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Cronología del primer mes del movimiento 15-M

  • El 15 de mayo una manifestación evidenció la indignación con los políticos
  • A partir de entonces, miles de ciudadanos acamparon en varias ciudades

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15 de mayo. Decenas de miles de personas llenan las calles de Madrid pidiendo una regeneración de la política y un cambio en el sistema democrático actual. La manifestación, convocada por la plataforma Democracia Real Ya es la chispa que enciende la mecha de la indignación ciudadana y uno de los desencadenantes del movimiento 15-M.

  • Al terminar la manifestación, decenas de personas se concentran en una sentada en la plaza de Callao que desemboca en una serie de enfrentamientos con la Policía y se zanja con 18 detenidos. Esa misma noche se inicia en la Puerta del Sol una acampada espontánea de indignados que se desmarcan de Democracia Real Ya y que insisten en que su protesta es apartidista -que no apolítica-.

17 de mayo. De madrugada, la Policía desaloja a los acampados en Sol y estos denuncian que la manifestación es disuelta con violencia a pesar de la resistencia pacífica. Esa misma tarde, miles de personas llenan la plaza del Kilómetro 0 en una concentración vitaminada y convocada por las redes sociales al grito de "Esto es solo el principio".

18 de mayo. Tras la decisión de la Junta Electoral Provincial de prohibir la concentración de las 20.00 horas, comienzan a surgir dudas sobre la legalidad de la acampada en un lugar como la Puerta del Sol. Pese a la prohibición -o puede que motivados por ella- miles de madrileños convierten la concentración en una de las más multitudinarias.

Es una de las noches más tensas puesto que el miedo a un desalojo está latente en todo momento. Sin embargo, la Policía finalmente no interviene y la acampada se consolida. "La Policía resuelve problemas, no los crea", argumenta Rubalcaba al ser preguntado por una eventual actuación.

La indignación de Madrid, que se hace fuerte en la concentración de las 20.00 horas, se contagia en varias ciudades españolas como Barcelona, Sevilla, Zaragoza o Valencia, donde también se inician acampadas.

El mundo empieza a mirarse en el espejo español y se convocan concentraciones para los siguientes días frente a las embajadas y consulados españoles de ciudades como Londres, Florencia, Budapest, Viena, Buenos Aires, Montpelier y Nueva York.

19 de mayo. La Junta Electoral Central declara ilegales las reuniones, manifestaciones y concentraciones que se celebren durante la jornada de reflexión y la propia jornada electoral -sábado 21 y domingo 22 de mayo-. Haciendo oídos sordos a la decisión de la Junta, los indignados la desafían y llaman a manifestarse en Madrid para la jornada de reflexión.

  • Los acampados consultan a los ciudadanos para ir construyendo un manifiesto. Se recogen propuestas en varias urnas dispuestas por todo el campamento y se debaten en las comisiones antes de enviarlas a la asamblea general para su aprobación. Estas propuestas ciudadanas se seguirán recogiendo hasta el desmantelamiento del campamento.

20 de mayo. A pesar de la ilegalidad de la acampada, Rubalcaba insiste en todo momento en que la Policía no crearía problemas. Interior informa ese mismo día de que, conforme se acercara la medianoche, los agentes advertirían a los responsables de la acampada de que esta no era legal y les multarían si se negaban a desmantelarla. Los indignados, exultantes, vuelven a sentirse seguros y celebran la decisión de Rubalcaba al grito de "Hoy no nos echan y mañana nos vemos". La jornada de reflexión comienza a las 00.00 horas con un grito mudo.

  • 21 de mayo. Cientos de indignados reflexionan en Sol megáfono en mano el día antes de la celebración de elecciones autonómicas y municipales. Desde la organización se pide a los presentes evitar las alusiones políticas para no dejar resquicios a un eventual desalojo.

22 de mayo. Durante la jornada electoral, el ambiente en Sol es parecido al de los días anteriores. Los indignados ignoran los resultados electorales e insisten en que las elecciones eran una excusa y que el movimiento es la semilla de un cambio más grande.

  • Ese mismo día deciden no levantar el campamento y continuar al menos una semana más con el fin de articular y expander el movimiento.

23 de mayo. Arranca la segunda semana de protesta en la Puerta del Sol. Los objetivos a medio corto plazo son la coordinación del movimiento en toda España, su expansión a nivel internacional y la organización de asambleas en los barrios y pueblos de Madrid de cara al siguiente fin de semana.

Varias ciudades españolas, como Málaga, Valencia o Zaragoza, deciden alargar también las acampadas al menos una semana más.

