Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Estados Unidos ha vivido este sábado una de las movilizaciones más importantes en contra de la presidencia de Donald Trump. Bajo el lema "No Kings", no a los reyes, millones de personas han protestado por lo que consideran una deriva autoritaria de la actual administración.

Más de 2.500 manifestaciones que ya tienen respuesta del propio Trump, un vídeo generado por IA en el que, montado en un caza y con una corona en su cabeza, el mandatario bombardea con barro a los manifestantes.

Foto: M10s / Zuma Press

El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, llegó a la Casa Blanca para pedir armas más potentes, los famosos Tomahawk, capaces de alcanzar Moscú. Pese a que Donald Trump llegó a coquetear con esa idea en los días previos, las expectativas se fueron enfriando. Y el presidente de Ucrania vuelve a su país con las manos vacías.

"Son un arma increíble, muy poderosa. Pero podrían llevar a una escala aún mayor. Y Estados Unidos también los necesita", fue la excusa de Donald Trump.

A diferencia de encuentros anteriores en la Casa Blanca, esta vez la cordialidad fue la nota dominante. Tras el encuentro, el presidente de Estados Unidos llamó a los dos bandos a detenerse de inmediato en la actual línea de batalla. Pero Rusia sigue atacando Ucrania. Las esperanzas se ponen ahora en el próximo cara a cara entre Putin y Trump en Budapest, todavía sin fecha. Ya se vieron en Alaska en agosto y nada cambió, Moscú incluso intensificó sus ataques.

Hasta el momento, la diplomacia de Trump, ha pinchado en hueso con Putin, incapaz de acercar el fin del conflicto.

Foto: REUTERS /Jonathan Ernst

Los jóvenes se encuentran con este tipo de vídeos en las redes sociales, planteados siempre como un reto para valientes. Lo llaman 'surfear' el metro y el objetivo es subir al tren en marcha y aguantar en lo alto hasta la siguiente estación, a veces atravesando puentes, lo que multiplica el riesgo.

El reto es tan peligroso y tan extremo que este mes le ha costado la vida a dos niñas adolescentes en Nueva York. Ya han muerto cinco este año. Algunas víctimas han muerto por un impacto en la cabeza, otras electrocutadas y otras cayeron a las vías y el tren las arrolló.

La Policía elimina de las redes los vídeos que encuentra, 1.800 en seis meses, y tiene en marcha una campaña para explicar, por ejemplo, que hay estaciones donde el espacio que queda entre el vagón y el techo es de apenas 30 centímetros. El responsable del metro de Nueva York ha pedido ayuda a educadores, escuelas, iglesias y especialmente a los padres, para evitarlo.

Foto: Getty Images

La tercera reunión entre el presidente estadounidense, Donald Trump, y ucraniano, Volodímir Zelenski, en la Casa Blanca ha reflejado un tono más cercano y cooperativo que en encuentros anteriores. El presidente estadounidense ha insinuado que podría suministrar misiles Tomahawk a Ucrania, aunque ha matizado que espera que la guerra termine sin necesidad de hacerlo.

El mandatario norteamericano también ha señalado que su reciente conversación con Vladímir Putin fue “buena” y que el conflicto “podría acabar rápidamente”, mientras ha comparado la situación en Ucrania con Oriente Medio, cuyas disputas ha dicho haber “resuelto”.

Zelenski, más escéptico sobre las intenciones del líder ruso, ha reiterado su disposición a negociar: “Nosotros queremos la paz, Putin no. Hablamos con Trump para forzar a Putin a sentarse en la mesa”, ha insistido.

El encuentro precede a una cumbre entre Trump y Putin en Hungría la próxima semana.

Foto: JONATHAN ERNST

Durante las últimas semanas los misiles de crucero Tomahawk se han convertido en el arma estadounidense que Ucrania más desea. Estos misiles pueden ser lanzados desde buques, submarinos o desde tierra. Hay siete variantes diferentes, algunas pueden llevar carga nuclear.

Vuelan a más de 800 kilómetros por hora y son muy precisos, llegando a atacar objetivos en movimiento. Y lo más importante es su alcance, con un rango máximo de 2.500. Los misiles de los que dispone Ucrania pueden alcanzar objetivos solamente a 1.500 kilómetros.

Los Tomahawk podrían adentrarse aún más en territorio ruso, superando con creces Moscú. Estados Unidos los usó por primera vez en combate en la primera Guerra del Golfo. Más recientemente lo ha hecho contra Irán y los hutíes de Yemen.

Imagen: REUTERS / LEONHARD FOEGER

Lejos han quedado los días en que Estados Unidos recibía al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, entre aplausos y envíos de armas. En campaña, su homólogo estadounidense, Donald Trump, prometió no gastar más en la guerra y comenzó a negociar la paz con Putin, llamando "dictador" al líder ucraniano y marcando distancias desde su primer encuentro en la Casa Blanca.

Con el paso de los meses, la frustración de Trump con Moscú dio paso a nuevos acercamientos. Aunque evitó sancionar a Rusia, llegó a elogiar la resistencia ucraniana y a insinuar un renovado apoyo militar. Pero tras una larga conversación telefónica con Putin, el presidente estadounidense ha vuelto a cambiar el tono: "A Estados Unidos no le sobran misiles", dijo, dejando el éxito de la próxima reunión con Ucrania en el aire.

Foto: EVAN VUCCI

El presidente estadounidense, Donald Trump, ha asegurado que él y su homólogo ruso, Vladímir Putin, se reunirán en Budapest (Hungría), con el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, como anfitrión, "para ver si podemos poner fin a esta guerra 'ignominiosa' entre Rusia y Ucrania". El republicano ha asegurado ante la prensa en la Casa Blanca que la reunión tendrá lugar "en unas dos semanas".

FOTO: El presidente ruso, Vladímir Putin (izq.), y su homólogo estadounidense, Donald Trump (dcha.) Olga Maltseva, Saul Loeb / AFP