La Universidad de Barcelona denuncia a la Fiscalía conductas "muy graves" del catedrático investigado
- Han denunciado conductas de coerción sexual y psicológica, maltrato, explotación personal y profesional
- El catedrático Ramón Flecha está siendo investigado por denuncias internas realizadas en julio
- La UB apunta a que el grupo de investigación liderado por Flecha podría ser un "grupo coercitivo de alto control"
La Universidad de Barcelona (UB) ha denunciado ante la Fiscalía Provincial de Barcelona este lunes los comportamientos del catedrático emérito Ramón Flecha, que trasladaron en un escrito de manera interna catorce personas en julio. La UB pretende que la justicia ordinaria investigue "conductas de coerción sexual, coerción psicológica, maltrato, explotación personal y profesional, así como conductas vejatorias e intimidatorias, que podrían encajar en la posible existencia de un grupo coercitivo de alto control" presuntamente realizadas por el catedrático. En un comunicado, la universidad ha manifestado que si la Fiscalía presenta denuncia o querella, solicitará personarse como acusación particular.
Las personas denunciantes trasladaron a la UB comportamientos que, según contaron en a RTVE Noticias, L'entrellat de Ràdio 4-RNE, elDiario.es e InfoLibre, se dieron a lo largo de más de tres décadas en el grupo de investigación CREA (Comunidad de Investigación sobre Excelencia para Todos, por sus siglas en inglés). Fue fundado en 1991 en la UB por Flecha, quien se define a sí mismo como el “científico número 1 (ranking mundial) en gender violence”. La Universidad de Barcelona anunció en el mismo mes de julio que abriría una comisión de investigación para esclarecer los hechos.
Suspensión de empleo a dos personas y de un cargo de catedrático honorario
La universidad también ha acordado, dada "la gravedad de los hechos relatados", abrir expedientes disciplinarios a dos personas a quienes suspenderán de empleo y la suspensión a una tercera "de la condición de catedrático honorario". El grupo CREA, que según reveló la UB, está desvinculado de la institución desde 2015, cuenta entre sus miembros con catedráticas, profesoras e investigadoras que trabajan en esta universidad y en otras universidades españolas y del extranjero, así como en centros educativos.
Esta primera resolución del caso llega por recomendación de la comisión constituida por la UB en agosto para investigar los hechos, integrada por tres especialistas con formación específica en violencia de género y acoso institucional. El propio rector de la UB, Joan Guàrdia, comentó, en una reunión del claustro la pasada semana, que los hechos denunciados son, "lo suficientemente graves y reiterados" como para actuar antes de que se complete toda la investigación.
La comisión ha evaluado la fiabilidad de los relatos de las denunciantes
Este lunes se ha conocido que la comisión, por unanimidad de sus miembros, acordó elaborar un informe preliminar de conclusiones que hizo llegar al rector el pasado viernes, junto con dos informes complementarios: una evaluación pericial psicológica de la fiabilidad de los relatos de las denunciantes y un informe penal para valorar la relevancia jurídica de los hechos expuestos.
En ese sentido, la UB ha informado de que la comisión de expertos seguirá investigando y tomará declaración a las cinco personas denunciantes que quedan —hasta ahora han realizado once entrevistas—. Asimismo, investigará también "cuestiones académicas y éticas de las que ha tenido conocimiento hasta ahora". La UB ya explicó a RTVE Noticias que están examinando la creación de un comité de ética de la investigación propio por parte del grupo CREA.
En el comunicado, la UB también ha subrayado que adoptará medidas cautelares para evitar que aquellos méritos académicos y profesionales vinculados al caso se tengan en cuenta en los procesos de selección de profesorado. El objetivo, han dicho, es garantizar los principios de concurrencia, imparcialidad y objetividad de estos procedimientos. Asimismo, tienen previsto activar medidas de acompañamiento psicológico a las personas de la comunidad de la UB afectadas por este caso, tanto en la actualidad como en el pasado.
Caso Flecha-CREA: tres décadas de presuntos abusos
Las denunciantes y más personas entrevistadas por RTVE Noticias narraron que recibían ofertas de Flecha para integrarse en el grupo CREA, preguntas íntimas sobre sus relaciones sexuales y sentimentales, y, finalmente, en muchos casos, un contacto físico que desembocaba en relaciones sexuales. Según estos testimonios, Flecha les decía que esos encuentros se producían con varias de ellas simultáneamente. Tanto el catedrático como la directora del grupo CREA, Marta Soler, negaron todos los hechos.
Los reportajes publicados muestran que las conductas siguen un patrón que se repite y no es la primera vez que Ramón Flecha y CREA son objeto de denuncia. En 2004 y 2016 diferentes investigadores e investigadores que salieron del grupo pusieron en conocimiento de la universidad el presunto funcionamiento sectario del grupo. Los hechos, que se llevaron a la Fiscalía, acabaron archivados, aunque este organismo hizo recomendaciones de hacer un seguimiento de ciertos hechos que podrían ser constitutivos de delito. Una de las medidas que se tomó en el pasado fue relevar a Flecha de la dirección del grupo CREA, que pasó a recaer sobre Marta Soler, quien continúa al frente en la actualidad.
"Destitución de cualquier persona vinculada a CREA"
La intervención del rector en el claustro de la semana pasada fue en respuesta a un comunicado que se leyó en la reunión procedente de la Asamblea Feminista de la UB, el colectivo formado por Personal de Administración y Servicios (PAS) y Personal Docente e Investigador (PDI). En él exigían, entre otros, la protección efectiva de las denunciantes y que se eviten "represalias, revictimizaciones o daños en sus trayectorias académicas y profesionales". Así, han opinado que las medidas que tomó la Universidad de Barcelona en julio son "insuficientes ante la gravedad de los hechos": la suspensión cautelar de Flecha como catedrático emérito y la apertura de una investigación interna.
Desde que saltó la noticia, tanto Flecha como miembros y personas que orbitan el grupo CREA han llevado a cabo una campaña de descrédito contra las denunciantes en sus redes sociales y páginas web que gestionan. Tanto la Asamblea Feminista como la asociación Oficina Española de Integridad de la Investigación han enviado escritos a la UB acompañados de firmas —unas 750 en total entre colectivos e individuales— para solicitar la protección de estas mujeres.
Asimismo, han pedido que se destituya a "cualquier persona vinculada a CREA que ocupe cargos de responsabilidad". La semana anterior, se conoció la dimisión de la coordinadora y de la secretaria del Programa de Doctorado de Sociología, la catedrática Lidia Puigvert y la profesora de Sociología Esther Oliver. Sin embargo, la directora de CREA, Marta Soler, sigue dirigiendo el Departamento de Sociología de la UB.