El Nobel que habló sobre las gramolas
- El ganador del Nobel de Literatura en 2019, Peter Handke, le dedicó un ensayo a las gramolas, las emblemáticas máquinas musicales
- ¿Conoces la lista de los libros prohibidos?
Viajar en el tiempo es posible gracias a las preguntas de ‘Saber y Ganar’. El concurso, presentado por Jordi Hurtado desde hace más de 28 años, recuerda a través de sus pruebas tanto personajes como hechos históricos, así como objetos que ya no existen o que han entrado en desuso. Ese es el caso de la gramola, la máquina musical a la que un premio Nobel le dedicó un ensayo.
La gramola, alegría musical
La gramola es una máquina emblemática que ha dejado huella en la historia de la música. La época dorada de este aparato, llamado también Jukebox, fueron los años 40 y 50. Iban cargadas con decenas de discos de vinilo sencillos y funcionaba con monedas, permitiendo a los usuarios seleccionar y reproducir canciones a su gusto.
Símbolo de una época, hoy prácticamente han desaparecido. No obstante, estos primitivos aparatos musicales estaban tan bien hechos que han sobrevivido hasta hoy, en manos de coleccionistas y aficionados, y todavía hay muchos en funcionamiento.
Protagonistas de un ensayo
Aunque ya no sean un producto habitual en cafeterías o bares, las gramolas siguen siendo algo recordado por muchos con cariño y nostalgia, como un ganador del premio Nobel, que les dedicó un ensayo. Se trata de Peter Handke, quien en 2019 recibió dicho reconocimiento en la categoría de Literatura.
El título de la obra es ‘Ensayo sobre el jukebox’ y narra la historia de un escritor sin nombre que espera en la estación de Burgos un autobús con destino a Soria. Es en esa ciudad, que define como “el lugar más tranquilo y más callado de toda la península”, donde planea escribir su ensayo.
Por las fronteras de Europa - Peter Handke: una literatura del desasosiego
La gramola en la cultura popular
Las primeras gramolas estaban elaboradas con madera y su diseño era bastante sobrio. Con el paso del tiempo, fueron mejorando su estética y se les añadieron colores para que resultasen más llamativas. De hecho, durante la Segunda Guerra Mundial se incorporaron luces que creaban un ambiente festivo en los locales donde estaban situadas, algo muy necesario para subir los ánimos de la gente.
El modelo con forma de burbuja, el '1015-Bubble', es la que tiene la decoración más conocida. Se la dio el estilista Paul Fuller y gracias a ella se convirtió en un icono de la cultura popular, sobre todo de la juvenil, que hemos podido ver en películas y series de televisión como 'Grease'.
Escena de 'Grease' donde aparece una gramola
No obstante, y a pesar de la función psicosocial que ejercieron, a partir de la década de los 50 las dinámicas comerciales propiciaron que se usase menos. El auge de los locales de comida rápida llevó a que no se quisiese contar con ellas ya que lo que se priorizaba era que la gente comiese y se fuese, no que se quedase bailando y escuchando música.
Sin embargo, las gramolas siguen siendo recordadas en la actualidad y son un elemento indispensable de la estética retro y de la nostalgia que tan de moda se ha puesto a nivel global.
Saber y Ganar