EE.UU. intercepta un nuevo buque cerca de Venezuela, el tercero dentro del bloqueo anunciado por Trump
- El Bella-1 se encuentra desde junio de 2024 bajo sanciones de la Oficina de Control de Activos Extranjeros
- De bandera panameña, el buque está vinculado a una compañía relacionada con la Guardia Revolucionaria de Irán
La Guardia Costera de Estados Unidos ha interceptado este domingo el petrolero Bella-1 en aguas internacionales cerca de Venezuela, en lo que es la segunda operación de este tipo este fin de semana y la tercera dentro del "bloqueo total y completo de todos los petroleros sancionados que entren y salgan" del país caribeño anunciado por el presidente estadounidense Donald Trump.
El Bella-1 se encuentra desde junio de 2024 bajo sanciones de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Tesoro de Estados Unidos. De bandera panameña, el buque está vinculado a la compañía Louis Marine Shipholding Enterprises, a su vez relacionada con la Guardia Revolucionaria de Irán.
En su orden de sanciones, el Tesoro de EE.UU. asegura que esta compañía ha "asistido, patrocinado o proporcionado materialmente apoyo financiero, material o tecnológico" para la fuerza iraní. El petrolero estaba efectuando una maniobra de aproximación a la costa venezolana para cargar sus depósitos, según fuentes de Bloomberg, en el momento de la intervención.
La operación tiene lugar después de otros dos abordajes estadounidenses: al petrolero Skipper, el pasado 10 de diciembre; y al petrolero Centuries durante la noche del sábado a este domingo.
La campaña de presión de Trump sobre el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha incluido una mayor presencia militar en la región y más de dos docenas de ataques militares contra lanchas y embarcaciones en el océano Pacífico y el mar Caribe, cerca de la nación sudamericana. Al menos 100 personas han muerto en los ataques.
Maduro tacha de "piratería de corsarios" la confiscación de petroleros
Maduro ha tachado este domingo de "piratería de corsarios" la confiscación de petroleros por parte de Estados Unidos. En un mensaje en su canal de Telegram, el dirigente venezolano ha hablado en general y no se ha referido a las dos confiscaciones efectuadas este fin de semana.
El líder chavista ha señalado que su país "tiene 25 semanas denunciando, enfrentando y derrotando una campaña de agresión que va desde el terrorismo psicológico hasta los corsarios que han asaltado petroleros". Sin embargo, Maduro ha asegurado que están "preparados para acelerar la marcha de la revolución profunda", en alusión al movimiento y proyecto político del chavismo.
El pasado 10 de diciembre, Washington incautó el buque sancionado Skipper y confiscó el crudo que transportaba. Días después, Trump anunció un bloqueo total a la entrada y salida de este país a buques petroleros sancionados por el Gobierno estadounidense, dentro de la presión que ejerce sobre el Gobierno de Maduro, al que Washington acusa de liderar una red de tráfico de drogas. Caracas rechazó las dos primeras incautaciones como un "robo" e insiste en que ejercerá "todas las acciones correspondientes" contra los que tacha de actos de "piratería".
Washington defiende que Centuries pertenece a la flota fantasma
La Casa Blanca se ha defendido este domingo y asegura que el petrolero Centuries es un "buque de bandera falsa" que forma parte de la "flota fantasma" del país suramericano para burlar las sanciones y transportar crudo usado para financiar el Gobierno de Caracas.
"El buque cisterna transportaba petróleo de PDVSA, empresa sancionada. Se trataba de un buque con bandera falsa que operaba como parte de la flota fantasma venezolana para traficar petróleo robado y financiar el régimen narcoterrorista de (Nicolás) Maduro", ha escrito en X la portavoz del Gobierno de Donald Trump, Anna Kelly.
Es la respuesta a las informaciones de medios como The New York Times que indican que el tanquero confiscado este sábado no forma parte de la lista de sancionados por EE.UU. y, en cambio, pertenece a una petrolera con sede en China que traslada crudo venezolano a refinerías del gigante asiático. El Ejecutivo de Maduro tacha la operación como un acto de "piratería" y denuncia también la "desaparición forzada" de la tripulación.