Los ejemplos que pone Tebas para su protocolo de prevención no contemplan riesgos de contagio propios del deporte
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El presidente de la Liga, Javier Tebas, se ha referido mucho al protocolo sanitario para la vuelta del fútbol de élite en España, pero en su última disertación al respecto puso como ejemplo una situación muy alejada de la realidad de la práctica deportiva, según los médicos.
Hace semanas que la Liga trabaja en su propio protocolo para retomar la actividad después de la crisis sanitaria por la pandemia del coronavirus y se han filtrado varios borradores del mismo a los medios de comunicación.
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No obstante, no se conoce aún el documento formal que ha preparado la patronal del fútbol y que deberá contar con el visto bueno de las autoridades sanitarias. A la espera de que el Consejo Superior de Deportes desvele también su plan global para la reactivación del sector, donde el fútbol ejercerá como “motor” tras el acuerdo que selló a tres bandas con la propia Liga y la federación española, las explicaciones más detalladas sobre este tema las dio Tebas el pasado viernes en un foro de la Asociación de directivos y ejecutivos de Aragón (ADEA).
En una especie de rueda de prensa telemática, que se prolongó durante más de hora y media, el abogado se refirió en repetidas ocasiones a las cuatro fases del protocolo que pretenden implantar de forma coordinada en los 42 clubes del fútbol profesional (Primera y Segunda), y en las que los test para detectar COVID-19 tendrán una importancia fundamental.
“Lo primero es establecer un protocolo sanitario para todos los clubes. Es importante que sea el mismo para todos, porque todos dependemos de todos”, explicó Tebas. “Si un club no cumple correctamente el protocolo, comete un error y se encuentra con infectados, eso afecta a todos. Y se puede llegar a la suspensión la competición”, añadió justo antes de advertir que el protocolo debe ser aprobado por las autoridades sanitarias y que en este sentido “la actividad deportiva es muy especial”, dando a entender que no sirven los protocolos de prevención para otros trabajos.
En cambio, poco después empezó a detallar situaciones en las que tomó como referencia los términos del Procedimiento para los servicios de prevención de riesgos laborales frente a la exposición al SARS-CoV-2 [pdf] que a su vez se remite a otro procedimiento más general de actuación frente a la COVID-19 [pdf], ambos redactados por Ministerio de Sanidad y actualizados recientemente, y que en ningún caso hacen referencia a la actividad física.
Un estudio alemán
"Lo voy a explicar, aunque eso vendrá en el protocolo de partidos que estamos preparando. La infección del coronavirus no se transmite por sudor. Por donde más se transmite es por la boca. Y es normalmente cuando se está 15 minutos una persona delante de otra con una distancia de menos de un metro y medio. Este es un nivel 1 de contagio", comenzó Tebas en declaraciones extractadas por el Heraldo de Aragón.
"Y, después, el nivel 2 de contagio es cuando tú has estado a más de dos metros”, añadió antes de enredarse más en la explicación y de pasar a establecer una relación entre estos tipos de exposición a una persona eventualmente infectada por coronavirus y la necesidad o no de aislar a quienes hayan corrido ese riesgo: "El nivel de cuarentena es diferente. En el nivel 1, son 15 días en casa todos los que hayan estado en contacto con ese contagio. Y, en el nivel 2, solo la persona que está infectada".
Pues bien, el protocolo de Sanidad distingue tres escenarios de riesgo de exposición al coronavirus en el entorno laboral, el primero de ellos denominado “Exposición de riesgo” referido a las situaciones en las que se puede producir un “contacto estrecho” con un contagiado. Y contacto estrecho se refiere a quien haya cuidado a un enfermo o a “personas que hayan estado en el mismo lugar que un caso mientras el caso presentaba síntomas a una distancia menor de 2 metros durante un tiempo de al menos 15 minutos”.
Esta última expresión es exactamente igual a la que usó Tebas cuando él se refirió a su “nivel 1" de riesgo de infección. El segundo escenario que prevén las autoridades se refiere a una “exposición de bajo riesgo” y que se define por oposición al anterior, ya que comprende “aquellas situaciones laborales en las que la relación que se pueda tener con un caso posible, probable o confirmado, no incluye contacto estrecho”. Esto sería el “nivel 2 de contagio” de Tebas.
A continuación, en la charla donde otra de sus fijaciones fueron las fake news (noticias falsas) de las que dice ser víctima, el presidente de la LaLiga fue más allá al precisar que su protocolo se inspira en el de Alemania, donde la Bundesliga ha determinado que en un partido de fútbol un jugador “no está nunca alrededor de otro jugador más de 15 minutos. Está (solo) 9 minutos. Y, además, no está los 9 minutos cara a cara”. “Esto lo sabemos por la tecnología de la que disponemos --dijo tras hacer un inciso para decir que ese estudio sería aplicable igualmente a España--. Así que, de haber un positivo, siempre sería del grupo 2. Y, por lo tanto, solo ese jugador sería puesto en cuarentena; no el resto", concluyó.
Es decir, que según Tebas en un campo de fútbol no habrá "contacto estrecho" en los parámetros que definen los protocolos sanitarios. Cierto es que el dirigente parte de un protocolo de prevención reforzado —”vamos a ser incluso más estrictos de lo que hacen otras competiciones en Europa. Creo que el tema lo requiere”— y da por hecha una situación ideal —”no habrá jugadores que tengan ningún problema cuando salten al terreno de juego. La circunstancia de un contagio no se va a dar”—, pero los expertos apuntan incoherencias en su modelo.
El deporte multiplica por 30 ó 40 el volumen de aire espirado
En declaraciones a RNE, Pedro Manonelles, presidente de la Federación Española de Medicina, ha recordado que durante el ejercicio se produce un incremento de la ventilación pulmonar: “Una persona en reposo está movilizando 5 litros de aire por minuto, pero una persona que está haciendo un esfuerzo máximo moviliza entre los 150 y 180 litros por minuto; y si el deportista es de muy alto nivel puede superar los 200 litros”.
“Además, espira el aire con mucha más fuerza a como se hace en reposo, con lo cual las partículas llegan mucho más lejos”, ha explicado. Y refiriéndose a continuación a la población general, para la cual se aconseja mantener una separación interpersonal de 1,5 ó 2 metros en la vida social, propone que para la actividad física esta se amplíe notablemente.
Así, de cara al anunciado alivio del confinamiento para población en general para hacer ejercicio, explica que un corredor tendría que ponerse “seis metros detrás de otro para impedir que las gotas que transmiten el germen puedan ser aspiradas por él”.
Sin tanto detalle, Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, también se ha mostrado partidario de aumentar la distancia social de seguridad para el deporte. "El esfuerzo genera respiraciones más potentes, exalaciones más potentes, sudor, una serie de variables que pueden generar riesgo", ha dicho este martes el epidemiólogo.
Por su parte, el presidente de la Asociación Española de Médicos de Equipos de Fútbol, Rafael Ramos, vino a establecer diferencias en los protocolos de prevención en función de las actividades, un principio que recogen de forma general las instrucciones de Sanidad. También en la antena de Radio Nacional, el doctor mostró su sorpresa por haber visto a futbolistas en Alemania entrenando con mascarilla. Ramos dijo que con ese equipo de protección individual cuesta respirar “por mucho que sean con filtro”. “En una actividad moderada se puede hacer, pero en esfuerzos importantes no lo veo”, declaró.
En todo caso, antes de tomar decisiones sobre la competición habrá que sacar conclusiones de los entrenamientos y más aún de la experiencia germana, ya que allí retomaron la actividad hace varias semanas.
