Los obispos dicen que impedir celebraciones "por motivos religiosos" como en Jumilla es "una discriminación"
- La Conferencia Episcopal Española advierte de que la Constitución ampara las manifestaciones religiosas públicas
- La comunidad islámica teme que la decisión del Ayuntamiento suponga un "paso atrás"
La Conferencia Episcopal Española (CEE) ha apoyado este jueves a la Comisión Islámica tras el acuerdo entre PP y Vox en el Ayuntamiento de Jumilla de prohibir los actos religiosos en las instalaciones deportivas de la localidad murciana. En su opinión, "hacer estás restricciones por motivos religiosos es una discriminación que no puede darse en sociedades democráticas".
Así se han posicionado los obispos católicos en un comunicado hecho público este jueves, en el que han recalcado que "las manifestaciones religiosas públicas, entendidas como libertad de culto, están amparadas por el derecho a la libertad religiosa, un derecho humano fundamental protegido por la Constitución española".
La prohibición forma parte de una iniciativa municipal del PP que modificaba y rebajaba una moción previa del grupo de Vox que proponía explícitamente que se prohibieran celebraciones islámicas en el municipio, de unos 27.000 habitantes y con una amplia comunidad musulmana.
En las últimas horas, también el Gobierno se ha posicionado sobre el asunto, asegurando que seguirá "muy de cerca" los discursos de odio que puedan derivarse o potenciarse en Jumilla y que ve enmarcado en la "deriva extremista y excluyente" de los gobiernos de PP y Vox. Unas críticas a las que el coordinador general 'popular', Elías Bendodo, ha respondido que son un partido "constitucionalista" que respeta las "creencias y costumbres de todos".
"Debe ser valorado con objetividad por especialistas"
Precisamente, ese derecho fundamental al que aluden los obispos está recogido en la Carta Magna en su artículo 16.1, que expone: "Se garantiza la libertad ideológica, religiosa y de culto de los individuos y las comunidades sin más limitación, en sus manifestaciones, que la necesaria para el mantenimiento del orden público protegido por la ley", tal como también recuerda la Conferencia Episcopal.
Y por eso, en opinión del organismo, la única intervención posible por parte de las autoridades públicas es ante "la perturbación del orden público que estas celebraciones puedan causar". "Esto debe ser valorado con objetividad por especialistas y con criterios técnicos para que no responda a una decisión arbitraria o ideológica", han añadido.
Los obispos también han aludido en su escrito a la Declaración de los Derechos Humanos, que en su artículo 18 afirma que "toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión".
Este derecho, según han afirmado, incluye la libertad de cambiar de religión o de creencia, así como la de manifestar su religión o su creencia, individual y colectivamente, tanto en público como en privado, por la enseñanza, la práctica, el culto y la observancia.
La comunidad islámica llama a la tranquilidad y a buscar soluciones en septiembre
El coordinador de la Comisión Islámica de la Región de Murcia, Walid Habbal, cree que la decisión del ayuntamiento de Jumilla de prohibir celebraciones religiosas, como el fin del Ramadán, en instalaciones municipales deportivas es un "paso atrás" que ha dejado "en shock" a la comunidad musulmana de la población, que lo interpreta "más que como un ataque político, como una falta de respeto".
En una entrevista con RNE, Habbal ha explicado que es comprensible que el Ayuntamiento de Jumilla ha tomado la decisión de "administrar sus espacios públicos de la mejor manera que consideran para su pueblo y la sociedad". Sin embargo, pide "buscar alternativas" para no perder los avances de cohesión social por los que han trabajado estos años por una "decisión acelerada". "Se siente una falta de respeto que se utilice un tema como este para una lucha política (...) hay límites".
Habbal ha recordado que la comunidad musulmana de la Región se ha esforzado en lograr una convivencia y buenas relaciones con el resto de la sociedad, "siempre mirando al futuro a y nuestros hijos".
Los responsables de la comunidad islámica de Jumilla han hecho este jueves un llamamiento a la tranquilidad y han remitido a una asamblea que celebrarán a mediados de septiembre las decisiones que vayan a adoptar. "Esta mañana hemos mandado un mensaje de tranquilidad porque mañana empiezan las fiestas más famosas" de la localidad, las del vino, ha dicho a EFE el líder de la comunidad, Mohamed Benallal.
Ha apostado por buscar "una solución alternativa sin problemas", porque "hay opiniones que optan por pedir otros espacios y otras que dicen que también pagamos impuestos del ayuntamiento y del Estado y tenemos derecho al uso instalaciones públicas". "Si hay obligaciones, también derechos, y lo aprobado va en contra de la ley, en mi opinión personal", ha indicado.