Enlaces accesibilidad

"Los dos Estados no es la solución al conflicto palestino-israelí, es el problema"

  • RTVE entrevista a Jaldía Abubakra, exiliada política nacida en Gaza que vive en España
  • España reconocerá oficialmente a Palestina el próximo 28 de mayo

Por
Banderas palestinas en Zaragoza
Banderas palestinas en Zaragoza CHA / EFE

Jaldía Abubakra nació en Gaza, Palestina y es, por tanto, apátrida. Su único pasaporte es el de España, a donde llegó como exiliada política en 1985. El reconocimiento del Estado palestino no cambiará, por ahora, su situación. Forma parte de distintos movimientos en favor de la causa de Palestina, como el Movimiento Masar Badil (Ruta Alternativa Revolucionaria Palestina), que reúne voces de la diáspora palestina. Responde a RTVE sobre las consecuencias del reconocimiento del Estado palestino por parte de España, Irlanda y Noruega.

PREGUNTA: ¿Cambiará algo la situación?

RESPUESTA: No cambiará nada. La situación de Palestina es una situación muy peculiar. En lugar de independizarse o tener el derecho a la autodeterminación con la descolonización cuando estaba bajo el mandato británico, se fundó un Estado de unos colonos extranjeros dentro del territorio palestino. El proyecto sionista, desde el primer momento, lo que pretendía es colonizar el territorio y expulsar a la población. No es como cualquier otra colonización que viene a gobernar a una población, a explotar sus recursos humanos, su fuerza de trabajo y los recursos naturales, sino que vino a asentar a una población foránea en el territorio y reemplazar a la población autóctona. Y eso es lo que ha ido sucediendo durante la Nakba, de la que ya se cumplen 76 años.

El Estado no es el objetivo final del pueblo palestino, sino la liberación del territorio, el retorno de las refugiadas y refugiados, que hoy en día somos alrededor de siete millones de personas, con un derecho reconocido por resoluciones de las Naciones Unidas, que nos garantiza el retorno y que a día de hoy todavía no se permite. En cualquier otro conflicto en el mundo, cuando se acaba el conflicto armado, la población que ha salido puede volver. En cambio, a los palestinos no se nos permite volver porque forma parte de la esencia de lo que es la entidad sionista de Israel de no querer población autóctona palestina en el territorio.

P: Por tanto, ¿el reconocimiento no tiene ningún efecto práctico?

R: Hasta ahora hay 138 países que reconocen a Palestina como Estado, pero es un Estado ficticio y esto no ha servido para nada. No ha cambiado las cosas, no ha cambiado los hechos, no ha dado derechos al pueblo palestino, como podemos ver ahora, cuando estamos viviendo un genocidio a gran escala. El genocidio y la limpieza étnica contra el pueblo palestino no han parado desde el principio. Hay épocas que se ha sufrido con más intensidad, como en el 48, en el 67, durante las Intifadas, pero a lo largo del tiempo, poco a poco, siempre en la entidad sionista, Israel ha ido cometiendo su política de limpieza étnica, expulsando a los palestinos, haciéndoles la vida imposible, asesinando, dificultando, quitándoles todos sus derechos humanos más básicos para que se vayan voluntariamente o no tengan ninguna forma de vida dentro del territorio palestino.

Ahora llevamos casi ocho meses de un genocidio televisado, que todo el mundo lo ve y todo el mundo lo sabe, que está siendo juzgado por la Corte Internacional de Justicia. Lo primordial ahora es parar el genocidio y para eso hay que aplicar sanciones al Estado de Israel. Hay que cortar relaciones porque, si no, ¿por qué iban a parar? El hecho de que vengan disfrutando de una impunidad y un apoyo por parte de las potencias internacionales todo este tiempo les ha dado la arrogancia de seguir haciendo lo que están haciendo. Para ayudar al pueblo palestino hay que imponer sanciones, hay que cortar relaciones de alguna manera. Hay que presionar al régimen sionista para que pare los crímenes que está cometiendo contra el pueblo palestino. 

P: ¿Cree que el reconocimiento tiene un sentido simbólico?

