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Baloncesto | NBA

Pau Gasol, la consagración de un sueño entre gigantes

  • El pívot español ganó dos campeonatos, fue rookie del año y disputó seis All Stars en sus 18 años en la NBA
  • Grizzlies, Lakers, Bulls, Spurs y Bucks fueron los equipos donde jugó el de Sant Boi

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Pau Gasol levanta el trofeo de campeón de la NBA
Pau Gasol levanta el trofeo de campeón de la NBA

Si Fernando Martín fue el pionero del baloncesto español en la NBA, Pau Gasol fue la muestra de que los sueños pueden volverse realidad. 18 años estuvo peleando con los gigantes de la canasta para volverse una leyenda del deporte. Sus dos anillos con los Lakers fueron el cúlmen de una carrera americana llena casi siempre de luces que le llevará, probablemente, al Salón de la Fama. Así fueron las dos décadas de NBA del mejor jugador español de baloncesto de todos los tiempos:

Memphis Grizzlies, poner una pica en Playoffs

El comienzo de la historia de Pau Gasol en la NBA pudo haber sido muy distinto al que conocemos. El español fue elegido en el tercer puesto (puesto más alto hasta ese momento para un jugador no formado en Estados Unidos) del Draft de 2001 por Atlanta Hawks y solo el traspaso del talentoso anotador Shareef Abdur-Rahim provocó que Pau debutara en la tierra de las oportunidades con la casaca de los Grizzlies.

Se puede decir que aterrizó de pie en Memphis. Antes del cuarto partido de su temporada rookie, Stromile Swift, ala pívot titular del equipo, sufrió una pequeña lesión que le dejó dos encuentros sin poder saltar a la cancha. Su puesto en el quinteto inicial sería para Gasol, que ya no lo soltaría hasta su salida hacia Los Ángeles, siete años después. Ese curso 01/02 fue de ensueño. Disputó los 82 duelos de fase regular, demostró el potencial que atesoraba con unos promedios de 17,6 puntos y 8,9 rebotes y se impuso en el premio al mejor debutante del año. Pero si por algo se recuerda al Pau novato fue por su mítico poster a Kevin Garnett, que puso bocabajo ‘La Pirámide’, el antiguo pabellón grizzlie.

Pau, durante un partido con los Grizzlies

Pau, durante un partido con los Grizzlies EFE

Bajo el mando del poste de Sant Boi, en la 03/04, Memphis se apuntó su primera temporada en positivo y su primera participación en playoffs. El balance de 50-23 les valió para auparse hasta el sexto puesto del Oeste, aunque fueron apeados por un contundente 4-0 en la ronda inicial por los correosos Spurs.

Su trayectoria seguía subiendo como la espuma, pero le faltaba el reconocimiento de toda la liga. Al formar parte de un mercado pequeño, Gasol era un jugador que siempre estaba infravalorado. Su nombre sonaba para el partido de las estrellas, pero el reconocimiento nunca terminaba de aparecer. Hasta que en la 05/06 llegó su primer gran momento en la NBA. Fue llamado, como reserva, para el All Star de Houston y, aunque no pudo ver canasta, se contentó con ser el máximo reboteador de la noche (12) y, por su puesto, con ser el primer español en disputar este tipo de encuentros.

Dos cursos consecutivos por encima de los 20 puntos y tres participaciones seguidas en playoffs le dieron la potestad de exigir a la gerencia una plantilla más competitiva. Porque, sí, llegaban a la postemporada, pero no habían logrado ni una sola victoria. El equipo, en lo más alto, se hundió y, con él, la relación de Gasol con los Grizzlies. Los rumores de traspaso se sucedían y se hicieron evidentes cuando explotó el shophomore Rudy Gay, con la consiguiente reducción de protagonismo del catalán. Todo estaba preparado para la salida y el 1 de febrero de 2008 se anunció la oficialidad lo que era un secreto a voces: Pau se iba traspasado a los Lakers. Atrás dejó un legado sobresaliente con máximos históricos de la franquicia en puntos, rebotes, partidos, minutos, etc. El mejor jugador de siempre de los Grizzlies dejaba la insulsa Tennessee por la ajetreada California.

Los Ángeles Lakers, de ‘Gasoft’ al bicampeonato

La etapa más gloriosa de Gasol en la NBA se pinta de púrpura y oro. En algo más de seis temporadas, alcanzó tres Finales y ganó dos anillos. Supo adaptarse a las mil maravillas a las exigencias del triángulo ofensivo de Phil Jackson, a la filosofía zen del místico entrenador de Montana y a Kobe Bryant. La ‘Mamba Negra’ era un baloncestista ultracompetitivo que solo dejaba entrar en su círculo íntimo a los elegidos. Pau fue uno de ellos, bien porque se lo ganó en la cancha, bien porque nunca osó desafiar al macho alfa. En todo momento, el español supo ejercer de segundo espada.

