Pogacar sigue teniendo como único rival a la historia y se hace con su primer Europeo atacando a 75 kilómetros de meta
- El esloveno soltó a Evenepoel en una nueva demostración de que nadie está a su altura
- Ayuso peleó con Seixas y Scaroni por la medalla de bronce, pero sucumbió a 5 kilómetros del final y acabó 6º
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Se acaban los calificativos para definir con precisión las hazañas de Tadej Pogacar. Ya solo con hacer pensar que él es el mejor de la historia y no Merckx, algo que nadie ha debatido en 50 años, crea un poco de contexto para darse cuenta de la superioridad que estamos viviendo durante nueve meses de ciclismo al año. No es solamente el mejor vueltománo, con cuatro Tours a sus 27 años, si no que sigue acumulando carreras de un día como si no compitiese contra nadie, como ya sucediese en el Mundial de Ruanda.
Otra vez solo a 75 kilómetros de meta
Hoy, en el mejor Europeo desde que se hizo carrera pro hace nueve años, al menos por participación, ha conseguido irse en solitario a 75 kilómetros de meta y ahí se terminó la lucha por la victoria. Evenepoel pudo seguir su rueda en el segundo paso por Saint-Roman-De-Lerps durante un kilómetro, hasta que el belga tuvo que abrirse por el infernal ritmo que proponía Pogacar.
Desde entonces, 75 kilómetros de ''paseo'', en el que por detrás Scaroni, Seixas y Ayuso seguían la rueda de un Evenepoel enfocado en llegar a al esloveno, aunque se resignó al segundo puesto a 45 kilómetros de meta. Evenepoel vio como sus tres compañeros medían sus fuerzas a la hora de colaborar con él, conscientes de que una plata les parecía buen botín en este Europeo.
Vingegaard deja claro que las carreras de un día no son lo suyo
Su otro presumible rival en este Europeo, Jonas Vingegaard, no aguantó ni una subida a este puerto de las tres ascensiones que había en el trazado. El danés se descolgó a 110 kilómetros de meta y abre aún más sus dudas sobre su participación en monumentos y mundiales, ya que nunca ha sido capaz de sacar un buen resultado en una participación de estas características.
Evenepoel intenta su última bala en solitario
El belga, posiblemente el único descontento en el pelotón si consigue una medalla que no es de oro en una carrera en la que compite Pogacar, se empecinó en probarlo de todas las formas. Pogacar sacaba ya más de un minuto a los cuatro perseguidores y Evenepoel, en un nuevo paso por el Val d'Enfer a 35 kilómetros de meta, se cansó del ritmo de sus compañeros para intentar llegar hasta el esloveno en solitario.
A los pocos kilómetros sacaba ya 25'' a Ayuso, Seixas y Scaroni, que veían como solo iba a haber una presea a disputar entre ellos. Evenepoel, con una nueva plata en el bolsillo tras la conseguida en la ruta del mundial, vivió un camino similar. Tiraba con todo, pero la distancia de un minuto con Pogacar no se reducía.
Seixas muestra al mundo que puede ser 'el rival del futuro'
Si algo hace falta en Francia, lugar de la mejor carrera del mundo, es ilusión con alguien que pueda ganar su carrera. Muchos nombres han hecho creer a los galos; Bardet, Pinot... pero nadie lo ha hecho tanto como Paul Seixas. A sus 19 años ha mirado de tú a tú a los mejores del mundo y ha sido el que ha llevado la voz cantante en las subidas con Ayuso y Scaroni en la lucha por el bronce.
Ni la larga distancia ni el desgaste del Mundial han sido suficiente para ver, posiblemente, la carrera que confirma que va a dar mucho que hablar en el futuro no muy lejano.
Pogacar, sin ningún problema para aguantar la ventaja y levantar los brazos
Los últimos 20 kilómetros fueron una 'crono' entre Evenepoel y Pogacar, aunque en Francia no pasó lo mismo que Ruanda. Lo que sí pasaron fueron los kilómetros hasta que Pogacar volvió a lograr en solitario una nueva victoria y tachar de la lista de esta forma otro 'deseo', tener el maillot de campeón europeo, aunque no lo lucirá el año que viene ya que llevará el arcoiris de campeón mundial.
En la lucha por el bronce, Juan Ayuso sucumbió en un nuevo ataque de Seixas en la última subida al Val d'Enfer a falta de cinco kilómetros, quedándose muy cerca de la medalla. Scaroni, que sufrió lo indecible sobre la bicicleta para seguir el ritmo del galo, acabó perdiendo la rueda de Seixas, que logró su primera medalla élite a los 19 años y deja claro que ha venido para quedarse.
El próximo objetivo del 'nuevo Merckx', que visto lo visto parece muy difícil que no se cumpla, es lograr el décimo 'monumento' de su carrera, su quinto Il Lombardía. La historia y los registros de Merckx parecen ahora mismo los único rivales de Pogacar junto a Van der Poel en París Roubaix y Milán-San Remo.
