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Estados Unidos

Biden pide al Senado que se prohíban las armas de asalto

  • El presidente de Estados Unidos vuelve a reclamar medidas para regular las armas tras los recientes tiroteos
  • Propone aumentar la edad para comprarlas de 18 años a 21

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El presidente de Estados Unidos, Joe Biden
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha pedido en un discurso a la nación que se prohíban las armas de asalto y los cargadores de alta capacidad, mientras el país sigue teiendo en la memoria la reciente masacre de Uvalde (Texas), en la que murieron 19 niños, y legisladores de ambos partidos discuten sobre el control de armas de fuego.

"Necesitamos prohibir las armas de asalto y los cargadores de alta capacidad. Y si no podemos prohibir las armas de asalto, deberíamos aumentar la edad para comprarlas de 18 a 21 años", ha dicho Biden en una intervención pronunciada en horario de máxima audiencia a las 19:30 hora local del jueves.

En un discurso de cerca de 20 minutos en el que ha repetido una y otra vez que "es suficiente", Biden ha vuelto a lanzar una serie de peticiones a los legisladores para que tomen medidas concretas para el control de las armas en el país, después de los recientes tiroteos de Uvalde, Búfalo (Nueva York) y Tulsa (Oklahoma).

Reforzar la seguridad en la venta de armas

En concreto, Biden ha solicitado que también se refuerce la verificación de antecedentes de los potenciales compradores, que se aplique la ley para garantizar el almacenamiento seguro de las armas y que se "derogue la inmunidad que protege a los fabricantes de armas".

"¿Cuántas carnicerías más estamos dispuestos a aceptar? ¿Cuántas vidas más de estadounidenses inocentes deben ser arrebatadas antes de que digamos basta?", ha subrayado en su discurso.

Según Biden, los supervivientes de las masacres tienen un mensaje para los políticos: "Hagan algo, solo hagan algo, por el amor de dios, hagan algo, porque después de Columbine, después de Sandy Hook, después de Charleston, después de Orlando, después de Las Vegas (...) no se ha hecho nada", ha dicho Biden en referencia a las principales matanzas que en los últimos años han golpeado el país.

El derecho a la posesión de armas "no es absoluto"

Situado en el extremo de una alfombra roja y un pasillo formado por 56 velas encendidas para representar las víctimas de tiroteos de los estados y territorios de Estados Unidos, Biden ha insistido en que la segunda enmienda de la Constitución estadoundiense, sobre el derecho a la posesión de armas, "como todos los demás derechos, no es absoluta".

"No se trata de arrebatarle los derechos a nadie. Se trata de proteger a los niños, de proteger a las familias. Se trata de proteger a comunidades enteras. Se trata de proteger nuestra libertad para ir a la escuela, a una tienda de comestibles, a una iglesia" sin ser asesinado a tiros, ha dicho Biden.

Conversaciones para acordar medidas en el control de las armas

Su intervención coincide con las conversaciones en las que desde la semana pasada participa un grupo de nueve senadores republicanos y demócratas para tratar de acordar medidas de control de armas de fuego que puedan recibir el apoyo de legisladores de ambos partidos.

Las medidas serían mucho más modestas que la prohibición de armas de asalto que defienden la mayoría de demócratas, incluido Biden, y se centrarían en reforzar la seguridad en las escuelas y financiar programas de salud mental, ambos requisitos de los republicanos.

También buscarían expandir la comprobación de antecedentes para poder comprar armas de fuego y dar incentivos a los estados para que aprueben leyes que permitan a las autoridades confiscar las armas de individuos considerados peligrosos.

Precisamente este jueves el Comité Judicial de la Cámara de Representantes -la Cámara Baja del Congreso- debatió una serie de medidas de control de armamento, recogidas bajo el título de Acta para la Protección de Nuestros Hijos.

Las medidas buscan introducir una limitación de diez balas por cargador, aumentar la edad mínima para poder comprar un fusil semiautomático de los 18 a los 21 años, y dar incentivos a los estados para aprobar leyes de confiscación de armas.

También buscan limitar el uso de "armas fantasma", que pueden comprarse por partes en internet y después montarse en casa, con lo que son imposibles de rastrear ya que no tienen número de serie.

Las recientes masacres han vuelto a llevar el debate sobre la posesión de armas a la opinión pública. Los republicanos condenan cualquier intento de limitar la capacidad de los estadounidenses de comprar armas de fuego, ya que argumentan que "lo único que detiene a un tipo malo con un arma es un tipo bueno con un arma".

Además, los demócratas no tienen mayoría en el Senado y están negociando con los republicanos para poder sacar adelante las medidas, que se debatirán la próxima semana en la Cámara de Representantes.