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Islamistas secuestran a un grupo de extranjeros en una planta de gas en Argelia

  • Los asaltantes dicen retener a 41 extranjeros y a decenas de argelinos
  • Dos personas han muerto en el ataque, una de ellas extranjera
  • Un grupo afín a Al Qaeda lo reivindica en represalia por la intervención en Mali
  • La instalación asaltada es explotada por la británica BP y la noruega Statoil

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Un grupo afín a Al Qaeda reivindica el secuestro de 41 extranjeros en un planta de gas en Argelia

Un grupo armado ha secuestrado a varios ciudadanos extranjeros, entre ellos europeos, estadounidenses y japoneses, y 150 argelinos en un yacimiento de gas en el este de Argelia que seguía en poder de los atacantes horas después de iniciarse el asalto. Una facción de Al Qaeda ha reivindicado el ataque en represalia por la intervención en Mali y exige que Francia se retire de ese país. Al menos un extranjero ha muerto, según el Gobierno de Argel, aunque la agencia oficial eleva el balance a dos fallecidos, de los cuales uno de ellos británico.

Una cadena de televisión francesa ha podido hablar con uno de los secuestrados, que ha confirmado que los retenidos son 41 extranjeros, y ha confirmado que entre ellos hay británicos, japoneses, filipinos y malayos. También habría confirmado que otros dos trabajadores, un británico y un argelino, han muerto en un tiroteo acontecido durante el secuestro.

El único gobierno extranjero que ha informado con cierta precisión de los hechos ha sido el irlandés, quien ha confirmado que entre los rehenes hay uno de sus ciudadanos y ha pedido su "inmediata liberación". El Ejecutivo británico ha dicho que entre las personas afectadas hay varios de esa nacionalidad, sin más detalles. Estados Unidos y Noruega también ha informado de que tiene 13 ciudadanos secuestrados, lo mismo que han dicho de forma anónima fuentes del gobierno japonés.

Por su parte, El ministro argelino de Interior, Daho Uld Kablia, ha asegurado que Argelia no negociará con el grupo terrorista, que ha pedido al Gobierno abandonar el país pero las autoridades "no van a satisfacer sus necesidades".

El yacimiento de gas atacado a primera hora de este miércoles se sitúa en la localidad de Tiguenturin, cerca de la ciudad de In Amenas, fronteriza con Libia y muy cerca también de Túnez. Es explotado por British Petroleum (BP) en alianza con la petrolera local Sonatrach y la noruega Statoil.

Dos escenarios del ataque y múltiples fuentes

Más de 12 horas después del asalto todavía hay mucha confusión respecto al número de rehenes, víctimas y sus nacionalidades. De hecho, el asalto a sus instalaciones se mantenía por la tarde, según ha admitido la propia BP. "El contacto con el lugar es extremadamente difícil, pero entendemos que personas armadas están todavía ocupando el centro de operaciones de In Amenas", ha dicho la compañía desde Londres avanzada la jornada.

Ya cuando caía la noche, la agencia oficial argelina ha informado de que el grupo mantenía secuestrada a una veintena de trabajadores de nacionalidades noruega, británica, estadounidense, francesa y japonesa.

En la planta también trabajan decenas de empleados argelinos, muchos de los cuales contratados por la empresa francesa CIS Catering. Su patrón, Régis Arnoux, ha dicho que 150 de ellos no pueden abandonar las instalaciones aunque sí se pueden mover libremente por la planta, al contrario que los extranjeros, que están retenidos "en un rincón", informa France Presse. BP ha confirmado que ha interrumpido el bombeo de gas de la instalación atacada.

Por la tarde, la confusión crecía cuando un grupo islamista indicaba que el número de rehenes extranjeros era de 41, entre ellos siete estadounideses y diversos franceses, británicos y japoneses. Este grupo distinguía dos escenarios del ataque y decía retener a cinco rehenes en la planta y a 36 en "un alojamiento", sin concretar dónde.

