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El Casademont Zaragoza logra una épica remontada y estará en la próxima Euroliga Femenina

  • El equipo zaragozano necesitaba remontar 21 puntos tras la ida contra el Zabiny Brno
  • Una estelar Mariona Ortiz ha sido clave en la victoria con 26 puntos
El Casademont Zaragoza vence al Zabiny Brno y disputará la Euroliga Femenina
Las jugadoras de Casademont Zaragoza celebran su billete para la fase de grupos de la Euroliga Femenina EFE
RTVE.es / Agencias

Necesitaba hacer historia para estar la temporada 2025-2026 en la fase de grupos Euroliga Femenina remontando 21 puntos ante el Zabiny Brno y el Casademont Zaragoza lo logró haciendo del pabellón Príncipe Felipe la pista que nunca se rinde para alcanzar el objetivo.

Aunque pasaron su momento de crisis en el segundo cuarto en el que terminaron cediendo hasta tres puntos, el resto del partido fueron haciendo la labor de hormiga para recortar una diferencia hasta la fecha nunca remontada en la máxima competición continental.

A falta de 4:28 las rojillas pasaron a dominar por primera vez la eliminatoria (73-50) con un triple de Pueyo y desde ese momento las checas siempre estuvieron eliminadas, salvo con el 75-54 a 2:17 que la dejaba igualada. De hecho, Toure tuvo un lanzamiento triple final para decantar la eliminatoria a su favor pero falló.

Con el pabellón animando desde que las jugadoras aparecieron en la pista y con un inicio en el que quedó claro desde el primer balón que el Casademont que había saltado a la pista en este partido de vuelta no tenía nada que ver con el que estuvo en Brno en la ida.

Las rojillas salieron mucho más centradas y acertadas e imprimieron a su juego una intensidad que desde el primer momento puso en aprietos a las checas que vieron que su rival no le iba a regalar nada, aunque empezaron mandando en el marcador en lo que fue el único momento que lo hicieron.

Dos parciales de 7-0 y 5-0 para las de Carlos Cantero les permitió cerrar el primer cuarto con nueve puntos a su favor. El camino hacia la remontada empezaban a tenerlo abierto.

El cambio de cuarto le sentó muy mal a las locales que empezaron a atascarse en ataque sin ser capaces de encontrar soluciones para anotar, mientras su rival anotaba un parcial de 0-8 a base de tiros libres. La primera canasta en juego, para unas y otras, tardó más de cinco minutos en llegar y lo hizo en forma de triple. Primero Fingall y después Pueyo anotaron dos triples consecutivos en menos de 20 segundos y frenaron en seco el parcial de las checas.

Las checas solo anotaron una canasta en juego, con 9:24 consumidos del cuarto, para un total de quince puntos, de los que trece fueron a base de tiros libres. Las zaragozanas se vieron excesivamente penalizadas por 16 faltas en los primeros veinte minutos de juego. Al descanso se fueron con 6 puntos de ventaja, todavía les quedaban por remontar 16.

La épica llegó en la segunda mitad

Las zaragozanas pasaron página en el descanso y trataron de meter otra velocidad a su juego que les permitió seguir remontando ante un adversario que tenía muchos problemas para anotar. Un parcial de 11-1 les permitió pensar que el sueño de la remontada podía ser una realidad. Estaban a 5 puntos de lograr la hazaña, pero en la recta final del tercer cuarto el equipo de Viktor Prusa sacó fuerzas de flaqueza para poder afrontar el último cuarto con al menos nueve puntos de margen.

El último cuarto llevó la emoción y la tensión al límite a la pista con un conjunto zaragozano que nunca dejó de empujar, la afición siempre la tuvo a su lado, para terminar culminando una gesta que ni el equipo ni la afición creyó que fuera imposible desde que acabó el partido de ida en Brno.