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España se sube a la ola Pablo García para ganar el Mundial sub-20

  • El delantero zurdo está brillando en el campeonato con una asistencia decisiva y dos goles
  • Cuartos de final España - Colombia en directo, sábado a las 22:00h. en Teledeporte
Pablo García da la victoria a España ante Ucrania en el Mundial Sub-20
Felipe Fernández
Felipe Fernández

La selección sub-20 de España se clasificó este martes para los cuartos de final del Mundial de Chile 2025, unas alturas que no se alcanzaban desde Turquía 2013.

Lo hizo la España de Paco Gallardo gracias a la magia y al duende de un futbolista que lleva un año de ensueño, Pablo García. El delantero del Betis anotó el único tanto de los octavos frente a Ucrania a los 24 minutos. Fue una jugada ensayada en lo que todo salió a la perfección.

Nacido el 13 de junio de 2006 en el barrio sevillano de Parque Alcosa, este zurdo lleva ligado al fútbol y al Real Betis desde los cinco años. Hijo único en una familia que se sustentó regentando un negocio de comida para llevar, Pablo García está surfeando una ola de éxito desde el 23 de junio.

Aquella tarde dejó con la boca abierta al mundo del fútbol al marcar cuatro goles frente a Alemania en las semifinales del Europeo sub-19 —con gol olímpico incluido—. A ese día le siguió ser el máximo goleador del torneo y las convocatorias habituales con el primer equipo de Pellegrini (ha competido en tres competiciones distintas). El club bético le había renovado hasta 2029 antes de su explosión.

De menos a más en Chile

Ahora se erige en el líder de la selección juvenil española que aspira a ganar por segunda vez un Mundial sub-20. Su participación está siendo crucial desde que pasara el partido del debut con derrota ante Marruecos, en el que no fue titular.

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Contra México marcó un golazo —y pudo anotar otro—, a Brasil la condenó con una asistencia de lujo para el gol decisivo de Iker Bravo y a Ucrania la ejecutó con un golazo. Puso el balón en juego y concluyó la jugada. Control y remate en dos toques, en menos de un segundo, y a cuartos de final.

Al gol le siguieron acciones virtuosas como pases de tacón, controles orientados o regates en una baldosa. Hasta en el descuento ayudó su acento de fútbol callejero al dilapidar el último minuto en el córner para desesperación de los rivales.

Mucho Pablo para Ucrania y para el campeonato. No se alcanza a ver el techo del delantero zurdo. Si su proyección no se detiene, España opta a todo.