MasterChef 11 | Pilu, Eneko y Lluis forman el equipo perfecto. ¿Por qué?

• Los tres aspirantes encajan a la perfección y brillan como equipo en exteriores
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• ¿Quién ha sido el último expulsado de MasterChef?

Pilu, Eneko y Lluis triunfan como equipo

Eduardo Navarrete -diseñador, ex aspirante de MasterChef Celebrity e invitado de la noche, fue el encargado de escoger a los capitanes de cada equipo y tras unos segundos de dudas, se decantó por Luca y Lluis. A partir de aquí, ambos aspirantes decidirían uno a uno con quién no querrían trabajar en esta prueba. El resultado final dejó a tres aspirantes muy satisfechos: Eneko, Pilu y Lluis, que compartirían delantales rojos. Mientras que Luca, Ana, Alex y Jotha conformarían el equipo azul. Pero, ¿por qué decimos que el equipo rojo fue el equipo perfecto? Analizamos todas las razones.

1 - Afinidad personal

Desde el comienzo de la edición, Eneko, Alex, Lluis y Pilu han formado un grupo que ya se consideran como amigos. Por ejemplo, Pilu en la prueba de los robos descartó quitarle ingredientes a alguno de ellos precisamente por esa afinidad personal. Y siempre, en cualquier tarea, es mejor trabajar con gente con la que te llevas mejor y tienes más confianza. 

2 - Un capitán que confía en sus compañeros

Lluis, como capitán del equipo rojo, delegó funciones en Eneko y en Pilu sin dudar, con confianza ciega en ellos. Siempre con un ojo en todas las elaboraciones, Lluis repartió el trabajo de una manera justa en la que todos se sentían importantes dentro del equipo. Trabajar con el respaldo y la confianza de tu capitán siempre es beneficioso. Del mismo modo que es esencial saber que tu capitán responderá por ti y resolverá tus dudas si lo necesitas.

3 - Una comunicación impecable

Durante todo el cocinado, los tres aspirantes fueron comentando en alto cómo iban con cada elaboración, para que todos estuvieran al tanto sobre cómo avanzaba cada paso y de las necesidades que se iban creando. Así, Lluis terminó su labor inicial y rápidamente se puso con Eneko para adelantar con la parte salada de sus platos y poder ayudar al final a Pilu con el postre. El tono fue muy cordial, sin enfados, ni gritos ni malas caras.  

4 - Un objetivo común

En el equipo rojo nadie estuvo por encima de nadie y el objetivo común era ganar como equipo y evitar perder la prueba. Ni Pilu, ni Eneko ni Lluis quisieron brillar por encima de sus compañeros y solo pensaron en empujar juntos para conseguir la victoria y poder disfrutar de la prueba de eliminación desde la galería y con el delantal blanco.

Por todos estos motivos y después de la gran valoración de los jueces, Pilu, Eneko y Lluis se coronaron en la prueba por equipos y ganaron el reto. Pero además de continuar una semana más, esta victoria tenía otro premio: asistir a una clase magistral de Diego Muñoz, chef del restaurante Oroya, en Madrid. ¡Enhorabuena equipo rojo!