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Metemos mano al 'Nexus One', un buen teléfono no exento de problemas

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Demostración del 'Nexus One' durante su presentación en California
Demostración del 'Nexus One' durante su presentación en California

Algunos periodistas y blogueros hemos tenido ocasión este jueves de ponerle las manos encima al teléfono de Google. Y la sensación es muy buena, aunque también hay ciertas nubes de tormenta que deslucen su lanzamiento. Hay algunos factores que conviene tener en cuenta al analizar el 'Nexus One':

  1. Técnicamente el Nexus One no es tan nuevo e innovador. Android 2.1 no es más que una nueva versión del ya conocido Android (actualmente en su versión 1.5 o 1.6 para el gran público) que ni siquiera aún está completamente disponible para todo el mundo o no al menos de forma completa: una de sus principales características, el reconocimiento de voz, de momento sólo está disponible en EE UU. Además, el teléfono en sí es una versión supervitaminada de los HTC ya conocidos: en esencia no hace nada que no hagan los actuales, o la competencia.
  2. Cada vez se habla más del Nexus One en Internet asociado a problemas técnicos o de soporte, que únicamente se hace con Google por correo electrónico y foros de Internet, aunque tanto HTC como T-Mobile están colaborando para atender a sus clientes vía telefónica. Probablemente Google subestimó la necesidad de la asistencia técnica y de que los usuarios con problemas puedan entrar en una tienda o llamar por teléfono y hablar con alguien.

Al preguntar sobre este último tema a los empleados de Google encargados de la presentación en España respondieron que una queja sobre la dificultad para conectar a las redes 3G era "una cuestión muy general". Pero los foros de soporte están llenos de esta cuestión tan general, que Google afirma "estar investigando".

Así, queda por tanto la sensación general de que el Nexus One puede tener ciertos problemas de funcionamiento que de momento no son resueltos de forma concreta y efectiva o que tienen que ser otros los que encuentren como resolverlo , aunque sea medio-hackeando el teléfono.

Una estética que deja 'viejo' al iPhone

Lo anterior no significa que el Nexus One no sea un buen teléfono. De hecho en la mano tiene un aspecto soberbio y su estética casi hace parecer obsoleto al iPhone. Tiene una pantalla excelente con una resolución de 480 x 800 píxeles de resolución y tipo AMOLED (iluminación por LED) que ofrece una nitidez y contraste sobresalientes. El manejo de la pantalla táctil es muy bueno, siendo muy precisa y sensible.

Y como guinda además es muy rápido gracias a su procesador de 1 GHz y memoria RAM de 512 MB (más otros 512 MB de espacio para aplicaciones). Pero sí significa que en su mayor parte la presentación a la que hemos asistido esta mañana en las oficinas de Google en España se podría haber hecho perfectamente con un Android 1.6, excepto en lo referente a los fondos de pantalla animados e interactivos y poco más.

De hecho, algunas de las aplicaciones vistas en la demo ( Googgles , Places Directory o Barcode Scanner / Códigos de barras) llevan semanas y meses en el Android Market, la tienda de aplicaciones para teléfonos Android.

Es cierto que Android 2.1 incluye interesantes novedades, pero probablemente no las suficientes como para justificar un cambio de teléfono a los actuales usuarios de Android, muchos de los cuales seguirían siendo felices usuarios de esta plataforma con simplemente disponer de una actualización para sus actuales terminales, algo que por cierto se anunció durante la presentación oficial del Nexus One, pero que de momento se ha quedado en nada.

En cualquier caso no hay fechas de lanzamiento ni para Europa ni para España. Sí se sabe que lo traerá Vodafone como mínimo, pero Google no sabe o no contesta nada más ni por aproximación.

Un precio 'hinchado'

Tampoco nos han podido confirmar "con total certeza" si aquí se ofrecerá también libre. Pero como sí se sabe que vendrá de la mano de al menos una operadora, puede anticiparse que, de ofrecerse libre, su precio será muy similar al que tiene en EE UU. Es decir, hinchado. Algo un poco contradictorio con la intención de Google de ofrecer teléfonos libres que hagan crecer la base de usuarios de Android, que al final es lo que determinará el éxito o el fracaso de esta aventura en la que se ha embarcado Google.

Google ha vendido menos unidades de lo esperado de su teléfono móvil

Tras su salida al mercado, Google ha vendido menos unidades de lo esperado de su nuevo teléfono móvil. Según la consultora Flurry, que monitoriza el mercado de los teléfonos inteligentes o smartphones, desde su lanzamiento Google ha vendido unas 20.000 unidades de su teléfono móvil Nexus One . Aunque puede parecer una cifra respetable -que lo es- queda muy lejos de lo que vendió Apple en la primera semana de lanzamiento del iPhone 3G [S]: 1.600.000 teléfonos.

También otros terminales Android lanzados recientemente, como el HTC myTouch (conocido en España como HTC Magic) o el Motorola Droid superaron las cifras que se calculan para el de Google. Estas bajas ventas se atribuyen a la particular forma en que Google ha decidido comercializar su teléfono.

Mientras que Motorola se gastó del orden de 100 millones de dólares en publicidad de todo tipo, Google optó por una promoción principalmente basada en el "boca a boca" y en la web. Vía web es por cierto la única manera por la que se puede adquirir un Nexus One. No están disponibles en la calle, ni siquiera en las tiendas de la operadora que lo ofrece allí, T-Mobile USA. Ésta tampoco ha participado en su promoción y su papel básicamente se limita a ofrecer un contrato a aquellos usuarios que deseen comprar el Nexus One -por supuesto, vía web- con el viejo método de subvención.

El precio es otra de las causas de estas cifras de ventas, ya que los 530 dólares que cuesta está muy por encima de los 300 dólares que se habló inicialmente y que probablemente se acercan más al precio real del teléfono.

Pero es lo que sucede cuando se venden libres este tipo de teléfonos, que cuestan mucho más de lo que valen para incentivar su adquisición a través de las respectivas operadoras que los tiene en su catálogo.