El primo de Correa asegura que firmó los documentos de la Gürtel "con los ojos cerrados" porque confíaba en él
- Ha declarado en la tercera jornada del último juicio que se sigue en la Audiencia Nacional por la pieza principal del caso
- El que fuera asesor fiscal de Correa, ha dicho que este "se vanagloriaba" de no presentar la declaración de la renta
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Antoine Sánchez, primo del líder de la trama Gürtel, Francisco Correa, ha asegurado este martes que firmó "con los ojos cerrados" un documento que le mostró este y su 'número 2', Pablo Crespo, porque confiaba en ellos y porque le dijeron que le ayudaría a resolver un problema que tenía con sus negocios en Senegal y para abrir otro en Colombia.
Ha sido en su declaración como acusado en la tercera jornada del último juicio del caso Gürtel -que fue dividido en trece piezas-, en el que se enjuician delitos contra la hacienda pública y de blanqueo de capitales logrados por el entramado a través de sobornos a cargos del PP en ayuntamientos y comunidades autónomas para conseguir adjudicaciones de contratos entre 1998 y 2009.
Sánchez, para quien la Fiscalía pide tres años de cárcel, ha respondido únicamente a preguntas de su defensa. Durante el interrogatorio, ha explicado que firmó el documento porque tenía confianza "firme" tanto en Correa, que era su "primo hermano", como en Crespo.
También ha afirmado que no guardaba copia de nada de lo que firmó, y ha negado saber el "origen" del dinero que tenía Correa: "No me interesaba, tenía otras preocupaciones", ha sostenido.
Blanco Balín dice que Correa presumía de no hacer la renta
Otro de los que ha declarado este miércoles ha sido José Ramón Blanco Balín, asesor fiscal de Correa, quien ha ratificado el escrito de confesión que presentó tras el pacto con la Fiscalía Anticorrupción para que rebaje los 31 años de cárcel que pide para él.
En su declaración, Blanco Balín ha precisado que fue asesor fiscal de Correa entre 2005 y 2008 para la gestión de tres empresas patrimoniales utilizadas para ocultar el dinero que obtenía de su entramado en cuentas bancarias en Suiza.
Según el asesor, Correa "se vanagloriaba" de no presentar "nunca" la declaración de la renta porque tenía "buenos contactos", por lo que decía que no le iba a pasar nada por ello. Sin embargo, Blanco Balín ha explicado que le aconsejó en diferentes momentos que regularizara su situación tributaria, en especial en 2008, cuando se produjo un registro en su despacho en el marco de otro procedimiento, a lo que Correa siempre se negó.
Asimismo ha relatado que los dos líderes de la trama le dijeron que "tenían buenas relaciones con diversos miembros del PP e influencias para conseguir adjudicaciones de contratos públicos, principalmente con alcaldes de la zona de localidades madrileñas como Pozuelo de Alarcón, Majadahonda y Boadilla del Monte".
Blanco Balín ha explicado que cuando Correa y Crespo decidieron simular que Antoine Sánchez era el último beneficiario de unas sociedades, mostró su desacuerdo y se quiso quitar "de en medio".
También ha sido interrogado el empresario Jesús Calvo Soria, que es uno de los cinco acusados que no ha llegado a un acuerdo con la Fiscalía. Al inicio de su declaración ha negado todos los hechos que se le imputaban.
Y aunque ha reconocido su firma en varios documentos que le han mostrado, ha rechazado haberlos firmad él alegando que algunos no estaban fechados. "Jamás se me ocurriría firmar nada sin fecha", ha defendido. Calvo Soria ha lamentado haber sido "muy confiado" con los integrantes de la trama y ha asegurado que cuando conoció a Correa en 2003, este era conocido por ser "un empresario de éxito".