Pau Gasol intenta un gancho, durante las Finales de la NBA 2010

Pau Gasol intenta un gancho, durante las Finales de la NBA 2010 EFE

No obstante, este idilio con la franquicia tuvo sus más y sus menos. Recibió el mote ‘Gasoft’ (blando) tras perder su duelo individual con Garnett en las finales de 2008. Pau llegó muy exigido físicamente, nunca había participado en tantos partidos en mismo curso, y lo pagó en el peor momento. La prensa puso en duda su valía como pieza clave de un futuro equipo campeón. No pesaba su elección como All Star ese mismo año ni que Boston llegase más rodado como conjunto. Había que buscar un cabeza de turco y le tocó a él. Aunque dicen que la venganza se sirve en plato frío y Pau no tuvo que esperar demasiado.

Una temporada más tarde, otra vez en estaba en las finales, el examen volvía a ser igual de exigente, o incluso más. Dwight Howard, el pívot más dominante y físico de la NBA, esperaba al catalán. Gasol domó, para muchos contra pronóstico, a toda una fuerza de la naturaleza. Dejó al americano en un 48% en tiros de campo, cuando promediaba más de 61%, y en 15 puntos por partido. Los Lakers barrieron 4-1 a los Magic y Pau ganó su primer anillo y también el primero para un español, cumpliendo, así, el sueño que inicio Fernando Martín en los Blazers.

Su prueba de fuego absoluta tendría lugar en el 2010. 23 años después, los aficionados de todo el mundo iban a poder disfrutar de unas nuevas finales NBA entre Lakers y Celtics. Y todo se iba a decidir en un séptimo encuentro en el Staples Center. Pau no defraudó y completó uno de los mejores partidos de su carrera. Se apuntó un 19-18, ante Garnett, sí, de nuevo el hall of famer frente a frente, para lograr el bicampeonato. Este fue, sin duda, su momento más alto como baloncestista NBA.

Sin embargo, todo lo que sube baja, y los Lakers no fueron menos. Dos batacazos en los playoffs posteriores contra Mavericks (4-0) y Thunder (4-1) obligaron a los Buss a dar un golpe sobre la mesa. Ficharon del tirón a Dwight Howard y a Steve Nash para formar un póker único junto a Kobe y Gasol. Tantos gallos en el mismo corral no funcionaron. Las lesiones asolaron a Nash, Bryant y Howard no se tragaron y Pau tuvo que convertirse en algo que no era: un ala pívot tirador, ante el nuevo modelo de juego impuesto por D’Antoni. Se estiró la cuerda demasiado y se rompió, porque el español nunca se adaptó a este sistema y porque su técnico tampoco le ofreció la oportunidad de ser la refencia en la pintura. A pesar del apoyo constante de Bryant, el de Sant Boi, harto de la situación y de los rumores de traspaso (de hecho, podía haberse ido a Houston en un intercambio a tres bandas que acababa con Chris Paul en los Lakers, pero que la propia NBA paró), acabó su contrato y puso rumbo a la Ciudad del Viento.

Chicago Bulls y un salto fraternal en el All Star

Bajo la atenta mirada del a estatua de Michael Jordan, Gasol demostró que, con 34 años, todavía tenía gasolina en el tanque. Dos años como bull en los que se pudo ver a una de las mejores versiones de su carrera y que le sirvieron para sumar otros dos All Star, para un total de seis. En enero de 2015, cuajó su encuentro más prolífico al anotar 46 puntos y capturar 18 rebotes. Colectivamente, los resultados no llegaron por cambios en el banquillo y la falta de química de un equipo acostumbrado a jugar al límite.

Lo que sí nos regaló Gasol fue el salto inicial con Marc en el All Star de 2015. Por primera vez, dos hermanos abrían el telón de un partido de las estrellas inolvidable para todo el deporte español.

Pau y Marc, en el salto inicial del All Star 2015

Pau y Marc, en el salto inicial del All Star 2015 EFE

San Antonio Spurs y la regresión

Acabada su etapa en Chicago, el catalán emprendió un nuevo camino en San Antonio junto a Greg Popovich. Los tejanos buscaban llenar el hueco que dejó Duncan con su retirada y pensaron en Pau. Todo empezó bien. Era titular y gozaba de protagonismo, pero una lesión en el dedo le hizo perder el sitio. En el equipo de la espuela inicio su declive y su ya más que continua lucha con los problemas físicos.

Sus minutos se redujeron y sus guarismos, por ende. Pasó de titular a líder de la segunda unidad, de líder de la segunda unidad a jugador de rol y de jugador de rol a mentor de los más jóvenes. Esta regresión se produjo en dos cursos y medio. Con poca participación, los Spurs y el catalán llegaron a un acuerdo para rescindir el contrato.

Milwaukee Bucks, el fin de la carrera NBA

Gasol anima a Antetokounmpo en un tiempo muerto

Gasol anima a Antetokounmpo en un tiempo muerto EFE

Un veterano con experiencia siempre es un activo jugoso para cualquier equipo que quiere aumentar su nivel competitivo. Los Bucks del joven Antetokounmpo se hicieron con sus servicios para ser el maestro veterano de una plantilla llamada a pelear por el anillo.

Las posibles expectativas se rompieron al tercer partido, concretamente a mediados de marzo. Una fractura navicular por estrés en su pie izquierdo puso fin a su aventura con los de Milwaukee y a su carrera NBA. Dos años alejados de las canchas que, previo intento en Portland, vieron la luz al final del túnel en Barcelona. Un desenlace amargo para el mejor jugador español de baloncesto de la historia.