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Bullock destacasca a un desacertado Real Madrid en el trámite ante el Oldenburg

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El base argentino del Real Madrid Pablo Prigioni intenta superar la defensa del base del Ewe Baskets Oldenburgo Daniel Hain.
El base argentino del Real Madrid Pablo Prigioni intenta superar la defensa del base del Ewe Baskets Oldenburgo Daniel Hain.

Ficha técnica:

73. - Real Madrid (17+17+24+15): Prigioni (3), Bullock (15), Jaric (6), Garbajosa (2) y Lavrinovic (16) -equipo inicial- Reyes (7), Kaukenas (10), Velickovic (10), Vidal (2) y Dasic (2)

60. - EWE Oldenburg (20+10+17+13): Gardner (10), Foster (11), Paulding (12), Majstorovic (3) y Boumtje (4) -equipo inicial- Strauch (3), Buljevic (0), Scekic (11), Hain (0), Njei (0) y Carter (6).

Árbitros: Sutulovic (MNE), Birick (TUR) y Damir (SLO). Eliminados Boumtje y Majstorovic.

Incidencias: Novena jornada de la Euroliga. Palacio Vistalegre. Tres cuartos de entrada.

Lejos de la arrolladora victoria en la visita del Real Madrid al Oldenburg, el equipo de Messina ha tenido que trabajar duro para superar a un equipo alemán que llegó a Madrid sin nada que perder y con ganas de dar guerra a un desacertado equipo blanco.

Vistalegre ha tenido que esperar hasta el final del tecer cuarto para ver como su equipo solventaba un partido que pasaba por ser un mero trámite camino del Top 16, para el que el Real Madrid ya está clasificado y el Oldenburg eliminado.

El equipo de Messina comenzó fuerte, con la anotación repartida entre Jaric, Lavrinovic, Garbajosa y Bullock. Contra todo pronóstico, el Oldenburg aguantó el envite inicial y plantó cara a su rival durante tres cuartas partes del partido.

Los errores en el tiro locales animaron a los alemanes, que aprovecharon las ayudas blancas para meterse en el partido con un parcial de 1-10. Ni el regreso de Reyes a las canchas mejoró el embotado ataque madridista. Los acercamientos blancos eran bien correspondidos por el Oldenburg, liderados por Paulding.

La 'empanada' se contagió al resto del equipo y hasta la nueva estrella blanca, Marko Jaric, perdió un balón. El segundo cuarto fue un recital de imprecisiones en ambos equipos. Las pérdidas de balón, 14 por el lado madridista y 18 por el alemán, denotan la falta de concentración sobre la cancha.

Cuando el tedio amenazaba con apoderarse del partido, apareció Lavrinovic. El pivot lituano incrementó la tensión defensiva de su equipo, que comenzó a liderar el rebote defensivo y activó el ataque junto a Velickovic. Sin embargo, al descanso, la diferencia, como la anotación, era escasa: 34-30.

Bullock al rescate

Tras la charla de Messina en el descanso, el Real Madrid saltó a la cancha con la misión de solventar el partido de una vez por todas. De nuevo Lavrinovic lideró a su equipo y abrió brecha en el marcador. Pero el Oldenburg reaccionó una vez más y, con seis puntos consecutivos, Scekic colocó a su equipo a un punto.

Fue la gota que colmó el vaso. Después de tres cuartos de desaciertos, Bullock cogió las riendas y anotó tres triples para aupar a su equipo a un 56-47 definitivo en las postrimerías del tecer cuarto.

El último periodo fue un placer para los aficionados blancos. Ahora sí, el Real Madrid demostró su superiodad, con buenas jugadas de Velickovic y Kaukenas. El equipo madridista mantuvo una cómoda ventaja durante los últimos minutos para superar a un decente Oldenburg que se marcha con la cabeza bien alta de Vistalegre.

Con el 73-60 final, el equipo de Messina dependerá de sí mismo para terminar primero de grupo. Para lograrlo, deberá ganar en Milán en la última jornada de la primera fase de la Euroliga.