Israel ha bombardeado este sábado un nuevo edificio de gran altura en Ciudad de Gaza, el segundo en 24 horas, alegando que era utilizado por Hamás. Antes del ataque, el Ejército había ordenado nuevas evacuaciones hacia Jan Yunis, designada como "zona humanitaria" pese a las denuncias de hacinamiento y ataques previos contra campamentos allí instalados. Hamás ha acusado a Israel de querer "destruir completamente la ciudad" y ha pedido a la ONU que actúe.
Según el Ministerio de Sanidad gazatí, 60 personas han muerto y 362 han resultado heridas en las últimas horas, entre ellas más de una veintena que buscaban comida en plena hambruna. El balance total de víctimas asciende ya a más de 64.000 fallecidos y 162.000 heridos.
Mientras, en Israel, miles de manifestantes se han concentrado en Tel Aviv y Jerusalén para reclamar un acuerdo de liberación de los rehenes y han lanzado duras críticas contra el primer ministro Benjamin Netanyahu.