R: Yo creo que es más que algo simbólico, porque ¿por qué no se ha hecho antes del 7 de octubre? Ya llevamos tantos años con esto, ¿por qué no se ha hecho? Porque a nadie le importaba lo que estaba pasando en Palestina. Ahora viene a ser como una limpieza de imagen, un maquillaje de que no se están tomando medidas para salvar a la población palestina, que está siendo masacrada. Ahora se hace hacer una declaración de reconocimiento de Estado, pero no nos dicen qué va a pasar, dónde va a estar este Estado, qué condiciones va a tener, si se van a levantar los asentamientos en Cisjordania, o derribar el muro, contra el que hay una sentencia desde el 2004 para que se elimine esa separación en Cisjordania…

O el bloqueo a Gaza, y las más de 10.000 personas encarceladas, entre ellos niños personas enfermas, todas las violaciones hacia las personas palestinas que se cometen en las cárceles israelíes. ¿Qué va a pasar? ¿Con qué gobierno van a tratar cuando reconocen un Estado? ¿A un gobierno elegido democráticamente por el pueblo palestino, como ha pasado en el 2006? Porque entonces el pueblo había elegido un partido al que no le gusta el imperialismo occidental y se le ha negado el derecho a gobernar. Quieren un gobierno hecho a la medida de Israel y los países occidentales, que diga que sí a todo, que cumpla las órdenes que se le dan. Como el gobierno de Vichy en Francia, la Autoridad Nacional Palestina colabora con la ocupación encarcelando a la población palestina, reprimiendo a la población insurgente, a la población que se organiza para defender sus derechos. Es una tomadura de pelo.

P: Israel sí cree que es importante y ha retirado a sus embajadores de España, Irlanda y Noruega. ¿Cómo lo valora?

R: Es la arrogancia del gobierno israelí. Se permite el lujo de castigar él a los otros gobiernos que toman alguna medida, aunque sea ficticia, hacia los palestinos, en vez de hacerlo desde aquí. Nosotros, los países europeos, los países soberanos, podríamos cortar relaciones porque están cometiendo crímenes y hasta los hacen cómplices de ellos cuando vende y compra armas a Israel. Pero en lugar de romper relaciones, les están castigando ellos. Han creado un monstruo al que ya no pueden enfrentarse, no se atreven. O sea, ¿cómo se atreve el gobierno de Israel a amenazar a un gobierno soberano como el de España, Noruega o Irlanda o cualquier otro? A esto hay que darle una vuelta también.

P: ¿Se está escuchando la voz de los palestinos?

R: No se está respetando el derecho autodeterminación del pueblo palestino. No nos tomaron en cuenta en el 47, cuando las Naciones Unidas tomaron la resolución de la partición de Palestina. No se nos preguntó cuando se firmaron los Acuerdos de Oslo. Al pueblo palestino no se nos toma en cuenta. De hecho, pienso que también pretenden proteger a esa colonia occidental en el corazón del mundo árabe, de lo que llaman Oriente Medio, esa colonia que sirve a los intereses de Occidente. Ocurre cada vez que el pueblo palestino se levanta para defender sus derechos.

Pasó en la Intifada del 87, que se convocó la Conferencia de Paz de Madrid y luego los Acuerdos de Oslo. Ahora que el pueblo palestino se ha levantado en contra de la ocupación y la colonización en defensa de sus derechos nos vienen con esto porque también se ve que desde la población civil internacional hay un apoyo tremendo hacia la causa palestina y la lucha y la resistencia palestina. Hoy estamos viendo voces por todo el mundo saliendo a la calle, diciendo Palestina libre, “desde el río hasta el mar”. Incluso estamos viendo algo inédito que son cada vez más voces judías en contra del Estado de Israel diciendo que Palestina tiene que ser libre, que el Estado de Israel no habla en nombre de las comunidades judías y que ellos están en contra del Estado de Israel y están a favor de la lucha del pueblo palestino por la liberación de Palestina.

P: ¿Qué piensa de la solución de los dos Estados?

R: Los dos Estados no es la solución, es el problema. Se creó el problema con la partición de Palestina porque antes en Palestina convivían judíos, cristianos, musulmanes, personas de cualquier etnia o color. La gente convivía como ciudadanos normales, iguales en derechos y en deberes. Se ha creado la fórmula de los dos Estados, que es lo que ha generado el problema. Lo que hay que apoyar es una Palestina libre, donde viva todo el mundo con igualdad de condiciones y de derechos.