Mujeres racializadas piden que el feminismo tenga en cuenta todas las desigualdades: "Sentimos discriminación"
Objetivo igualdad
- El feminismo interseccional tiene en cuenta las visiones de mujeres atravesadas por diferentes discriminaciones
- Objetivo igualdad aborda diversos feminismos que amplían la mirada "blanca occidental"
Objetivo igualdad, domingos a las 16.30 en Canal 24 horas y en RTVE Play
¿Hay un feminismo único o distintos feminismos que dependen de las desigualdades que se tengan en cuenta? Para la activista del colectivo Mujer, vida y libertad, Nilufar Saberi, "el feminismo es único y universal, al igual que la Declaración Universal de los Derechos Humanos". Afirma que es la lucha de las mujeres "por nuestros derechos y contra toda discriminación hacia nosotras". Según la integrante del Fondo Calala de Mujeres Bertha Sánchez, existen "los feminismos": "Hay un feminismo decolonial; un feminismo negro que ha aportado muchísimo a ampliar la mirada feminista; un feminismo comunitario promovido, sobre todo, por las mujeres indígenas", sentencia.
La novelista gráfica y divulgadora Quan Zhou explicaba en la revista Pikara hace unos años que las mujeres blancas de clase media-alta que ostentan el poder y el privilegio están "a cargo de la creación del discurso feminista". Según Zhou, "el movimiento resultante no es interseccional, es racista y privilegiado (...). Primero las blancas occidentales, y luego, si lo que nos cuentas nos es relevante, tú, mujer racializada oprimida".
"Me acosan señores mayores para ofrecerme papeles"
Para comprobar cómo ese prisma hegemónico puede afectar a la realidad de algunas mujeres, la integrante del colectivo que trabaja la violencia machista Biznegra Iliassou Olalla pone de ejemplo la violencia de género: "Una medida puede fallar por no tener en cuenta las realidades de mujeres migrantes, cuya situación administrativa depende de su maltratador".
En ese sentido, su entidad está realizando un estudio que publicarán en 2026 para conocer la situación de las mujeres negras víctimas de violencia de género. "El hecho de que no haya datos implica que no se van a tomar medidas y tampoco podemos denunciar sin datos, es la pescadilla que se muerde la cola", subraya.
“Hay mujeres gitanas que entran en centros comerciales donde la seguridad las persigue“
"Nosotras sentimos discriminación desde el punto de vista individual y a nivel comunitario. El sistema patriarcal es racista y excluyente porque no acepta las diferencias culturales nacionales de cualquier tipo", apunta la directora general para la igualdad de trato y no discriminación contra el racismo del Ministerio de Igualdad, Beatriz Carrillo. Cuenta que "todavía hay mujeres gitanas que entran en centros comerciales donde la seguridad las persigue".
"A mí me acosan señores mayores en los parques para ofrecerme papeles y trabajo de cuidado. Es una cosa que no le pasa a mis amigas blancas, y tiene que ver con que a mí me atraviesa un sistema que también es colonial y que es racista", revela Bertha Sánchez.
Prioridades de los feminismos
Preguntada por las prioridades del feminismo, la integrante de Calala afirma que en España lo más urgente es aprobar la Iniciativa Legislativa Popular de regularización: "Impacta en la vida de cientos de miles de personas, contribuiría a reconocer el trabajo de las personas migrantes y ayudaría a contrarrestar todo el discurso de odio". Asimismo, apunta que otra demanda importante es resolver la crisis de los cuidados, en especial en relación a las personas mayores. "Afecta a que las mujeres puedan hacer un tipo de vida u otra y hay que reconocer los derechos laborales de las trabajadoras del hogar y los cuidados, que son en gran mayoría mujeres migrantes latinoamericanas", sentencia.
Nilufar Saberi, que lleva años luchando por los derechos de todas las mujeres, especialmente por los de las iraníes, opina que la prioridad es "cuidar muchísimo nuestras leyes". Pone de ejemplo Irán, que, a su juicio, era un país "puntero" en cuanto a derechos en su zona antes de la llegada de los islamistas al poder. "Lo perdimos de la noche a la mañana", lamenta.
“Hay que luchar contra el ‘antigitanismo’ y los discursos de odio que están en auge“
Para Beatriz Carrillo, la prioridad es que haya políticas públicas que cambien situaciones que desembocan en que las mujeres gitanas tengan una esperanza de vida de diez años de diferencia y que palien la desigualdad educativa -hay una infrarrepresentación de mujeres gitanas en las universidades-. También reivindica que la realidad gitana "está en una posición de pobreza, exclusión y marginación", por lo que hay que luchar contra el antigitanismo y los discursos de odio que están en auge.
Por último, Olalla cree que hay que invertir en las asociaciones y pequeñas entidades de mujeres, que no tienen financiación y que suponen el único recurso para las mujeres víctimas de violencia de género.
