Enlaces accesibilidad

Expectación en EE.UU: el jurado del caso de George Floyd delibera ya tras los alegatos finales

  • El expolicía, Derek Chauvin, se enfrenta a una pena de hasta 75 años de cárcel
  • Chauvin está acusado de homicidio en segundo y tercer grado, y de homicidio involuntario

Por
Juicio por la muerte de Floyd: los últimos alegatos ponen fin al proceso

El jurado que juzga el caso de la muerte del ciudadano afroamericano George Floyd, durante una detención policial, se ha retirado a deliberar tras una vista en la que tanto la defensa como la acusación han presentado sus alegatos finales, y después de más de dos semanas de proceso judicial en el que el acusado, el exagente de la Policía de Mineápolis, Derek Chauvin, se abstuvo de dar su versión de lo ocurrido.

Chauvin está acusado de homicidio en segundo y tercer grado, y de homicidio involuntario en segundo grado, delitos que podrían suponer una pena de prisión de hasta 75 años de cárcel. A lo largo de estas dos semanas de proceso judicial, los fiscales de la acusación han llamado a declarar a casi 40 personas, entre testigos, peritos y expertos policiales, quienes han asegurado que hubo un uso excesivo de la fuerza por parte de Chauvin cuando, el 25 de mayo de 2020, con su rodilla presionó durante más de nueve minutos el cuello de un Floyd, quien imploraba poder respirar.

Por su parte, el abogado de Chauvin, Eric Nelson, ha llamado al estrado a siete testigos, centrando gran parte de su defensa en el historial médico de Floyd, así como en el consumo de sustancias estupefacientes previo al suceso y que le habrían provocado el colapso respiratorio, según su postura. Entre quienes declararon, no se encontraba el acusado, quien apeló a la Quinta Enmienda para no testificar.

"Las últimas palabras de George Floyd el 25 de mayo de 2020 fueron: 'por favor, no puedo respirar'. Y le dijo esas palabras al oficial. Le dijo esas palabras al acusado. Pidió ayuda con su último aliento, pero el señor oficial no le ayudó", ha afirmado durante su intervención final el fiscal Steve Schleicher.

"El lema del Departamento de Policía de Mineápolis es proteger con coraje. y servir con compasión. Pero George Floyd no era una amenaza para nadie. No estaba tratando de lastimar a nadie", ha continuado el fiscal, quien ha señalado que aquel día frente a Floyd no se necesitaba "coraje", sino "un poco de compasión", que "no se mostró".

"Durante 9 minutos y 29 segundos, George Floyd suplicó hasta que no pudo hablar más, y el acusado continuó. Cuando no pudo hablar, el acusado continuó. Cuando no pudo respirar, el acusado continuó. Más allá de que tuviera pulso, el acusado continuó con este asalto", ha enfatizado.

Violencia racial: muere un afroamericano en Mineápolis a manos de la policía

Un acto "desproporcionado y gratuito"

Ante la estrategia de la defensa de dirigir el juicio hacia las adicciones de Floyd, Schleicher ha recalcado que quien ha sido juzgado estas dos últimas semanas no ha sido la víctima, que tampoco lo fue en vida, sino Chauvin, quien "traicionó a la placa" y "abandonó sus valores" como policía.

"Esto no es un enjuiciamiento a la Policía, es un enjuiciamiento al acusado. Y no hay nada peor para un buen policía que un mal policía", ha expuesto.

En los momentos finales, el fiscal Schleicher ha enfatizado por qué Chauvin debería ser declarado culpable, pues tal y como marcan las leyes del estado de Minnesota, "si se comete un cierto nivel de agresión y la persona muere como resultado de esta agresión, se es culpable de asesinato".

Schleicher ha añadido que "lo que hizo el acusado constituye un delito grave de asalto. Esto no fue vigilancia policial. Fue innecesario, fue gratuito, fue desproporcionado. Y lo hizo a propósito. No hay duda. Esto no fue un accidente. No se tropezó y cayó sobre el cuello de Floyd. Lo hizo a propósito y le mató". Hasta seis médicos forenses han indicado que Floyd falleció asfixiado debido a la presión de la rodilla de Chauvin sobre su cuello.

Presunción de inocencia y valoración de pruebas

El abogado defensor, Eric Nelson, ha argumentado que el jurado debe asumir la presunción de inocencia y, partiendo de esa base, examinar las pruebas que se hayan presentado. En ese sentido, considera que la acusación "no ha podido demostrar la carga de prueba".

En cuanto a la "fuerza razonable" utilizada por el agente, Nelson recordó que otros dos policías no consiguieron meter a Floyd en el coche, por lo que Nelson decidió ejercer una "fuerza razonable mayor" para reducir al hombre. "Floyd tumbó los esfuerzos de tres policías estando esposado, solo con la fuerza de sus piernas y su cuerpo", ha destacado.

Así, ha recriminado a la defensa que se centre en los más de nueve minutos que estuvo Chauvin sobre Floyd, y no preste atención a los 16 minutos anteriores. "Intentan cambiar el punto de vista para modificar la premisa de qué haría un agente razonable", ha argumentado.

"Puedes respirar"

Nelson ha afrontado incluso la icónica frase "no puedo respirar", pronunciada por Floyd cuando estaba siendo reducido por Chauvin, y mostró grabaciones de video en las que una voz responde a Floyd: "estás hablando".

"Si puedes hablar, puedes respirar", ha aseverado el abogado, quien ha defendido que, aunque el uso de la fuerza pueda parecer "feo" para los transeúntes, "los policías razonables están al tanto de que cuando utilizan la fuerza, a veces lo que hacen no es agradable para la gente en general".

Asimismo, ha cuestionado la intencionalidad de Chauvin con el argumento de que había cuatro cámaras corporales en el lugar y cámaras de videovigilancia. "¿Alguien haría algo de intencionadamente sabiendo que están siendo observados?",ha planteado. "Todas las pruebas demuestran que Chauvin creía que estaba actuando según su entrenamiento", ha agregado.