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Italia permite por primera vez encuentros íntimos entre los presos y sus parejas

  • Una sentencia del Tribunal Constitucional tacha de "ilegítima" la privación de "afectividad" de los condenados
  • Las llamadas visitas conyugales son una práctica habitual en otros países europeos como España, Francia o Alemania
Italia permite por primera vez encuentros íntimos entre presos y sus parejas
Corredor de una prisión. GETTY IMAGES
RTVE.es / AGENCIAS

Italia ha permitido por primera vez un encuentro íntimo entre un preso y su pareja después de que una sentencia del Tribunal Constitucional (TC) tachara de "ilegítima" la privación de "afectividad" de los condenados y concediera el permiso para que los presos mantengan este tipo de reuniones sin un guardia como testigo el pasado febrero.

La sentencia del TC puso de manifiesto que las llamadas visitas conyugales están permitidas en la mayoría de los países europeos, entre ellos, España, Francia, Alemania, Países Bajos o Suecia.

La prisión de la ciudad de Terni ha sido la primera del país en acoger una visita conyugal, para lo cual habilitó una habitación provista de una cama de matrimonio, televisión, baño, ducha, dos sillas y una mesa.

La sala, diseñada expresamente para preservar la intimidad, afectividad y máxima discreción posible, ha sido usada para un encuentro entre un reo internado en el área de máxima seguridad con su pareja, según han informado medios locales.

Solo 32 prisiones entre las 190 de Italia tienen instalaciones adecuadas

Por ahora, solo 32 centros penitenciarios entre los 190 existentes en Italia tienen instalaciones adecuadas para habilitar este tipo de salas y se trata de un sistema que aún se está poniendo en marcha.

El Tribunal Constitucional, en una sentencia publicada el pasado mes de enero, tachó de "ilegítima" parte de una norma que desde 1975 imponía que todo encuentro entre el detenido y un pariente fuera a la vista de un funcionario, algo que obviamente limitaba, cuando no impedía, cualquier tipo de relación sexual.

Por eso, hasta la fecha un preso en Italia solo podía disfrutar de intimidad con la pareja en libertad, mediante permisos otorgados solo en determinadas y contadas circunstancias y por los que esperan años.

En el caso del reo encarcelado en Terni, este se amparó en la sentencia del Constitucional y pidió permiso para poder cumplir "sus deseos de paternidad" con su novia, según trascendió meses atrás. Tras ello, un tribunal italiano falló a favor suyo y ordenó que se cumpliera con la voluntad de intimidad del preso.