La Guardia Civil desmantela una organización que proporcionaba armas a narcotraficantes
- La organización criminal utilizaba testaferros que desviaban armas del mercado legal al ilegal
- Entre las armas incautadas, han encontrado fusiles de asalto, cartuchos de guerra y escopetas policiales
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Una operación de la Guardia Civil ha desarticulado una organización criminal que abastecía de armas de fuego a redes de narcotráfico. El dispositivo ha terminado con 18 personas detenidas y otras seis imputadas, después de 16 registros simultáneos en Murcia, Alicante y Cádiz. El grupo, asentado en la localidad murciana de Alguazas, desviaba armamento del mercado legal al ilegal con la complicidad de personas con licencia para la compra de armas, que más tarde denunciaban falsos robos o extravíos. Las armas, muchas de ellas tácticas y de tipo militar, se ponían al servicio de clanes dedicados al cultivo y distribución de marihuana.
Tras la detención de uno de estos testaferros, los investigadores localizaron a la organización criminal responsable, que contaba con ramificaciones en varias provincias. Algunos de sus integrantes ya habían estado detenidos con anterioridad por actividades relacionadas con el tráfico de armas y de drogas. También les constaban numerosos antecedentes policiales, incluso por tentativa de homicidio.
Múltiples registros
La investigación en Murcia ha conducido también hasta Granada, donde la Guardia Civil ha descubierto otro grupo vinculado al tráfico de armas. Allí, han encontrado una docena de armas, algunas enterradas en un descampado, y una galería de tiro subterránea en la que probaban su funcionamiento. Los dos grupos colaboraban entre sí para atender la demanda de otros narcotraficantes.
Entre las armas incautadas durante el dispositivo figuran rifles, fusiles de asalto como el AK47, escopetas policiales y pistolas de última generación. También se han intervenido 897 cartuchos de distintos calibres —249 de ellos considerados de guerra—, un silenciador, cargadores y un subfusil. En total, se han requisado 11 armas de fuego.
La operación ha permitido desmantelar cinco plantaciones de interior de marihuana con alta tecnología de vigilancia, que utilizaban para controlar a los trabajadores, posibles ladrones y actuaciones policiales. En una de ellas también han encontrado armas empleadas para su custodia. Durante los registros, los agentes hallaron más de 173.000 euros en metálico, 1.733 plantas de marihuana, algo más de cuatro kilos de esta sustancia ya procesada, 400 gramos de cocaína, cinco vehículos de alta gama y otro sustraído, además de material técnico para el cultivo intensivo.
Además del tráfico de armas y drogas, la organización estaba implicada en la extorsión a personas que contraían préstamos con intereses abusivos. Las víctimas sufrían coacciones para saldar sus deudas con pagos en efectivo o a través de la entrega de propiedades y bienes.
