Enlaces accesibilidad

Huelga en Portugal: los funcionarios echan un pulso al gobierno de Costa

  • El Frente Común de Sindicatos de la Función Pública cifra la participación en el 80%
  • El paro de 24 horas afecta a la recogida de basuras, los colegios y las administraciones, entre otros servicios

Por
Vista de la Plaza del Marqués de Pombal en el centro de Lisboa
Vista de la Plaza del Marqués de Pombal en el centro de Lisboa.

Los funcionarios portugueses han logrado paralizar colegios, centros sanitarios y administraciones en una huelga de la Función Pública, que avanza con un seguimiento próximo al 80%, de acuerdo con los organizadores. Los emplados públicos piden mejoras salariales y laborales.

La convocatoria registra "buenos indicadores de adhesión", de entre un 60% y un 90% en función de los sectores y las regiones, según el Frente Común de Sindicatos de la Función Pública.

La primera huelga convocada desde que el socialista António Costa asumió el Gobierno con mayoría absoluta afecta a múltiples sectores, desde la recogida de basuras, a la atención en administraciones públicas, centros sanitarios y colegios.

La protesta ha sido organizada por el Frente Común de Sindicatos de la Función Pública, adscrita a la Confederación General del Trabajo (CGTP), la mayor central sindical de Portugal, y cuenta con el apoyo de organizaciones de enfermeros y profesores.

Pérdida de poder adquisitivo

Los sindicatos reclaman al Ejecutivo luso mejoras en las carreras profesionales, en las condiciones de trabajo y subidas salariales que compensen la pérdida del poder adquisitivo agravada por la inflación, que en octubre escaló en Portugal hasta el 10,2%. El IPC armonizado luso se situó en el 10,6%, justo en la media comunitaria

La movilización se desarrolla una semana antes de la aprobación de los Presupuestos del Estado para 2023, que contemplan incrementos de hasta el 3,6% para los empleados públicos.

"El Gobierno no respondió a los problemas que presentamos, especialmente a la necesidad de compensar la pérdida salarial por la inflación", denunció Sebastião Santana, coordinador del Frente Común, en una entrevista en RTP. El dirigente sindical no descartó nuevas protestas. "Está en manos del Gobierno", dijo.

Las protestas de funcionarios se sucedieron durante los sucesivos gobiernos liderados por Costa, desde su primera legislatura, en 2015. La huelga de este viernes, de 24 horas, concluye a medianoche.

Impuesto a los supermercados

Por su parte, el Gobierno portugués ha dado luz verde a unos impuestos temporales sobre los beneficios extraordinarios de empresas de energía y distribución de alimentos, que debe ser todavía aprobada por el Parlamento, donde los socialistas tienen mayoría absoluta.

La propuesta pretende "atenuar los efectos económicos directos" de la inflación derivada de la guerra de Ucrania en los consumidores y las empresas. Lo recaudado con los tributos a los supermecados se podrá destinar a apoyar a pequeñas empresas golpeadas por la subida de precios o a iniciativas de lucha contra el hambre.