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Una nueva caída del petróleo vuelve a causar el pánico en las Bolsas asiáticas

  • El precio del crudo baja ante la debilidad económica y el exceso de producción
  • La Bolsa de Shanghái se hunde un 6,42%, y el Nikkei japonés se deja un 2,34%

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Varios transeúntes observan las cotizaciones de la Bolsa de Tokio en un panel electrónico de una asesoría bursátil de la capital japonesa
Varios transeúntes observan las cotizaciones de la Bolsa de Tokio en un panel electrónico de una asesoría bursátil de la capital japonesa.

El precio del petróleo no levanta cabeza y este martes, de nuevo, ha iniciado la jornada en Londres con el barril del Brent por debajo de los 30 dólares (29,5 dólares), un 3,2% menos que al cierre del lunes. Ante las dudas sobre la consolidación de la recuperación económica global -con especial preocupación por la ralentización de China- y el exceso de producción petrolífera, el precio del crudo se ha hundido otro 7% en lo que llevamos de semana.

Con esos mimbres, las Bolsas asiáticas han vivido este martes una nueva jornada de pérdidas, relevantes en el caso del mercado chino, donde los principales parqués se sitúan en mínimos de 13 meses.

El índice de referencia de la Bolsa de Shanghái se ha desplomado un 6,42%, en un ambiente de pánico que no ha logrado frenar la nueva inyección de liquidez del banco central chino, la cuarta que realiza en una semana. En el segundo mercado de valores del gigante asiático, Shenzhen, el selectivo se ha hundido un 7,12%.

De esta forma, el parqué de Shanghái acumula unas pérdidas del 22,3% solo en lo que llevamos de mes, después de haber conseguido cerrar 2015 con unas ganancias acumuladas del 9,41%, a pesar de los desplomes vividos el verano pasado. La situación en la Bolsa de Shenzhen es parecida: se ha dejado ya el 25,12% en lo que va de enero.

Por su parte, en Japón, el índice Nikkei de la Bolsa de Tokio ha terminado con un retroceso del 2,34%. La posibilidad de que el Banco de Japón (BoJ) anuncie tras su reunión del próximo viernes medidas de estímulo adicional evitaron pérdidas más amplias en el parqué nipón.

"Si el banco central no mueve ficha, la Bolsa de Tokio podría registrar aún caídas más pronunciadas, ya que hay cada vez más expectativas de cara a que amplíe su programa de compra de activos", ha asegurado Takuya Takahashi, analista de Daiwa Securities, a la agencia Kyodo.