del barómetro del CEO, se consolida la tendencia que ya se vio en marzo, cuando la formación de extrema derecha de Sílvia Orriols, que actualmente tiene dos escaños en el Parlament catalán, vio quintuplicar su representación. Ahora, la estimación de voto multiplicaría por diez su representación parlamentaria, y aumentaría su apoyo del 3,8% que obtuvo en las últimas elecciones a la actual estimación del 11-14%.

Por el contrario, Junts, que cuenta con 35 escaños, caería del 21,6% de voto a una horquilla del 13-15%, en un duelo en la derecha del independentismo catalán que estaría perdiendo con claridad. Según los datos presentados por el director del CEO, Joan Rodríguez Teruel, un 21% de quienes votaron a Junts en las elecciones autonómicas de 2024 cambiarían su papeleta ahora por la de Aliança Catalana, cuyo discurso antiinmigración está atrayendo a nuevos votantes.

De hecho, la estimación de voto del CEO corrige la afirmación espontánea de intención directa de voto, que pondría a Aliança Catalana (8,4%) por delante de Junts (7,4%).

Aliança atrae votos de toda la derecha catalana

La encuesta se elaboró a partir de 2.000 entrevistas realizadas a domicilio por la empresa Opinòmetre a residentes catalanes mayores de 18 años. Se realizó entre el 13 de octubre y el 11 de noviembre, justo cuando la formación de Carles Puigdemont tomó la decisión de romper con el PSOE y dejar de apoyar a Pedro Sánchez en el Congreso de los Diputados.

Una de las "contradicciones internas" que, según el director del CEO, debe afrontar Junts es que, a medida que pierde a sus votantes "más críticos" con los gobiernos socialistas, le queda un electorado más proclive a aprobar la gestión de Salvador Illa y Pedro Sánchez, informa Efe. Ahora mismo, Junts es "el partido con menor fidelidad electoral", ya que solo un 60% de quienes escogieron su papeleta volverían a hacerlo ahora.

Una parte de los nuevos apoyos a Orriols llegan desde votantes no independentistas: solo un 48% de sus partidarios prefieren la independencia, un 26% aboga por un Estado federal, un 21% avala actual Estado autonómico y un 4% ve a Cataluña como una región de España, lo que explica que Aliança absorba electores de Vox y PP. A medida que el eje identitario Cataluña-España "pierde fuerza", ha señalado Rodríguez Teruel, Aliança sube y atrae a más votantes, porque "adquiere una visión más plural y diversa de su electorado y entran votantes de Vox".

El PSC, el partido más votado; Vox adelantaría al PP

Por lo demás, el PSC seguiría siendo la primera fuerza con claridad, con una proyección de entre 38 y 40 diputados, aunque experimentaría un retroceso respecto a los 42 que posee actualmente la formación del president Salvador Illa. ERC mantendría su posición y se situaría como segunda fuerza parlamentaria, con una estimación de entre 22 y 23 escaños.

En la derecha no independentista, también se produciría un 'sorpasso' de Vox al PP. Vox obtendría entre 13 y 14 escaños y superaría a los 'populares' catalanes (12-13), que actualmente tienen más representación (15 diputados por los 11 de Vox). El PPC perdería apoyos, al caer del 11% que obtuvo en las urnas el año pasado a un 8-10%, mientras que Vox haría el camino inverso, subiendo del 8% que cosechó en las últimas elecciones a un 9-11% si se votase ahora.

El partido de Ignacio Garriga retendría mejor sus apoyos, porque el 85% de quienes le votaron mantendría su lealtad y solo un 5% pasaría a apoyar al PP, mientras que, en sentido inverso, un 10% de los votantes de la candidatura de Alejandro Fernández votaría ahora a Vox.

Mientras, En Comú Podem (6) y la CUP (3-4) conservarían casi sin cambios su actual representación, con una estimación de voto del 5-7% para los 'comunes' y un 4-6% para la formación antisistema.

Valoración de líderes

De hecho, para los votantes catalanes, tanto Carles Puigdemont como Sílvia Orriols empatan en sus preferencias para presidir el Govern catalán, con un 8% cada uno. De todos modos, el líder preferido para ocupar la presidencia de Cataluña sería Salvador Illa, mencionado por el 21% de los encuestados. El líder de ERC, Oriol Junqueras, se queda con un 7% de los apoyos.

En cuanto a la valoración de líderes, ninguno aprueba, pero el mejor valorado es Salvador Illa (PSC), con una puntuación media de 4,9 sobre 10. Le siguen el líder de ERC, Oriol Junqueras (4,7); Jèssica Albiach (En Comú Podem, 4,3 sobre diez); Sílvia Orriols (Aliança Catalana, 3,8), empatada con Pilar Castillejo (CUP, 3,8); Carles Puigdemont (Junts, 3,5); Alejandro Fernández (PPC, 2,8); y, por último, Ignacio Garriga (Vox), que cierra el ránking de valoración de líderes catalanes con un 2 sobre 10.

La vivienda, principal preocupación

En cuanto a los principales problemas de Cataluña para los encuestados, el acceso a la vivienda es con diferencia la mayor. Hasta el 31,6% de los ciudadanos encuestados la mencionaron como el problema más importante, muy por delante de la inmigración (10,4%) y la inseguridad ciudadana (8,6%), que ocupan el segundo y tercer lugar en las preocupaciones de los catalanes, por delante de la insatisfacción con la política (8,6%), la sanidad (6,4%) y el funcionamiento de la economía (4,2%).

La preocupación por la vivienda como primer problema es compartida por los votantes de todos los partidos, salvo por quienes se reconocen como votantes de Vox y Aliança Catalana, para quienes la inmigración es el primer problema (26,2% y 29,5%, respectivamente).