Pogacar logra con otro ataque lejano su quinto Giro de Lombardía consecutivo
- Un ataque en el Passo di Ganda, a 36 kilómetros de meta, decidió a la carrera
La dirección de esta página ha sido copiada en su portapapeles
Parafraseando a Almagro con Nadal y sus Roland Garros; se podría decir que ''Tadej Pogacar va a tener 60 años y va a seguir ganando Giros de Lombardía''. De momento, este 2025 ha vuelto a seguir el mismo camino que en las cuatro ediciones anteriores. Un ataque en el Passo di Ganda tras la última exhibición gregaria de Rafal Majka, que se retiraba hoy, y 36 kilómetros donde el único rival era el tiempo y la distancia que tenía que recorrer solo en el asfalto. Si de normal es superior en casi todas las carreras, parece que esta clásica está hecha a su medida y que si él quiere, puede sumar muchas victorias más.
Este mes ya ha dejado claro que es capaz de ganar solo, como hizo en el Europeo con Eslovenia, pero para este Giro de Lombardía UAE partía probablemente con el mejor equipo posible. Seis escaladores, entre los que estaba del Toro, aunque a Tadej ni siquiera le hizo falta el mexicano para romper la carrera sin que nadie replicase su ataque, como sí hiciera Evenepoel en el Europeo o del Toro y Ayuso en el Mundial.
El esloveno se escapó con el trabajo de su equipo gracias a otro cambio de ritmo demoledor cuando aún faltaban cinco kilómetros para coronar el Passo di Ganda. La imagen, en la que el esloveno iba sacando metro a metro al reducido grupo que ya quedaba, daba a entender que la victoria ya estaba vista para sentencia.
Evenepoel esta vez no opone resistencia
Evenepoel, esta vez, se resignó a seguir a su ritmo, con del Toro a la espera y Storer a su rueda. Sin embargo, el joven ciclista de UAE se retiró pronto de la lucha por el podio, evidenciando que aún en las largas distancias y en circuitos con muchos puertos encadenados, aún le falta para estar con los mejores.
Pogacar llegó a la rueda entonces de Quinn Simmons, el escapado del día, quien solo pudo mirar el maillot arcoiris del ciclista de UAE antes de dejarle a los pocos metros de rodar con él. El estadounidense no pudo siquiera seguir la rueda que luchaba por el podio .
Remco Evenepoel, en su última carrera con Soudal, se deshizo de Storer en una bajada en la que le sacó cinco metros que se hicieron eternos para el de Tudor, quien acabó teniendo que conformarse con una meritoria tercera plaza.
Pogacar, otra vez en solitario
Si algo deja el paso de las ediciones en el Giro de Lombardía es que el nivel de Pogacar no hace más que aumentar. En 2021 y 2022 se lo tuvo que jugar al sprint con Masnada y Enric Mas, pero desde 2023 su distancia con el resto se hace cada vez más notoria. Eso sí, en este 2025 su diferencia ha sido bastante menor con Remco Evenepoel que en 2024 (de 3'16 a 1'51).
El belga sigue convencido en cada entrevista de que puede llegar al nivel del esloveno, y la distancia sigue siendo evidente, pero al menos no va a más. De paso, se lleva un nuevo 2º puesto en una carrera de un día en la que el cajón más alto lo ocupa Pogacar, como en el Mundial o el Europeo.
Pogacar sigue batiendo récords
Con esta victoria, el de UAE se convierte en el primer ciclista en subirse al podio en los cinco monumentos del año, sumando además Mundial y Europeo. Además, de esos cinco monumentos suma tres victorias (Tour de Flandes, Lieja-Bastoña-Lieja y Giro de Lombardía) además de competir de tú a tú a Van der Poel en la París-Roubaix y Milán-San Remo, donde acabó tercero por detrás del neerlandés y Ganna.
Iguala además los cinco Giros de Lombardía de Fausto Coppi, convirtiéndose a sus 27 años en el ciclista con más victorias en la 'clásica de las hojas muertas'. Además, sus cinco victorias consecutivas lo convierten en el único en la historia en ganar el mismo monumento cinco ediciones seguidas.
En el total de monumentos ciclistas Pogacar asciende ya a la tercera posición con diez monumentos (3 Lieja-Bastoña-Lieja, 2 Tour de Flandes y 5 Giros de Lombardía), aún muy lejos de los 19 de Eddy Merckx, aunque Poggi está haciendo pensar que superarle es posible, algo que parecía una utopía durante medio siglo ahora parece real.
Poco le queda por cumplir al esloveno, quien seguro que seguirá intentando sus dos grandes deseos; la Milán-San Remo y la París Roubaix, para cerrar así el círculo de los monumentos ciclista, algo que parece atraerle más que engordar su palmarés en Giro de Italia o Vuelta a España.
