Aguirre "hoy no" hace declaraciones y Gallardón calla para "no perjudicar al partido"

• La presidente madrileña no ha querido comentar su desliz con un micro abierto
• Aguirre se alegró de que IU arrebatara un puesto en Caja Madrid al "hijoputa"

Aguirre y Gallardón guardan silencio

Aguirre llevaba este lunes zapato de tacón, pero no ha hecho declaraciones sobre su desliz del pasado viernes con un micrófono abierto. Gallardón tampoco ha querido hablar para "no perjudicar al partido", a pesar de que algunos le señalan como el destinatorio del "hijoputa" que soltó la presidenta madrileña.

La presidenta regional ha mostrado este lunes un absoluto mutismo en relación con su polémica frase sobre Caja Madrid captada por un micrófono abierto: "Creo que nosotros hemos tenido la inmensa suerte de poderle dar un puesto a IU quitándoselo al hijoputa".

Cuando los periodistas le han preguntado sobre ese asunto, ha respondido en tono irónico: "yo hago muchas declaraciones, pero hoy no".

Aguirre ha visitado a primera hora una residencia infantil de la Comunidad de Madrid para asistir a una clase magistral de cocina que daba el cocinero segoviano Cándido a un grupo de chavales del centro.

El acto ha suscitado una gran expectación mediática por el hecho de que era la primera comparecencia oficial de la presidenta después de que el pasado viernes pronunciara la polémica frase.

Más de una treintena de periodistas, fotógrafos y nos menos de una decena de cámaras de televisión han acudido al primer acto de Aguirre, que ha tenido lugar en el barrio madrileño de San Blas, sin conseguir arrancar a la presidenta una sola declaración respecto a su polémica frase.

Finalizado el acto, la presidenta ha abandonado la residencia de Las Rosas, protegida por sus escoltas, por la consejera de Familia y Asuntos Sociales, Engracia Hidalgo, y por los directivos del centro y otras autoridades que a duras penas han evitado que Aguirre fuera víctima de algún empujón o tropiezo en medio de tanta prensa deseosa de obtener alguna declaración suya.

Al final, lo único que ha dicho Aguirre ironizando a uno de los periodistas que le siguen habitualmente ha sido: "no voy a hacer ninguna declaración, querido. Ya sabes que hago muchas, pero hoy no".

Gallardón tampoco quiere hablar

El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, se ha negado a hacer algún comentario que "pueda perjudicar" a su partido, el PP, ante el interés de la prensa, que quería saber su opinión sobre las polémicas palabras del viernes pasado de Esperanza Aguirre.

La expectación por conocer la opinión del regidor madrileño ha llevado a numerosos periodistas a acompañarle hoy e su visita a un campo de césped artificial en Madrid, al que también asistió el vicealcalde, Manuel Cobo.

"No voy a hacer ningún comentario que perjudique a mi partido no sobre ninguna otra declaración", ha dicho el alcalde ante la insistencia de los informadores.

Tampoco Cobo ha hecho declaración alguna, después de que el sábado pasado se expresara sobre el asunto.

"No quiero pensar en lo que habría ocurrido si esas declaraciones las hubiera hecho yo mismo o Alberto Ruiz-Gallardón", dijo el vicealcalde entonces en alusión a las palabras de Aguirre.

Aguirre y Educación para la Ciudadanía

La vicepresidenta segunda del Gobierno, Elena Salgado, ha afirmado que las palabras que pronunció la semana pasada la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, sin saber que lo hacía ante un micrófono abierto ponen de manifiesto "la necesidad de la asignatura de Educación para la Ciudadanía".

En una entrevista en TVE, Salgado aseguró que las palabras eran muy expresivas "en su literalidad y significado" y demuestran que, cuando se trata del poder, el Partido Popular "es más intervencionista que nadie".

Por su parte, el portavoz de economía del PP, Cristóbal Montoro, ha indicado que en el Partido Popular se habla "como la gente" y que "es normal que se incurra en descalificaciones más o menos graves dependiendo de a quién se dirija", en relación a las palabras que pronunció la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, el pasado viernes.