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Al menos 50 heridos en Bangladesh en enfrentamientos entre trabajadores del textil y la Policía

  • Exigen subidas de salarios
  • El Gobierno prometió a las empresas garantizar su seguridad
  • El derrumbe del edificio de Savar expuso sus condiciones de miseria

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La Policía de Bangladesh ha disparado balas de goma para dispersar a miles de obreros del sector textil que exigían un aumento salarial. Las condiciones de miseria de los trabajadores bengalíes han quedado expuestas tras la el derrumbe de un edificio a las afueras de Dacca, en el que murieron 1.127 personas.

La cadena privada de televisión Ekattor, ha afirmado que 50 personas han resultado heridas.

La Policía, según la agencia AFP, afirma haber intervenido cuando los obreros han bloqueado el acceso a una autopista en la zona industrial de Ashulia, en la periferia de la capital, donde tienen su sede centenares de talleres de confección que sirven a conocidas marcas de ropa de Europa y norteamérica, como el estadounidense Walmart o el francés Carrefour.

"Piden mejores salarios. Hemos tirado balas de caucho y hemos hecho uso del gas lacrimógeno para dispersar porque se han vuelto violentos y han ocupado una carretera", ha declarado a AFP el jefe de la Policía de Ashulia, Badrul Alam.

Según su testimonio, alrededor de 20.000 personas han tomado parte en la manifestación. Según el jefe de Policía del distrito, Mustafizur Rahman, la cifra es de 12.000.

Algunos de los talleres cerraron durante varios días la semana pasada a causa de las protestas.

El viernes reabrieron, según la Asociación de Fabricantes y Exportadores del Textil de Bangladesh (BGMEA, en sus siglas en inglés), con la garantía gubernamental de "la mayor seguridad".

Los trabajadores, que a veces cobran 38 dólares (30 euros) al mes, han salido a la calle todos los días desde el derrumbe para reclamar mejoras en sus condiciones y la ejecución del dueño del inmueble, que desoyó las advertencias tras aparecer grietas en la estructura.

El salario mínimo mensual es de 38 dólares al mes desde 2010, un tratamiento recientemente calificado de "trabajo esclavo" por el papa Francisco. Los sindicatos reclaman salarios base alrededor de los 100 dólares (77 euros).

Bangladesh es el segundo exportador del mundo de ropa por los bajos salarios y la mano de obra abundante. El sector representa un 80% de las exportaciones del país.