  • La Confederación de Comercio Especializado de la Comunidad de Madrid (COCEM) traslada una serie de peticiones a los representantes de los acampados. Entre ellas, que dejen un perímetro de cinco metros alrededor de las tiendas, liberen las calles adyacentes y supriman los carteles de los escaparates y fachadas. Los comerciantes que hasta la fecha se habían mostrado comprensivos y solidarios con los indignados, comienzan a notar un descenso en las ventas.

26 de mayo. El movimiento 15-M decide dar respuesta a quienes demandaban una lista clara de reivindicaciones. La asamblea general celebrada en Sol llega a un consenso de mínimos para debatir sobre cuatro líneas que, desde el grupo de política, se consideran "representativas de la indignación ciudadana".

  • Estas cuatro ideas son la reforma electoral, la lucha contra la corrupción política, la separación efectiva de los poderes públicos y la creación de mecanismos de control ciudadano.

27 de mayo. Los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana de Barcelona desmantelan por la fuerza la acampada de plaza de Cataluña. La carga policial deja más de un centenar de heridos de los que una treintena son policías.

Horas más tarde, el conseller de Interior, Felip Puig, justifica la dureza de un dispositivo que "actuó para defenderse". Puig remarca que no se pretendía desalojar a los acampados sino limpiar la zona para velar por la salud pública y retirar objetos susceptibles de ser peligrosos de cara a una hipotética celebración de la victoria del Barça en la final de la Champions.

28 de mayo. El movimiento se articula por los barrios y municipios de Madrid, donde se celebran las primeras asambleas locales. En ellas, los 'indignados' lanzan sus propuestas y estudian si mantener o no el campamento.

  • El Gobierno regional y el Ayuntamiento de Madrid solicitan en varias ocasiones el desalojo de la acampada en Sol en base a las dudas sobre los peligros de esta para la salud pública y sus efectos en el pequeño comercio de la zona . Los 'indignados' se defienden y afirman que la protesta no interrumpe el tráfico, no afecta al pequeño comercio y no crea ningún problema de seguridad ni de insalubridad, por lo que no hay motivo para desalojar.
  • 30 de mayo. La plataforma que convocó la manifestación del 15 de mayo, Democracia Real Ya, anuncia que promoverá una Iniciativa Legislativa Popular para cambiar la Ley Electoral y que prepara una manifestación internacional para el 15 de octubre.
  • 2 de junio. Los acampados de Sol buscan sin éxito una postura de consenso para decidir cómo y cuando reestructurar el campamento para su continuidad. Comienzan, no obstante, a reordenar el espacio en la plaza para una mayor organización y comodidad.

5 de junio. Indignados de varias ciudades de España se reúnen en Madrid para analizar la evolución del movimiento 15-M y estudiar nuevas acciones.

  • Representantes de hasta 56 ciudades proponen una gran marcha nacional de un mes que partiría de cada pueblo y culminaría con un gran acto el 17 de julio. Un acto que sirva "para tomar Madrid y refundar la democracia", proponen los 'indignados'.
  • 7 de junio. Los acampados en Sol acuerdan por unanimidad levantar el campamento el domingo 12 con una gran "fiesta de la reconstrucción" que reúna las asambleas de todos los barrios y pueblos y en la que se concreten las próximas acciones del movimiento. La decisión sigue a la que ya han tomado los indignados de la mayoría de ciudades.
  • 8 de junio. Cientos de indignados de Madrid permanecen durante horas en una sentada improvisada ante el Congreso de los Diputados contra la reforma laboral. Entrada la madrugada, los manifestantes, tras debatir si acampar o no en esa calle, deciden volver al campamento de Sol.

9 de junio. Los 'indignados' valencianos se concentran frente a las Cortes Valencianas en el día de su constitución. La protesta acaba con

una carga policial que deja 18 heridos y cinco detenidos por desorden público, atentado a la autoridad y lesiones. Ocho de los heridos son agentes antidisturbios.

Los 'indignados' de Madrid vuelven por la noche a las inmediaciones del Congreso de los Diputados y muestran, con una sentada pacífica, su solidaridad con los detenidos tras la carga de Valencia.

  • 10 de junio. Tras las cargas policiales en Barcelona y Valencia, el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, advierte que la Policía actuará con "firmeza" si hay "violencia". El vicepresidente primero del Gobierno defiende así la actuación policial respecto al movimiento 15-M y recuerda que los ciudadanos pueden salir a la calle para que les escuchen, pero "si hay gente que quiere hacer otras cosas, se encontrará con la Policía".
  • 11 de junio. Como habían acordado en la semana anterior, los 'indignados' de toda España se manifiestan en las puertas de los ayuntamientos de municipios y ciudades durante las tomas de posesión de sus responsables. Realizan varias concentraciones, sentadas y actos en varias ciudades españolas que acaban incluso, con algunos de ellos detenidos.