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Francia confía en que una etarra no se fugue después de dejarla en libertad

  • Ekai Alkorta queda en espera de un nuevo juicio en diciembre
  • Con ella será juzgada también el etarra Javier Arruabarena
  • Su condena se corresponde con la que en su día Francia le impuso a 'Txeroki'

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Ekai Alkorta, condenada en rebeldía en 2008 a cinco años de cárcel por su vinculación con ETA, ha quedado este miércoles en libertad condicional a la espera de un nuevo juicio el próximo 9 de diciembre, en el que volverán a examinarse los hechos por los que fue sentenciada.

El Tribunal Correccional de París, en contra de la opinión de la Fiscalía, ha atendido la solicitud de Alkorta, que fue detenida el pasado 23 de julio en Bayona.

A partir de este momento la mujer tendrá que presentarse dos veces por semana en la comisaría de esa ciudad vascofrancesa hasta la fecha del proceso contra ella y contra el etarra Javier Arruabarrena.

El presidente del tribunal confía en que no se fugue

El presidente del tribunal, Marc Bourragué, ha advertido a Alkorta que "la obligación del control judicial es algo serio" y que confía en verla el día del juicio porque en caso contrario la corte "lo tendría en cuenta".

La abogada de Alkorta, Xantiana Cachenaut, ha insistido en que nada "puede hacer temer que (su defendida) se dé a la fuga y no comparezca". La letrada ha argumentado esta afirmación aludiendo a la promesa de la directora del colegio donde trabajaba su clienta para contratarla de nuevo, así como al hecho de que tiene un piso en alquiler en Bayona y una pareja que le espera, y que ha acudido a la vista.

La misma condena que en su día se le impuso a 'Txeroki'

Bourragué ha anunciado que quien sí seguirá en prisión es Arruabarrena, capturado el pasado 25 de junio en las afueras de París junto a Ohiana Garmendia Marín, con quien se supone que dirigía una célula del aparato de información de ETA.

Arruabarrena y Alkorta fueron condenados en rebeldía cada uno a cinco años de prisión por el Tribunal Correccional de París el 22 de octubre de 2008, en un proceso en el que fueron también condenados en total 18 etarras, entre ellos el que fuera jefe del aparato de reserva de ETA hasta su arresto en junio de 2004, Ignacio López de Vergara, que recibió 15 años de cárcel.

En ese juicio, seis de los condenados lo fueron en rebeldía, incluido el que se supone que dirigió el aparato militar de la organización terrorista, Garikoitz Aspiazu, "Txeroki", quien a diferencia de Alkorta y Arruabarrena, no se ha opuesto a su sentencia a cinco años de prisión, que por tanto es firme para él y no volverá a ser juzgado.