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Ciencia

Fuga de cerebros: los científicos españoles salen al extranjero buscando medios y mayor remuneración

  • No hay una estadística oficial sobre cuántos trabajan en el extranjero. La asociación más importante representa a unos 4.000
  • Francisco no pudo rechazar una oferta de Suecia: "Tienen financiación para pagar a los investigadores más todos los gastos"

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Los investigadores científicos encuentran en el extranjero la valoración, remuneración y medios de los que carece el sistema español

Tras terminar la carrera y un máster en enfermedades infecciosas en Madrid, Ana Moyano se dio cuenta de que seguir con su tesis doctoral en España era tremendamente complicado. En la mayoría de los casos no se cobra nada, cuenta a TVE, salvo que uno obtenga una beca. Decidió probar suerte en otros países y se decantó por un laboratorio de Sudáfrica. Se quiso especializar en el virus de VIH y se encontró con todo tipo de facilidades. Ana explica que, además de su trabajo en laboratorio, ha podido asistir a numerosos congresos fuera del país con todos los gastos pagados, lo que supone más experiencia de investigadora.

Tras terminar el doctorado, Ana decidió seguir formándose en Múnich, Alemania, en este caso, como postdoctorado: "En Alemania el sueldo para un investigador junior, como es mi caso, se sitúa entre los 2.500 y los 2.700 euros al mes y, además de trabajar en el laboratorio como sería en España, me permite formarme como profesora de Universidad", explica.

Una oferta irrechazable para salir de España

El caso de Francisco Villaplana es distinto. Alicantino de origen, se enamoró de Suecia en su época de estudiante Erasmus, pero no tenía nada claro el tener que mudarse. Hizo un doctorado en España y otro, a la vez, en Estocolmo. Le salieron dos ofertas de trabajo a la vez y las condiciones eran tan distintas que no le quedó otra que hacer las maletas.

Después de 20 años, con apenas 42 recién cumplidos, opta ya a una cátedra en su Universidad y tiene la carrera científica más que consolidada. Estudia cómo aprovechar la biomasa forestal como alternativa a los plásticos, por ejemplo, en los envases que nos encontramos en el supermercado: "Los proyectos que se me conceden tienen financiación para pagar a los investigadores más todos los gastos de los fungibles y otros que necesito para mi investigación. Los cubro sin problemas y sin ningún dolor de cabeza", insiste.

La realidad de ser investigador en España: precariedad y sueldos que no superan los 1.000 euros

¿Por qué las universidades españolas no pueden retener a sus científicos?

En países como Suecia, donde está Fran, la ciencia representa el 4 % del PIB, en España el 1,5 %. La clave, cuenta el investigador, es la aportación de las empresas privadas que se comprometen con el desarrollo de nuevas tecnologías y lo financian casi con el mismo presupuesto que el Estado.

Los dos científicos se formaron en España, aunque desarrollen su actividad fuera. Según los autores del estudio 'La Universidad Española en cifras', el coste de su carrera más un doctorado rondaría los 100.000 euros. No hay una estadística oficial sobre cuántos científicos españoles trabajan en el extranjero. La asociación más importante representa a unos 4.000.

"En España mi sueldo se va a dividir en tres"

Daniel Castaño es otro de los científicos que tuvo que salir de España, pero con una diferencia. Tras más de 20 años de carrera entre Suiza y Alemania, el 1 de abril empezará como investigador del CSIC en Bilbao. Seguirá con su proyecto de investigación de la estructura de proteínas, algo clave para desarrollar los fármacos.

Explica que, por primera vez, ha visto un claro apoyo institucional por parte de las autoridades españolas. "Se ha adquirido un microscopio específico para mi investigación, el primero de España y del sur de Europa. En Basilea era uno de los investigadores senior, en España pasaré a ser jefe de grupo. Eso sí, mi sueldo se va a dividir en tres más o menos", reconoce.

"Una de las partes amargas de volver es aceptar que el sistema de tu país te penaliza explícitamente el haber estado en el extranjero. La Ley de Ciencia de 2011 se molesta en detallar que los méritos investigadores, que no se hayan desarrollado en el CSIC, no se computan en tu salario. En mi caso, después de ventilargos años en Suiza, Alemania, Reino Unido... pero es que incluso en la propia España: tus méritos en Universidades o Centros tecnológicos desaparecen". Es la oportunidad de dar un impulso al anteproyecto de ley, ahora en trámite, para subsanar esta situación, opina.

Las necesidades para el futuro

Retornar y atraer el talento forma parte de las prioridades insisten desde las Universidades españolas. Se han identificado algunos problemas y se buscan soluciones. Julián Garde, Presidente de CRUE +I+D+I, cita tres como los más importantes: mayor financiación, desarrollo de una carrera investigadora clara con estabilización y disminución de las trabas burocráticas que hacen ineficiente el sistema.

¿Pero es suficiente el esfuerzo que se hace? Lo preguntamos a los investigadores y los tres son rotundos al respecto. Para Daniel, volver a España es prácticamente volver a empezar de cero en muchos aspectos laborales.

Para Francisco, que insiste en que estaría encantado de volver, ahora no se dan las circunstancias para igualar las oportunidades que tiene en Suecia. Por eso piensa, más bien, seguir contratado en Estocolmo y teletrabajar desde Alicante algunas temporadas.

Y Ana, la más joven, no se atreve a volver a la precariedad. Da por supuesto que después de Alemania seguirá "dando vueltas por el mundo", aunque, insiste, "nadie lo hace por gusto".

Ellos piden un compromiso real de las autoridades para su vuelta y que la apuesta por su retorno no se quede en un papel mojado.