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La responsable de la empresa china que vendió leche contaminada se declara culpable

  • La ex presidenta del grupo Sanlu se enfrenta a una sanción ejemplar, incluso pena de muerte
  • Seis niños murieron por los efectos de la melamina y casi 300.000 niños se contaminaron
  • El primer fallecimiento se conoció en mayo aunque la empresa no dio la alerta hasta agosto
  • Las autoridades tampoco informaron del escándalo hasta pasados los Juegos Olímpicos

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Four former executives of Sanlu Group stand on trial at Shijiazhuang Intermediate People's Court
La ex presidenta del grupo Sanlu, Tian Wenhua (izquierda), junto a los otros ejecutivos acusados por la leche contaminada.

La ex presidenta de la compañía china Sanlu que vendió durante meses leche adulterada se ha declarado culpable ante el tribunal que juzga este caso que provocó la muerte de al menos seis niños.

El Tribunal Popular Intermedio de Shijiazhuang (capital de la provincia nororiental de Hebei, colindante con Pekín) acusa a la ex presidenta y directora general de Sanlu, Tian Wenhua, y a otros tres ejecutivos de un delito contra la salud pública que ha afectado, según las cifras oficiales, a 294.000 niños.

Tian, de 66 años, puede enfrentarse a la pena de muerte, según informa el diario oficial China Daily. Sin embargo, la agencia oficial Xinhua explica que la máxima condena sería cadena perpetua. Las autoridades son partidarias de castigos ejemplares si se demuestra la culpabilidad, para rebajar la preocupación desatada en todo el mundo por la seguridad de los productos chinos.

La ex presidenta ha dicho en su defensa que supo de las quejas de los consumidores sobre leche adulterada a mediados de mayo, cuando se registró la primera muerte de un bebé, y decidió crear un equipo de investigación del que ella misma se hizo responsable. El 2 de agosto, en vísperas de la inauguración de los Juegos Olímpicos de Pekín, el Grupo Sanlu presentó un informe por escrito sobre la leche en polvo afectada al gobierno local de Shijiazhuang (donde la firma tiene su sede), aunque el escándalo no se hizo público hasta que terminó la cita olímpica.

La contaminación, una de las más graves registradas en el país en los últimos años, se debió al uso de melamina, un químico tóxico que eleva los niveles de proteínas de la leche en los controles de calidad. Los niños murieron por insuficiencia renal.

Desde el viernes pasado otras 17 personas han sido juzgadas en distintos tribunales de la provincia de Hebei acusadas de añadir la melanina a la leche en polvo o de haber vendido leche ya adulterada a la planta de Sanlu y a otras firmas lácteas de todo el país.

El Grupo Sanlu, con participación de la neozelandesa Fonterra, dejó de producir el pasado 12 de septiembre y se declaró en bancarrota con una deuda de 114.628 euros. Además de la leche, más de 1.500 cajas de galletas contaminadas por el mismo motivo fueron exportadas aSingapur. 

El gobierno de China ha prometido indemnizar a las víctimas, al tiempo que Sanlu y el resto de lecheras locales destinarán 2.000 yuanes (más de 200 euros) a cada uno de los afectados, según se ha sabido este mismo día. Los familiares han dicho que es una compensación insuficiente.