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Tierras raras a cambio de apoyo: el "quid pro quo" de Trump en Ucrania

Trump y Zelenski durante su último encuentro en la catedral de Notre-Dame el pasado mes de diciembre
AITOR SÁNCHEZ

Donald Trump quiere las tierras raras de Ucrania. Hace unos días, el presidente de Estados Unidos propuso un trato a Zelenski: tierras raras y "otras cosas" a cambio del apoyo estadounidense. El argumento de Trump es que las tierras raras ucranianas son la garantía de que Estados Unidos va a recuperar todo el dinero que ha puesto hasta ahora en Ucrania. El presidente ucraniano, consciente de que ese apoyo es vital, recogió el guante rápidamente. "Hagamos un trato. Es una victoria para todos", dijo Zelenski.

De hecho, según dijo Trump en Fox News, ese acuerdo está ya hecho. "Les dije que quiero el equivalente a 500.000 millones de dólares en tierras raras y ellos han accedido", afirmó Trump. Puede que algún día sean rusos o puede que no lo sean. ¿Qué son las tierras raras y por qué son tan importantes? ¿Puede funcionar el acuerdo que Trump ha propuesto a Zelenski? Lo analizamos en el nuevo capítulo del pódcast 'Diario de Ucrania' con Ester Boixereu, vocal del Colegio Oficial de Geólogos de España, y con Víctor Burguete, investigador sénior en el área de Geopolítica Global y Seguridad de CIDOB.

¿Qué son las tierras raras y por qué son tan importantes?

Son 17 elementos químicos que tienen la peculiaridad de que no se encuentran aislados en la naturaleza, sino que se aparecen agrupados en otros minerales. Se descubrieron en el siglo XVIII, pero no se comenzaron a utilizar de forma intensiva hasta las segunda mitad del siglo XX. "Fue a partir de entonces, con el avance de la electrónica, cuando empezaron a ser fundamentales por sus propiedades ópticas, que permiten hacer pantallas de colores, y por sus propiedades magnéticas", explica Boixereu.

Con algunos de estos elementos se pueden hacer imanes muy pequeños y potentes, esenciales para muchos sectores de la industria actual, como por ejemplo, el de las energías renovables. Se llaman tierras raras, pero en realidad no son tan extrañas para nosotros, aunque no nos demos cuenta. Las tenemos muy cerca, formando parte de cosas que utilizamos en nuestra vida cotidiana. "Por ejemplo, en los coches. Los elevalunas y los altavoces pequeñitos llevan este tipo de imanes".

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Su importancia geopolítica radica en que los principales yacimientos mundiales se encuentran en China, que tiene un dominio apabullante sobre la extracción y explotación de las tierras raras. De ahí el interés de Trump. "Este movimiento de Trump hay que interpretarlo, por un lado, dentro de la competición global que hay por las materias primas, la competición global tecnológica entre Estados Unidos y China y, por otro lado, con la voluntad de Ucrania de intentar enganchar a Estados Unidos en el compromiso de la defensa de Ucrania por todos los medios", asegura Víctor Burguete.

¿Qué tierras raras y minerales tiene Ucrania?

Ucrania es un país muy rico en minería y en materiales que son importantes para la economía mundial. "En Ucrania hay bastantes yacimientos de tierras raras en un cinturón que va en dirección noroeste-sureste", asegura Ester Boixereu, pero, tiene carbón, petróleo, gas, hierro y otros elementos muy importantes para la Unión Europea, como el lito, fundamental para la fabricación de baterías, el titanio y el berilio, muy importante porque permite hacer aleaciones ligeras.

El problema para Ucrania es que una parte importante de esos recursos están en territorio ocupado por Rusia o en zonas atravesadas por el frente de guerra. "Lamentablemente para Ucrania, la mayor parte de la riqueza se encuentra en el sureste, que es donde estaba la mayor parte de la industria, confirma Boixereu.

¿Un "win-win" para Trump y Zelenski?

La ubicación de esas tierras raras y las dudas sobre cuántas de ellas sería capaz de suministrar Ucrania son algunas de las sombras que presenta el posible acuerdo entre Trump y Zelenski. Algunas de ellas se encuentran en el Donbás, por ejemplo, parte del litio o parte del berilio. Por tanto, aquellas zonas ocupadas por Rusia, difícilmente va a ser accesibles por parte de Estados Unidos en el corto plazo", explica Víctor Burguete.

"Creo que hay cierta aproximación simplista por parte de la administración Trump. Son inversiones cuya explotación pueden llevarte diez años o más. Desde el punto de vista de Ucrania puede ser muy interesante si obtiene garantías de seguridad en un plazo de 15 años, pero claro, estás pidiéndole a Estados unidos que se compromete a largo plazo, cuando unos de los objetivos de Trump era retirar el apoyo militar a Ucrania y pasarle la pelota a los europeos", concluye Burguete.