Zelenski asegura estar dispuesto a negociar directamente la paz con Putin y el Kremlin tacha sus palabras de "vacías"
- EE.UU. y Rusia piden como condición para el alto el fuego la celebración de elecciones en Ucrania
- Sigue en directo la guerra en Ucrania


El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha declarado que está dispuesto a entablar negociaciones directas con su homólogo ruso, Vladímir Putin, para poner fin a la guerra iniciada hace casi tres años. Según el ucraniano, de producirse esta conversación, Estados Unidos y Europa también deberían participar en cualquier mediación. Este anuncio llega en medio de los rumores de un alto el fuego en territorio europeo después de que el nuevo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, haya asegurado que pondrá fin al conflicto.
"Si la gente cree que debemos pasar a la vía diplomática, y yo creo que estamos preparados, deben estar Estados Unidos, Europa, Ucrania y Rusia", ha indicado Zelenski al periodista británico Piers Morgan en una entrevista emitida en su canal de YouTube. De la misma forma, ha apuntado que sentarse frente a Putin en la mesa de negociaciones "era la única configuración" para "llevar la paz a los ciudadanos de Ucrania".
Por su parte, el Kremlin ha tachado de "vacías de contenido" las declaraciones de Zelenski sobre las negociaciones. "El hecho de estar dispuesto debe basarse en algo. Hasta ahora, esto solo puede percibirse como palabras vacías", ha declarado este miércoles el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, en su rueda de prensa diaria. Él mismo ha vuelto a recordar que el ucraniano emitió en octubre de 2022 un decreto que prohibía toda negociación mientras Putin estuviera en el poder en Rusia, en represalia por la decisión del Kremlin de reclamar la anexión de cuatro regiones ucranianas. "A pesar de todo, seguimos abiertos a las negociaciones", ha proseguido Peskov, considerando que "la realidad sobre el terreno" debería convencer a Kiev de "mostrar apertura e interés por dichas negociaciones".
Zelenski, que desde hace tiempo había pedido como condición previa a la paz la salida de todas las tropas rusas de Ucrania, también ha hablado en las últimas semanas de la necesidad de entablar conversaciones para llevar el conflicto a un final "justo". Mientras que los objetivos de Kiev se mantienen en preservar sus fronteras previas a la guerra y asegurar su incorporación a la OTAN, Moscú pretende conservar las regiones del Donbás y alejar a Ucrania de la Alianza Atlántica. "Lo considero un enemigo y, sinceramente, creo que él también me considera a mí su enemigo", ha declarado Zelenski en la entrevista que se emitió el martes.
En su conversación con el periodista británico, Zelenski también ha vuelto a plantear la posibilidad de que Ucrania obtuviera armas nucleares si no se unía rápidamente a la OTAN. Como respuesta, Peskov ha afirmado el miércoles que estas declaraciones "rozan la locura", y ha pedido a los aliados de Kiev que sean conscientes de los "peligros potenciales de discutir este tema en Europa".
La última reunión entre ambos mandatarios tuvo lugar en París en 2019. Duró menos de un cuarto de hora y ambos líderes hablaron de un proceso de paz sobre la enquistada guerra en este de Ucrania, que está activa desde 2014.
¿Elecciones en Ucrania?
Por su parte, el Kremlin, cuyas fuerzas llevan meses ganando terreno en su avance en el este de Ucrania, dijo esta semana que era demasiado pronto para plantear conversaciones a cuatro bandas. Su portavoz, Dmitry Peskov, volvió a señalar a Zelenski como un líder "ilegítimo" por haber permanecido en el poder más allá del tiempo de su mandato.
Tras el inicio de la guerra en 2022, la vida política ucraniana, normalmente febril, quedado arrinconada ante la ley marcial. El mandato de cinco años del presidente terminó el pasado mayo y Putin, que lleva 25 años en el poder, dice que Zelenski no es un líder legítimo en condiciones de negociar porque no se han celebrado elecciones. El ucraniano ha declarado en reiteradas ocasiones que las elecciones se celebrarán inmediatamente después del fin de la ley marcial, declarada para dotar al Estado de poderes de emergencia para luchar contra Rusia. La legislación prohíbe explícitamente la celebración de comicios.
Ahora, tras la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, Estados Unidos ha pedido que Ucrania celebre elecciones a finales de año para poder poner fin a la guerra y, como respuesta, la política ucraniana ha comenzado a emerger y los medios ucranianos ya se han hecho eco de algunas reuniones políticas enfocadas a una posible campaña electoral. Los políticos ucranianos, tanto del gobierno como de la oposición, afirmaron que la celebración de elecciones antes de que termine la guerra podría socavar la unidad nacional.
Sin embargo, los funcionarios estadounidenses afirman que no se ha tomado ninguna decisión política y que su estrategia sobre Ucrania está evolucionando. Trump dijo que pondrá fin a la guerra en Ucrania lo antes posible y se mostró dispuesto a reunirse con Putin. El presidente ruso, por su parte, felicitó al estadounidense por su elección y afirmó que está dispuesto a reunirse con él para hablar sobre Ucrania y la energía. Pero la duda sobre Trump se sigue manteniendo en cómo presionará para alcanzar un acuerdo que satisfaga a ambas partes.
La ayuda a Ucrania, en duda
Los políticos republicanos llevan más de un año criticando el envío de armas a Ucrania por parte de la administración Biden. Hasta la fecha, Estados Unidos era el país que más armas enviaba a Kiev con cerca de 300.000 millones de dólares, pero tras la vuelta de Trump a Washington, el magnate ha cambiado el tablero.
Esta semana, Trump afirmó que quiere que Ucrania entregue a Estados Unidos minerales de tierras raras, clave para innovaciones tecnológicas, a cambio de la ayuda que la Casa Blanca está proporcionando. "Les estamos diciendo a los ucranianos que tienen tierras raras muy valiosas. Queremos que lo que ofrecemos se garantice de alguna manera. Queremos una garantía", declaró ante los medio.
Como respuesta, el Kremlin calificó que estos los comentarios muestran que ahora Estados Unidos quiere que Ucrania pague por la ayuda estadounidense en lugar de recibirla de forma gratuita.