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Los accidentes laborales descienden por la crisis pero la inseguridad en el trabajo se mantiene

  • Desde 2008 la cifra de víctimas mortales al año se ha reducido a la mitad
  • Los sindicatos denuncian que muchos incidentes no se registran como tal
  • Los empresarios atribuyen la reducción al paro y a la inversión en prevención
  • Entre enero y febrero se produjeron menos accidentes pero hubo más muertos

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Dos operarios trabajan con medidas de protección
Dos operarios trabajan con medidas de protección

La siniestralidad en el trabajo se ha reducido casi a la mitad en los últimos cinco años. Mientras en 2008 murieron 810 personas en accidentes laborales, en 2012 la cifra descendió hasta los 444, según datos del Ministerio de Empleo. Pero los sindicatos desconfían de las estadísticas y denuncian que no todos los incidentes quedan registrados.

Los empresarios por su parte destacan que la tendencia es muy positiva y reconocen que el descenso, además de a la prevención que realizan, se debe al aumento del paro, pues al haber menos trabajadores es "lógico" que haya menos accidentes.

Los primeros datos de 2013 mantienen la tendencia y reflejan una disminución de los accidentes laborales graves y leves de un 18,5% y un 12,1% con respecto al año anterior. En cambio, se ha producido un repunte en las víctimas mortales de un 19,2%. Concretamente, entre enero y febrero 87 personas perdieron la vida en su puesto de trabajo, según datos del Ministerio de Empleo. Son 14 más que en los mismos meses en 2012.

La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), contactada por RTVE.es, ha declinado valorar estas cifras. Sí lo ha hecho la Asociación de Mutuas de Accidentes de Trabajo (AMAT), integrada en la patronal. Félix Muñoz, de AMAT, opina que este repunte se debe "desgraciadamente a una casualidad" y recalca que "la tendencia desde 2008 es descendente en todos los sentidos".

Aunque lamenta la pérdida "irreparable" de vidas humanas, recuerda que los muertos en 2009 fueron 632, en 2010 bajaron hasta los 569, y en 2011 siguió el descenso hasta los 551 fallecidos.

"Vulnerabilidad casi absoluta"

A pesar del descenso global, los sindicatos creen que las condiciones han empeorado con la crisis económica y las últimas reformas laborales, con las que el empresario ha ganado "capacidad de decisión" de forma "unilateral". Así lo ha manifestado a RTVE.es Pedro José Linares, secretario de Salud Laboral y  Medio Ambiente de CC.OO.

"Entendemos que ya no se registran todos como accidentes laborales" porque el miedo de los trabajadores a las represalias o incluso a perder el trabajo hace que no se utilicen los recursos que existen legalmente a su disposición, ha explicado.

Linares asegura que con las últimas reformas los empresarios tienen "mil posibilidades sobre los horarios y los salarios", por lo que "el comportamiento de los trabajadores es distinto". "La normativa laboral ha dificultado la posibilidad de mediar acuerdos" porque provoca "miedo al despido".

Desiderio Martín, secretario Confederal de Salud Laboral de CGT apoya esta tesis y asegura que tras la reforma laboral, las "precarias condiciones" por el miedo a perder el trabajo provocan una "vulnerabilidad casi absoluta". "Eso se refleja en que la mortalidad ha aumentado" a pesar de que haya más paro, dice.

Enfermedad común & baja laboral

Martín ha explicado que los accidentes que no son mortales han disminuido porque "se declaran menos por parte de las mutuas, que son las que deciden si es un accidente laboral o enfermedad común".

Según la legislación, una baja por enfermedad común  la cubre la Seguridad Social, mientras la baja laboral debe cubrirla la  mutua aseguradora de la empresa, algo que según David La Torre, técnico  de Prevención de la Secretaría de Salud Laboral de UGT, no siempre se  cumple.

"Si por ejemplo tienes una lumbalgia por tu actividad profesional,  vas al médico de la mutua que debe gestionar la baja, pero si él  considera que no es a causa del trabajo, te deriva al médico de la Seguridad Social, que lo declara como enfermedad común". Cuando no  existe causa- efecto, como por ejemplo sucede cuando te cortas con una radial,  "es difícil demostrar que lo que te ocurre es a causa del trabajo, y muchas veces queda oculto",  ha asegurado a RTVE.es.

Es el caso por ejemplo de las enfermedades profesionales, que provocan cada año la muerte a más  de dos millones de personas en el mundo, seis veces más que los accidentes  laborales, según un informe presentado por la  Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Perjuicio económico y asistencial

La Torre denuncia que esto supone un perjuicio económico para el trabajador,  que en caso de estar de baja por enfermedad común, "los primeros tres  días no cobraría un duro" y no podría percibir indemnizaciones si se  demuestra que la empresa ha incumplido las medidas de prevención  necesarias.

"Además del perjuicio económico existe otro asistencial", añade, ya  que si el trabajador precisa de rehabilitación o de una ambulancia, el  coste, que debería recaer sobre la mutua, revierte en el Estado, "lo que  perjudica a las arcas públicas, que es el dinero de todos".

Según la ley, en una baja por enfermedad común sin que exista mejora por convenio colectivo, los tres primeros días no cabe ningún tipo de prestación para el trabajador. Entre cuatro y veinte días después se cobra un 60% de la base reguladora por contingencias comunes y a partir del día 21 el trabajador percibe un 75% de la base reguladora por contingencias comunes.

En cambio, en un accidente laboral, desde el primer día como mínimo se cobra el 75% de la base reguladora por contingencias comunes, e incluso muchos convenios colectivos lo complementan hasta el 90% o el 100%, algo que según La Torre está "de capa caída" tras la reforma laboral.

Inversión en seguridad

A pesar de las denuncias sindicales, los empresarios niegan que la inversión en seguridad se haya visto perjudicada por la crisis económica.

Luis del Corral, presidente de ASEPAL, la asociación de empresas de equipos de protección individual, reconoce que el mercado se ha reducido en su sector hasta un 25%, pero no cree que se deba a que se invierta menos en seguridad, sino a que con la crisis se ha reducido el número de trabajadores, sobre todo en los sectores más proclives a los accidentes como  es el de la construcción. "Si hay 6 millones de parados es un 25% de trabajadores que no van a usar ningún tipo de protección", ha dicho.

Del Corral defiende la normativa europea en Prevención de Riesgos Laborales y asegura que es "más exigente incluso que la de EE.UU.", pues "hay que hacer controles de seguridad muy superiores" a los de la norma americana.

"La concienciación en la prevención de los riesgos laborales cada vez es  mayor, lo que hace que las cifras se vayan reduciendo", ha explicado  por su parte Félix Muñoz desde AMAT.

A pesar del descenso glogal, las estadísticas del Ministerio de Empleo reflejan que todos los días muere en España al menos una persona en su puesto de trabajo.