Enlaces accesibilidad

La 'otra' copa del Mundial de Qatar : este es su polémico artista y sus obras más controvertidas

Por
'The dirtiest cup', obra de Andrei Molodkin, portada de la revista 'Líbero'
'The dirtiest cup', obra de Andrei Molodkin

El Mundial de Fútbol de Qatar 2022, y todos los focos están puestos en el elitista país por todo lo que lo rodea. Se trata de un campeonato atípico ya que es la primera vez que se celebra en invierno y no en verano. Es la primera vez también que un país árabe ejerce de anfitrión del torneo. Y es sin duda uno de los Mundiales más polémicos, por la dudosa legislación sobre los derechos humanos en el país qatarí, por su rechazo a los derechos LGTBI y por la corrupción que ha habido organizando el evento. Así lo ha querido ilustrar la revista Líbero en su última edición, dedicada a los Mundiales más sucios de la historia, en la que una réplica negra de la Copa del Mundo ilustra la portada. No es de oro, sino de petróleo. Literalmente. Obra del artista ruso Andrei Molodkin, conocido por su crítica al capitalismo a través de un arte conceptual. ‘The dirtiest cup’ (La copa más sucia en inglés) es el título del ejemplar. “Es icono de una victoria vacía. Porque la única victoria que entienden las petrocracias es la de la sangre y el petróleo", denuncia el artista con su figura.

Revista 'Libero', edición especial Mundial Qatar 2022

Edición especial de la revista 'Líbero' dedicada a los Mundiales más sucios de la historia Revista 'Líbero'

Andrei Molodkin es ruso, pero vive en Francia desde hace dos décadas. Su copa del mundo está compuesta de cristal acrílico, cera, y petróleo procedente de Qatar, certificado por el Institut Français du Pétrole con el que colabora el artista. La ha elaborado en la fundición en Maubourguet, que funciona como taller y dónde la revista Líbero ha documentado el proceso de confección.

Creo que la FIFA ha sido durante años una organización oficial mafiosa y criminal que utiliza el fútbol como herramienta para limpiar su corrupción. Todos los iconos y símbolos se han creado como instrumentos para manipular a la gente. Así que se me ocurrió rellenar el trofeo con el único ingrediente que le representa: crudo de Qatar”, explica Molodkin en la revista.

Retrato del artista ruso Andrei Molodkin

Retrato del artista ruso Andrei Molodkin Stella Pictures / Daniel Hambury

Precio 'simbólico' de 150 millones de dólares

La copa del mundo de petróleo saldrá a la venta en plataforma de arte online Apolitical por el ‘módico’ precio de 150 millones de dólares. Es justo la cantidad en sobornos que detalló el FBI en una investigación en 2015, y que se saldó con la detención de 24 ejecutivos de la FIFA que eligieron a Rusia y a Qatar como anfitriones de los últimos Mundiales de Fútbol. Entre ellos Michel Platini, expresidente de la UEFA.

Molodkin era el artista perfecto para representar la idea de Líbero de representar el triunfo del negocio por encima del deporte. Así lo reconocía Diego Barcala, el director de la revista: “Ha conseguido simbolizar a la perfección cómo el poder económico de los países con petróleo y gas son capaces de comprar cualquier cosa, incluido el fútbol”.

Molodkin pintó a Putin con sangre ucraniana

En el ámbito cultural, Andrei Molodkin es uno de los artistas referencia del siglo XXI. Se expresa tanto dibujando como esculpiendo. El pasado mes de marzo, expuso una de sus obras más famosas. Lo hizo en una iglesia de Londres, y fue un retrato gigante de Vladímir Putin hecho con sangre (real) donada por soldados ucranianos antes de ir a la guerra.

Obra de Andrei Molodkin

Retrato de Vladímir Putin hecho con sangre, obra de Andrei Molodkin The Moscow Times

En 2009 también presentó una de sus obras más polémicas. Fue en la exposición internacional de arte contemporáneo del Bienal de Venecia con ‘Le Rouge et le Noir’. Una pieza que elaboró con sangre rusa y petróleo checheno. Detalles que no publicó hasta después de la exposición, y que censuraron en cuanto se supieron.

Otra de sus obras más controvertidas es ‘Catholic Blood’ que expuso en 2013. Una crítica al conflicto religioso y político en Derry (Irlanda del Norte) en el que representó el rosetón del Palacio de Westminster y también utilizó sangre real, en este caso de donantes católicos.