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El Banco Mundial predice una contracción de la economía mundial del 1,7% en 2009

  • Además, calcula un retroceso del 2,7% en la zona euro y de un 3% en la OCDE
  • El anterior informe de este organismo auguraba un crecimiento mundial del 0,9%
  • Prevé la recuperación para 2010 aunque advierte de un grado alto de incertidumbre
  • Además, se espera una caída histórica del comercio mundial de bienes y servicios

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El presidente del Banco Mundial Robert B. Zoellick durante una conferencia en Londres
El presidente del Banco Mundial Robert B. Zoellick durante una conferencia en Londres.

El Banco Mundial ha augurado un empeoramiento económico este año, lo que hará que el conjunto de la economía mundial se contraerá el 1,7%, y América Latina el 0,6%, según un informe dado a conocer este martes.

Esta es la primera ocasión desde II Guerra Mundial en que el mundo puede registrar, como media, un decrecimiento. Hace solo cinco meses, en noviembre pasado, el Banco Mundial preveía para el 2009 un aumento del 0,9%.

El nuevo informe constata una drástica desaceleración del crecimiento en los países en desarrollo en 2009 y una leve recuperación en 2010, como consecuencia del deterioro económico a nivel mundial.

Caída del 2,7% en la zona euro

El banco calcula que este año, la zona euro sufrirá un retroceso del 2,7%, si bien el año que viene podría registrar un crecimiento del 0,9%. Por su parte, Estados Unidos registrará este año una contracción del 2,4% y el año que viene retomará las cifras positivas con un aumento del 2%.

Aunque en peor situación se encuentran los países más desarrollados, que sufrirán una clara contracción. Según el informe del Banco Mundial, la caída será del 3% para los países de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) y del 2% para otras economías de ingreso alto.

Para el 2010, la situación mundial mejorará levemente, aunque "la actividad económica seguirá afectada en forma negativa por la consolidación del sector financiero, la pérdida de riqueza y las repercusiones de la crisis financiera". El banco calcula para el 2010 un crecimiento mundial del 2,3%, pero destaca, sin embargo, que existe un alto grado de incertidumbre sobre el momento en que se iniciará la recuperación.

El banco subraya que, si bien es probable que el crecimiento se recupere -aunque con lentitud-, la actividad económica permanecerá deprimida, y el desempleo y los ajustes sectoriales significativos persistirán durante los próximos dos años.

Brasil mantiene el tipo

En la región de Latinoamérica y el Caribe, que el año pasado creció un 4,3%, el Banco Mundial espera para el 2009 una contracción del 0,6%, lo que supone una fuerte corrección con el aumento del 2,1% que esperaba en noviembre pasado. Para el 2010, esta región podría crecer de nuevo, en torno al 2,2%, según el informe de Perspectivas Económicas. 

Brasil es uno de los pocos países que evitará entrar en recesión en el conjunto del año, pues crecerá un 0,5% en el 2009 y el 3,2% en el 2010. México se contraerá este año un 2% y el próximo aumentará el 1,8%, mientras que Argentina caerá el 1,8% en 2009 y aumentará el 1,9% en 2010.

En conjunto, el Producto Interior Bruto (PIB) de los países en desarrollo se desacelerará este año, al pasar del crecimiento del 5,8% de 2008 a una tasa proyectada del 2,1% en 2009.

Hace cinco meses, se esperaba para estas economías un crecimiento del 4,4%, lo que refleja cómo se están viendo afectadas por el deterioro de las condiciones financieras y económicas mundiales.

Se espera una caída histórica del comercio mundial

Para este año, se espera además una caída histórica del comercio mundial de bienes y servicios del 6,1%. El precio del petróleo estará más de la mitad por debajo del nivel de 2008, en 47 dólares por barril, y se prevé también que los precios de los productos básicos no petroleros permanezcan bajos, alrededor del 30% menos que los de 2008.

Los economistas del banco creen también que este año habrá un fuerte deterioro en la situación fiscal de algunos países en desarrollo, debido a los menores ingresos vía impuestos, al mayor costo de la deuda, y a las mayores inversiones sociales.

Es probable que la necesidad de financiación externa de los países en desarrollo aumente a 1,3 billones de dólares en 2009. Con la disminución de los flujos de capitales, esto generaría una brecha de financiación de entre 270.000 y 700.000 millones de dólares.