Versión oficial de Argelia

El Gobierno de Argelia también ha dado cuenta de dos escenarios, aunque afirmaba que el segundo estaba bajo control de las autoridades locales y no de los asaltantes. Según el Ministerio del Interior, los "terroristas" llegaron hacia las cinco de la mañana hora local (misma hora en la España peninsular) al complejo --que incluye las instalaciones y la residencia de los trabajadores-- a bordo de tres vehículos.

La nota oficial señala que en un primer momento el grupo atacó un autobús de la empresa en el que viajaban empleados extranjeros que se dirigían al aeropuerto de In Amenas, un ataque que "fue repelido por las unidades de escolta" y en el que murió un ciudadano no argelino y resultaron heridas seis personas, cuatro de ellas extranjeras. Según la fuente, el autobús de la empresa llegó a In Amenas donde los empleados se pusieron a salvo "a cargo de las autoridades locales", según la traducción de Efe.

"El grupo terrorista, tras este intento abortado, se dirigió a las instalaciones, sitió una zona y tomó un número indeterminado de trabajadores como rehenes, entre ellos ciudadanos extranjeros", concluye la nota de Argel sin más detalles.

En cuanto a víctimas, la agencia oficial argelina APS ha informado de que en el ataque han muerto dos personas extranjeras, una de ellas británica, y se han registrado seis heridos, de los cuales dos son extranjeros. Algunas fuentes hablan de un muerto de nacionalidad francesa.

Un responsable de la guardia fronteriza libia ha dicho a Efe que los atacantes han huido en dirección a Túnez con varios rehenes a bordo de dos vehículos todo terreno. Según esta fuente, las fuerzas libias se han enfrentado a tiros con este grupo.

"Represalia" por la intervención en Mali

La agencia mauritana ANI así como la agencia France Presse han contactado con islamistas que han reivindicado el ataque en nombre del grupo liderado por Moktar Belmoktar, alias Bellawar, vinculado con Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI).

Según el portavoz citado por el medio africano, el ataque es una respuesta a la intervención francesa y al permiso concedido por Argelia para que las fuerzas armadas de su antigua potencia colonial sobrevuelen el espacio aéreo en su ofensiva contra los islamistas en Mali, que controlan el norte del país desde hace meses.

Los islamistas de Mali anunciaron ataques contra Francia en represalia a los ataques que comenzó hace unos días con el apoyo de otros países europeos. Un portavoz de los islamistas ha exigido a París que se retire de Mali para que los rehenes recupen su libertad. En otra comunicación han amenazado con matar a los rehenes si son atacados por las fuerzas argelinas que al parecer rodean el recinto. También han dicho que el complejo ha sido minado, siempre según la agencia INI citada por Reuters.

AFP, que cita a un empleado contactado por teléfono desde la planta, también ha informado de otra reivindicación de los asaltantes: la liberación de unos cien islamistas presos en Argelia. Por su parte, el ministro del Interior argelino, Daho Ould Kablia, ha descartado cualquier negociación, según APS.

En Argelia operan varios grupos armados y aquí tiene su germen AQMI, que opera en una amplia región y tiene sus guaridas en el gran desierto del Sáhara, que abarca numerosos países en las regiones denominadas del Magreb y el Sahel.

El martes, las autoridades argelinas anunciaron el cierre de la frontera con Mali, en el otro extremo del país donde se ha producido este ataque.

La provincia de Ilizi ya fue escenario en enero del año pasado del secuestro del entonces gobernador Mohamed Laid Jelfi, que fue rescatado en territorio libio por fuerzas de seguridad de ese país, recuerda Efe.

También ha sido frecuente en los últimos años el secuesto de ciudadanos europeos por grupos ligados a AQMI, entre ellos varios españoles, pero también franceses, que han tenido diversos desenlaces, desde operaciones militares de rescate hasta el pago de rescates.

Argelia es uno de los principales productores de hidrocarburos del mundo y el principal suministrador de gas natural a España, cuyas multinacionales también tienen grandes intereses en el país mediterráneo. El Ministerio de Exteriores español ha dicho que no tiene constancia de que haya españoles afectados por el ataque.