Venezuela asegura que un "destructor" de EE.UU. abordó de manera "ilegal" una embarcación
- El Ejecutivo de Maduro dice que EE.UU. ocupó durante ocho horas el barco con nueve pescadores que ya han sido liberados
- Por el momento, Washington no ha hecho comentarios sobre el supuesto incidente
El Gobierno de Venezuela ha denunciado este sábado que un destructor estadounidense abordó de manera "ilegal" y ocupó durante ocho horas una embarcación venezolana con nueve pescadores, que según Caracas se encontraban en aguas del país. Asimismo, alegan que esta acción tenía la intención de justificar "una escalada bélica" en el Caribe.
El canciller Yván Gil ha afirmado en una declaración transmitida por VTV que el destructor Jason Dunham (DDG-109), equipado con misiles, armamento pesado y 18 efectivos armados, abordó la embarcación de manera hostil, impidiendo la comunicación y el normal desarrollo de la faena de los pescadores. Estos se encontraban a 48 millas náuticas de la Isla de La Blanquilla, dentro de la Zona Económica Exclusiva venezolana.
Según Gil, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana monitoreó y registró el incidente minuto a minuto, acompañando a los pescadores hasta su liberación. Por el momento, Washington no ha hecho comentarios sobre el supuesto incidente.
Maduro habla de un ejemplo de "conducta bochornosa"
El Ejecutivo de Nicolás Maduro ha calificado este hecho como un ejemplo de "conducta bochornosa” de sectores políticos en Washington, que utilizan recursos militares costosos y soldados entrenados como instrumentos para fabricar pretextos de confrontación.
Gil ha exigido que Estados Unidos “cese de inmediato estas acciones que ponen en riesgo la seguridad y la paz del Caribe". El incidente ha coincidido con una jornada de ejercicios de adiestramiento de milicianos y militares en 312 cuarteles y unidades militares, convocada por Maduro en el marco del "Plan Independencia 200", destinado a garantizar la independencia y la paz del país.
El ministro de Interior, Diosdado Cabello, que encabezó algunas de las actividades, ha instado a la población a la "defensa implacable" y a mantener una "resistencia activa prolongada", advirtiendo que “el que se meta con Venezuela la va a pagar muy caro”. Asimismo, ha pedido a los venezolanos "estar preparados" y "cumplir con la tarea fundamental" de proteger al país.
Por su parte, el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, ha denunciado que Estados Unidos ha lanzado un "brutal ejercicio” psicológico contra Venezuela. También ha advertido que, de producirse una agresión estadounidense, "todo el potencial" de Venezuela "se va a convertir en poder nacional".
Un contexto de alta tensión regional
La denuncia llega en un contexto de alta tensión regional. Estados Unidos mantiene desplegados cerca de las costas venezolanas ocho barcos militares con misiles y un submarino nuclear, además de haber enviado diez aviones de combate F-35 a una base en Puerto Rico.
El pasado 3 de septiembre la Marina estadounidense mató a once personas en un ataque contra una embarcación venezolana supuestamente cargada de narcóticos, en lo que fue la primera operación conocida tras el envío de buques de guerra al sur del Caribe. Caracas sostiene que ninguno de los fallecidos era narcotraficante.
Tras el anuncio, Maduro acusó a EE.UU. de mostrar como prueba del ataque un vídeo "hecho con Inteligencia Artificial". Afirmó, además, que, hasta el momento, el país se encuentra en una fase de lucha no armada, pero que está preparado para pasar a una "lucha armada" si fuera necesario para enfrentar cualquier intento de intervención extranjera.
Washington acusa, a su vez, a Maduro de liderar el denominado Cartel de los Soles, al que considera una organización terrorista vinculada al narcotráfico, y ha aumentado la recompensa por su captura a 50 millones de dólares. Venezuela, por su parte, interpreta estas acciones como un intento de propiciar un "cambio de régimen" en el país.