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Aviones a prueba de rayos y dos sistemas para controlar su posición sobre el océano

  • "La incidencia de un rayo sobre el avión es mínima, casi siempre", explican desde el Sepla
  • Un avión de Air France desaparece en el Atlántico con 228 personas a bordo
  • El sistema convencional de control de los aviones es a través de radares
  • Si la nave está fuera de su alcance, los pilotos comunican sus coordenadas cada 30 minutos
  • La última comunicación se produjo a las 3.33 de la madrugada cuando se dirigía a Senegal

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La principal hipótesis es que el accidente del avión de Air France lo haya provocado una fuerte tormenta

Air France baraja que el avión desaparecido sobre el Atlántico con 228 personas a bordo, cuando volaba de Río de Janeiro a París, pudo ser alcanzado por un rayo. El director de comunicación, François Brousse, cree que la "hipótesis más probable" es que ha sido "fulminado" tras entrar en una zona de tormentas con fuertes turbulencias que provocaron disfunciones" en el aparato.

Según explica a RTVE.es el piloto José María Íscar, portavoz del Sepla, las aeronaves "están diseñadas para soportar el impacto de un rayo". "Más allá de la impresión que produce, la incidencia sobre el avión es mínima, casi siempre", asegura.

Íscar explica que la norma es evitar las tormentas, para lo que llevan un radar meteorológico que las detecta. Si no queda más remedio que atravesar una "tienes que evitar el núcleo duro más activo". El radar identifica las zonas en verde, amarillo y rojo.

El Airbus A330-200 partió de Río de Janeiro (Brasil) a las 00.19, hora peninsular española, y tenía que haber llegado a las 11.00 de la mañana a París. Su último contacto con los controladores aéreos brasileños se produjo cuando se disponía a entrar en el espacio aéreo de Senegal a las 3.33 horas.

A las 4.00 de la madrugada entró en una zona de fuertes turbulencias y 15 minutos más tarde el avión envió un mensaje automático de mantenimiento anunciando cierto número de problemas. Según explica Íscar, algunos aviones, como el desaparecido, cuentan con un sistema que manda una señal automática si detecta algún problema de funcionamiento.

Ahora se trata de saber si los pilotos llegaron a comunicar a los controladores algún tipo de problema en la aeronave, "si les alcanzó un rayo y si eso les estaba dando problemas". "Lo fundamental, más allá de la tragedia que trae consigo una desgracia como ésta", asegura el portavoz del Sepla, "es encontrar las cajas negras del avión", que contienen las comunicaciones entre los pilotos y los controladores y todos los datos técnicos.

Para localizar el avión, una de las pistas fiables son los restos de combustible y de aceite.

Dos sistemas para controlar el avión en todo momento

La posición de los aviones está controlada en todo momento. Hay dos tipos de control: el convencional, que se realiza con radares, y el que se produce cuando el avión está fuera de la cobertura de estos. Ocurre, por ejemplo, cuando se sobrevuelan los océanos. En este último caso son los pilotos los que cada 30 minutos comunican su posición a los controladores.

Cuando la cobertura de los radares es óptima, éstos transmiten una señal al avión que "la recibe, la procesa y la reenvía a control" dando varios datos, entre ellos, el "número de vuelo, el rumbo, la altura y la velocidad", explica José María Íscar. El equipo electrónico que transmite todos los datos que el controlador luego ve en su pantalla de radar, es el transpondedor.

Una hora fuera del alcance de los radares

En un vuelo como el del avión desaparecido, desde Brasil a Francia, tan sólo hay una hora, aproximadamente, en la que el avión queda fuera de la cobertura convencional.

En este caso, son los pilotos los que informan de su posición cada media hora con una comunicación de alta frecuencia a los servicios de control oceánico.

Dan información sobre el punto que sobrevuelan, la hora y la altura, el punto siguiente que estiman sobrevolar y a qué hora, y el próximo al que se dirigirán. Íscar explica que es como si un avión informara de que sobrevuela Madrid ahora mismo con una determinada altura y dijera que más tarde va a estar en Valencia a tal hora y que el punto siguiente será Barcelona.

Los controladores cuentan también con un sistema de aviso, llamado SELCAL, para avisar a los pilotos de que quiere hablar con ellos, si estos no se ponen en contacto.