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Informe Semanal

'Marruecos, el grito del silencio', en 'Informe Semanal'

  • Además, ’En Chile, 50 años después’ analiza la huella que aún se percibe de la dictadura de Pinochet
  • El programa también conectará con Libia para conocer la última hora de la mortífera devastación provocada por el ciclón Daniel.
  • Sábado 16 de septiembre, a las 21:30 en La 1, Canal 24 Horas y RTVE Play

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Marruecos censará a los huérfanos del terremoto para incluirlos en el circuito de adopción
Mujeres buscan entre los escombros en Imi N¿Tala, región de Marrakech-Safi (Marruecos)

Informe Semanal’, presentado por Ana Blanco, abre su página de actualidad con un reportaje sobre el terremoto que ha asolado Marruecos, además de analizar ,50 años después, la huella que aún se percibe en Chile de la dictadura de Augusto Pinochet. El programa conectará con Libia para informar de la última hora de la situación del país, provocada por el devastador ciclón Daniel.

‘Marruecos, el grito del silencio’

Hay silencios ensordecedores como los que se ha encontrado en un Marruecos resquebrajado por uno de los terremotos más mortíferos que ha sufrido en el último siglo. ‘Informe Semanal’ ha viajado al Alto Atlas para conocer, de cerca, lo que ha quedado tras la devastación en varias aldeas. Allí, la vida se ha detenido y, ahora, solo hay llanto, destrucción y -como decimos- silencio. Pero, son muchas las voces que claman al cielo para que la vida -al menos, como la conocían- vuelva lo antes posible. Las cifras hablan, a esta hora, por sí solas: 3.000 muertos y más de 5.600 heridos.

En la localidad de Mulay Brahim, Mustafá Ichidi, entrenador de un equipo de fútbol infantil, cuenta que ha perdido a dos de sus chavales. Y lo que antes era un lugar de juego y entretenimiento, ahora sirve de alojamiento precario para los que se han quedado sin nada. Cerca del 80% de las casas son inhabitables.

En Talat N'Yaaqoub, Fátima pudo sobrevivir: "todos nuestros vecinos fallecieron. Ya no queda nadie. Todo se fue... se fue la casa y, con ella, todo. Incluso la vida se fue...". Ella, como tantos otros, se refugia en la religión para poder soportar el dolor. El techo se les cayó encima, pero ella, su marido y su hija lograron sobrevivir. Lahcen Boughroumt, profesor de Matemáticas, había llegado a esta aldea hace poco más de un año y muestra desesperado la que iba a ser su nueva clase. La escuela ha quedado muy dañada como las más de 500 de toda la región: "Me encuentro con mis alumnos y les pregunto por los demás... Hay quienes me dicen que fallecieron, otros me dicen que están heridos y otros... que han perdido a sus padres".

El seísmo ha golpeado a los más pobres. Carolina García, de 'Alianza por la Solidaridad', reconoce que "la población está en shock", aunque desde el primer momento los marroquíes se volcaron en ayudar a los damnificados. Durante los primeros días, las carreteras se llegaron a colapsar con vehículos cargados de comida, ropa y medicamentos. Todos agradecen esa solidaridad, aunque no cubre todas las necesidades y está la incógnita del futuro más cercano. La tardía reacción de Mohammed VI y el rechazo de ayuda proveniente de países como Francia han incrementado esa incertidumbre.

‘Chile, 50 años después’

El 11 de septiembre de 1973, Augusto Pinochet acabó a la fuerza con el gobierno democrático de Salvador Allende, quien eligió quitarse la vida antes que entregarse a los militares, pero ¿qué huella queda de la dictadura? El dictador gobernó Chile durante 17 años, pero luego -tras el referéndum del NO- permaneció en la escena política como senador vitalicio hasta su fallecimiento. Hoy, según el presidente Gabriel Boric, el ambiente está "eléctrico". La mirada hacia el pasado, aunque hayan pasado cinco décadas, está muy dividida. No hay consenso para condenar el golpe. Gala Lizardi, sobrina de un político ejecutado entonces dice que "no podemos permitir discursos fascistas ni negacionistas". Carolina Urrutia, por el contrario, defiende que se crió bajo el régimen militar y que "era un excelente régimen. Había orden, había paz, había comida...".

El Estadio Nacional fue uno de los mayores centros de detención y tortura durante los primeros meses de la dictadura. Allí mismo, Héctor Valeria, ex prisionero político, comenta que "han pasado 50 años y todavía existe gente que niega lo que pasó". Medio siglo después, casi 300 represores han sido condenados. Y sigue habiendo juicios. De hecho, la Corte Suprema acaba de condenar a 7 militares por el asesinato del cantautor Víctor Jara, que fue encontrado torturado y muerto en una calle de Santiago 5 días después del levantamiento. El régimen militar dejó miles de muertos y de desaparecidos, pero ha sido recientemente cuando el gobierno chileno ha dado el paso para llevar a cabo un Plan Nacional de búsqueda. Luis Cordero, ministro de Justicia y Derechos Humanos de Chile, lo tiene claro: "si esos crímenes fueron cometidos por funcionarios del Estado o por el Estado en ejercicio es el Estado el que tiene que hacerse cargo de la búsqueda". Pero Alicia Juica, hija de desaparecido, está convencida de que los militares no van a cooperar: "Tienen un pacto de silencio que no han quebrado en ningún momento".

En marcha, un segundo intento para reformar la Carta Magna, una Constitución que data del año 80. Es decir, que fue redactada en plena dictadura de Pinochet. Beatriz Hevia, proviene de las filas de la ultraderecha y preside el Consejo Constitucional encargado. Insiste en que "con el proceso anterior ya nos dimos cuenta del tremendo error que es una Constitución sobreideologizada". Habrá que ver cómo evoluciona esta nueva oportunidad porque la oposición no ha participado ni siquiera en los actos conmemorativos de este 50º aniversario. Tampoco ha firmado la Carta por la Democracia. Por ejemplo, UDI, el partido que apoyó la dictadura, defiende que lo ocurrido fue inevitable. María José Hoffman, su secretaria General, asegura que "sin Salvador Allende no hubiese existido Pinochet". Aparte, según algunos sondeos, la mitad de los chilenos no están ni interesados en recordar.

Así es cómo 50 años después, Chile sigue confrontado con el pasado y sin cerrar las heridas. Para la senadora Isabel Allende, hija del mandatario, hay algo indudable: "la memoria es un primer paso para llegar a la verdad". Y, por eso, cree que es "burdo" no entender todo lo que ocurrió entonces: "Estábamos en plena guerra Fría, la intervención norteamericana había comenzado desde hacía mucho antes... Todo eso no existe para la derecha".