Enlaces accesibilidad
Objetivo Igualdad

Lo que el porno enseña a los adolescentes: "El sexo no se negocia"

  • Más del 60% de los adolescentes ha visto porno alguna vez en su vida
  • La edad media a la que ven porno por primera vez es a los 12 años, aunque algunos lo hacen desde los 8 años
  • 'Porno en la adolescencia', en Objetivo Igualdad, sábado 11h en La2 y domingo 14:30h en el Canal24h

Por
Joven mirando la pantalla de su móvil
Joven mirando la pantalla de su móvil

Más del 60% de los adolescentes ha visto pornografía alguna vez en su vida. Los jóvenes ven este tipo de contenidos a edades muy tempranas, según una encuesta de Save The Children, a los 12 años de media, aunque a veces es antes. Unos contenidos que impactan de forma directa en su forma de concebir las relaciones sexuales.

El sexo no se negocia en el porno

En palabras de Carmela del Moral, responsable de políticas de infancia en Save The Children, la pornografía mainstream está marcada por el machismo, la violencia y la desigualdad. Los que consumen de manera frecuente muestran interés por los vídeos donde se observan jerarquías de poder de forma muy explícita y el 52,1% opina que este consumo le ha influido mucho en sus relaciones sexuales.

A edades tan tempranas, están aprendiendo a través de la pornografía en qué consiste el sexo. En muchos de estos vídeos las mujeres no muestran deseo o se niegan a mantener esas relaciones, pero esto no disuade a los hombres durante el relato pornográfico.

Para Rosa Cobo, profesora de sociología y escritora, les inculca la idea de que “el sexo no se negocia, lo imponen los varones”. Mónica Alario, doctora en estudios de género, añade que la lección que aprenden ellas es mucho más cruel: “Tú no puedes poner límites y si lo intentas, la violencia que vas a sufrir va a ser mayor".

"Ellas aprenden que no pueden poner límites"

Carmela del Moral y Rosa Cobo durante su entrevista para el programa Objetivo Igualdad

Carmela del Moral y Rosa Cobo durante su entrevista para el programa Objetivo Igualdad cropper

Violencia contra la mujer

"En torno al 76% reconoce que consume pornografía hardcore”, nos explica el profesor de métodos de investigación y doctor en sociología, Lluis Ballester. Son vídeos, desde su punto de vista, denigrantes y con una violencia explícita hacia las mujeres.

Desde el punto de Mónica Alario, erotizan la violencia sexual. Más de la mitad ha puesto en práctica conductas que ha visto en el porno y el 10% lo hizo sin consentimiento de sus parejas.

Rosa Cobo alerta de que cada vez más hombres adultos acuden a las consultas de terapia porque tienen una “extraordinaria dificultad para tener unas relaciones sexuales negociadas”, ya que solo se excitan con la violencia.

Además, la pornografía omite por lo general el uso de métodos anticonceptivos de barrera que impiden el contagio de enfermedades e infecciones sexuales. Ellos toman ejemplo y más del 13% de los adolescentes reconoce que nunca usa métodos anticonceptivos.

El algoritmo

Casi el 30% de los adolescentes busca porno activamente, pero el 15% se lo encuentra de manera casual navegando por la web. Incluso los vídeos que ven muchas veces no los seleccionan a propósito, se reproducen de manera aleatoria en función de lo que decida el algoritmo, según los expertos.

"Hay mecanismos para captar la atención que no son inocentes, están muy bien pensados, se basan en investigación y hay ingenieros detrás sofisticándolos”. Lluis Ballester nos explica que están diseñados para generar adicción.

Agresiones sexuales

"Hay una relación directa entre el aumento de agresiones sexuales entre menores y el consumo de pornografía", señala Rosa Cobo. Lluis Ballester coincide y apunta al porno como culpable del repunte de agresiones sexuales en grupo en los últimos años. Según la Fundación ANAR, suponen un 10,5% del total.

Destaca, además, que las denuncias por abuso sexual filmando a menores han aumentado drásticamente en los últimos años. Algo que desde su punto de vista no puede ser casual, más cuando en algunos juzgados los agresores alegan como defensa que “estaban grabando una porno”.

Mónica Alario nos explica que el vídeo porno más visto en estas páginas cuenta con 250 millones de visitas y que se trata de una violación en grupo de cuatro hombres a una mujer. “¿Cómo podemos explicar que tantos hombres hayan sido capaces de excitarse con unas imágenes tan dolorosas?", se pregunta.

¿Cómo tantos hombres pueden excitarse con imágenes tan dolorosas?"

Opina que, según avanzamos hacia sociedades más igualitarias, los hombres que se resisten a perder privilegios sienten la necesidad de obtener ese control y poder sobre las mujeres en otros terrenos como el de la sexualidad.

Industria de la explotación sexual

El 72% de las víctimas de trata son mujeres y el 94% acaba en prostitución y pornografía. No son negocios sin vinculación. En las páginas porno hay multitud de anuncios ofreciendo servicios sexuales.

"No te masturbes todavía, si tienes 30 euros, esta práctica sexual que a ti te fascina la vas a encontrar a 500 metros de tu casa", cuenta Ballester para ejemplificar cómo se publicitan. El 13,8% de los adolescentes ha contactado con desconocidos por internet con fines sexuales.

Educación sexual

Por lo general, cuando los adolescentes tienen sus primeras clases de educación sexual ya han consumido porno. Llegan tarde, pero aun así más de la mitad quieren recibir más información.

Para Mónica Alario la educación tiene que ir mucho más allá de la sexualidad para solucionar este problema del que empezamos a tener consciencia. "Si enseñamos a los chicos desde pequeños a potenciar la empatía no podrán excitarse cuando se encuentren con la pornografía”, defiende.