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Ian deja de ser huracán y se degrada a ciclón postropical en Carolina del Sur

  • Hay riesgo de inundaciones y tornados por las próximas zonas a donde se dirige
  • Florida confirma 23 muertos por el huracán, y la CNN los eleva a 45

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El paso del huracán causó graves daños en Matlacha, Florida.
El paso del huracán causó graves daños en Matlacha, Florida.

El huracán Ian se ha degradado rápidamente a un sistema postropical este viernes poco después de tocar tierra en Carolina del Sur, en EE.UU., con categoría 1 y vientos máximos sostenidos de 85 millas por hora (140 km/h).

Según el último parte del Centro Nacional de Huracanes (NHC) estadounidense, Ian continúa ofreciendo "marejada ciclónica peligrosa, inundaciones repentinas y vientos fuertes".

A las 17.00 hora local (21.00 GMT), el centro de Ian fue localizado a 35 km al noroeste de Myrtle Beach (Carolina del Sur) y sus vientos sostenidos bajaron ahora a 110 km/h. El ciclón postropical se mueve hacia el norte a una velocidad de cerca de 24 km/h y se pronostica que se moverá tierra adentro durante esta noche al este de Carolina del Sur.

Luego se moverá a través del centro de Carolina del Norte mañana por la mañana y hacia el oeste de Virginia. Está previsto que se disipe sobre el oeste de Carolina del Norte o Virginia el sábado por la noche, ha detallado el NHC. El sistema puede ocasionar marejadas ciclónicas en la costa de las Carolinas con subida del nivel del mar de hasta un máximo de 7 pies (2,1 metros).

Se esperan lluvias intensas

Las vigilancias y avisos emitidos por el NHC van desde el noreste de Florida hasta Carolina del Norte. Los vientos con fuerza de tormenta tropical se extienden hacia afuera hasta 335 km. Además de marejada ciclónica, Ian va a descargar lluvias intensas, con riesgo de inundaciones y desborde de ríos, y oleaje y corrientes en el mar. También hay riesgo de tornados en las zonas por donde pasará Ian, que tocó tierra este viernes en Georgentown, Carolina del Sur (EE.UU.), la tercera vez que lo hace desde su formación en el centro del Caribe el fin de semana pasado.

Según datos recientes, Ian en 36 horas pasó de tormenta tropical a huracán de categoría 4, algo que científicos atribuyen al cambio climático.

Desde su formación en el centro del Caribe el fin de semana pasado, Ian, el cuarto huracán de 2022, ha dejado una estela de destrucción, especialmente en el oeste de Cuba y Florida, donde cruzó de oeste a este la península para alcanzar el Atlántico.

Una labor extensa de rescate y de afrontar daños

Se perfila como el huracán más devastador de la historia del estado y que deja hasta ahora daños incalculables en infraestructura, mientras se mantiene todavía incertidumbre sobre el número de muertos.

De momento, las autoridades de Florida han confirmado este viernes que al menos 23 personas murieron como consecuencia del huracán, una cifra que todavía podría aumentar considerablemente y que según el recuento de la cadena de televisión CNN es ya prácticamente el doble, 45.

La cifra oficial de 23 muertos ha sido publicada por la Comisión de Forenses Médicos de Florida, que también informó de que las víctimas tienen entre 22 y 92 años. En su mayoría presentaron signos de haber fallecido ahogadas.

La prioridad ahora es llegar a todas las personas que permanecen aún aisladas en zonas inundadas. Las condiciones son muy complicadas aún en muchas áreas, la incomunicación agrava el rescate y además 1,7 millones de abonados continúan sin servicio eléctrico, según datos de PowerOutage, una web especializada en apagones.

Miles de personas continúan atrapadas por las inundaciones en sus casas y algunas carreteras están intransitables, en especial en la costa oeste, que esperan la ayuda enviada por el Gobierno federal a través de los soldados de la Guardia Nacional desplazados a unos 20 de los 67 condados de Florida.

Un equipo con drones también ayuda en la evaluación de daños y rescate a cargo de unos 7.000 soldados de la Guardia Nacional de Florida y otros estados, y están aterrizando también helicópteros para operaciones de rescate en islas que quedaron totalmente incomunicadas.