El juez mantiene en libertad con medidas cautelares a Koldo García tras acogerse a su derecho a no declarar en el Supremo
- Lo hace un día después del exministro de Transportes, a quien el juez mantiene en libertad sin fianza
- El Juez Puente cree que cada vez existen indicios "más consistentes" de que cometió varios delitos
El juez del Tribunal Supremo Leopoldo Puente ha decidido mantener en libertad con medidas cautelares al exasesor ministerial Koldo García, después de que se haya acogido este jueves a su derecho a no declarar. Ha adoptado la misma decisión que tomara este miércoles con el exministro José Luis Ábalos, quien también guardó silencio. En esta ocasión, tampoco la Fiscalía Anticorrupción había pedido que le enviaran a prisión.
Según el auto al que ha tenido acceso RTVE, el magistrado mantiene las mismas medidas cautelares que le impuso en febrero: prohibición de salida del país, retirada del pasaporte y comparecencia quincenal en sede judicial.
García había sido citado para responder por el último informe de la Unidad Central Operativa (UCO), que había detectado más de 95.000 euros en gastos sin justificar en las cuentas del exministro de Transportes José Luis Ábalos y otros indicios que llevaban al instructor a creer que García habría sido "custodio" de sus fondos, ocupándose de gestionar sus gastos.
Al igual que Ábalos, es la cuarta vez que Koldo García ha tenido que declarar ante el Tribunal Supremo, aunque también ha sido interrogado en la Audiencia Nacional, donde el juez Ismael Moreno instruye la investigación del presunto cabecilla de la trama Koldo, Víctor de Aldama, y otros implicados en la causa, como la expresidenta de Adif, Isabel Pardo de Vera.
Koldo García se acoge a su derecho a no declarar
Según fuentes jurídicas, Koldo García ha explicado que no iba a declarar porque no podía defenderse bien, ya que no tenía acceso a sus dispositivos electrónicos, que le fueron incautados en el registro de su domicilio en febrero de 2024 y que no recordaba muchas conversaciones.
El exasesor ministerial ha llegado al Supremo unos 15 minutos antes de la hora a la que estaba citado, a las 10:00 horas, y lo ha hecho en taxi, junto a su letrada Letizia de la Hoz, ataviado con una gorra y con una mochila.
A su llegada al alto tribunal no ha hecho declaraciones, pero sí previamente en la puerta del despacho de su abogada al programa Mañaneros 360 de TVE, donde, al ser preguntado por la mochila, ha respondido que es un "hombre precavido". Y es que el juez iba a revisar este jueves las medidas cautelares que tenía impuestas.
En la vistilla que se ha celebrado para revisar las medidas cautelares tras la comparecencia, las acusaciones populares, que encabeza el PP, han pedido, igual que hicieran para el exministro, prisión provisional, comunicada y sin fianza, no así la Fiscalía Anticorrupción que ha rechazado tal medida.
Por su parte, el fiscal rechazó esa medida y pidió el mantenimiento de las cautelares ya adoptadas en esta causa. Además, ha afeado "la locuacidad" del exasesor en los medios, mientras que en sede judicial no quiere declarar.
El juez cree que "persisten sólidos indicios de criminalidad".
En su auto, el juez comienza explicando que adoptar una medida privativa de libertad requiere de una "suficiente motivación", y aunque reconoce que es "evidente" que "persisten [...] sólidos indicios de criminalidad", no la adopta porque no lo cree pertinente en este punto de la causa.
En este sentido, recuerda que la prisión provisional es una medida cautelar de "carácter excepcional", que se ha de tomar con "particular cautela". Así, subraya que solo puede adoptarse cuando "se persiga" alguno de los fines que contempla la Ley de Enjuiciamiento Criminal, como que pueda haber riesgo de fuga, o para evitar la destrucción de pruebas relevantes en el caso, pero en ningún caso se puede decretar por la "falta de colaboración del investigado".
Y expone que creer responsable a una persona de la posible comisión de un delito o varios no es argumento "suficiente" para adoptar la medida de prisión provisional.
Sobre la posibilidad de riesgo de fuga, el magistrado considera que aunque "existe", no cree que pueda darse gracias a las medidas cautelares que ya estaban impuestas. Y en cuanto a la posible destrucción de pruebas, cree que la investigación está suficientemente avanzada, como para "excluir" este argumento. Así, acuerda mantener las medidas cautelares impuestas anteriormente, aunque advierte de que si se percibe que no cumple con alguna de ellas, podría acordar la prisión provisional.
En este auto, al contrario del este miércoles sobre Ábalos, en el que trasladó el "estupor" que le producía que el exministro se mantuviera como diputado en el curso del procedimiento penal en el que está inmerso, se ha limitado tan solo a justificar las razones de su decisión con respecto a Koldo García.
Al respecto, fuentes de la Presidencia del Congreso han afeado al juez que no respetase la "separación de poderes", y han recordado que "el papel del Poder Judicial es cumplir las leyes, no opinar sobre ellas". "Quizá en vez de recomendar que cambiemos las leyes, sería mejor que cumplan las ya existentes. El Congreso está cumpliendo su reglamento vigente", han defendido estas mismas fuentes.
Fuentes jurídicas han asegurado que el juez Puente ha informado al Congreso de las medidas cautelares que afectan al diputado Ábalos, que es lo que tiene obligación de comunicar, y que lo ha hecho las dos veces que tenía que hacerlo.
También el PSOE ha criticado al juez por "no respetar" el poder legislativo, mientras que el PP ha asegurado que comparte el mismo "estupor".
Su defensa invocó la nulidad de la causa
El exasesor estaba citado este jueves a declarar, pese al último movimiento de su defensa, que invocó la nulidad de la causa al afirmar que el juez del Supremo está indagando en hechos distintos a los que el Congreso concedió el suplicatorio. Así, aseguró que esto tenía "riesgo de convertirse en una investigación prospectiva".
El Congreso concedió el suplicatorio al Supremo para proceder contra Ábalos por las supuestas adjudicaciones irregulares de contratos de material sanitario a una empresa del presunto conseguidor de la trama, Víctor de Aldama, pero la causa ha seguido creciendo desde entonces.
En un escrito, su abogada señalaba que "la extensión de la investigación a hechos no autorizados vulnera el derecho al juez ordinario predeterminado por la ley", en cuanto "que se les priva del derecho a la doble instancia penal".
Comparecencia tras el último informe de la UCO
Koldo García ha comparecido un día después de que lo hiciera el exministro Ábalos, a quien este miércoles el juez decidió mantener en libertad con las mismas medidas cautelares que ya pesaban sobre él -prohibición de salir del país, retirada del pasaporte y comparecencias quincenales-, y no envió a prisión como solicitaban las acusaciones populares.
Ábalos también se negó a declarar y su vistilla culminó con su libertad sin fianza, ya que el juez Puente veía por ahora "moderado" el riesgo de fuga, aunque consideraba que cada vez existían indicios "más consistentes" de que cometió varios delitos y de que hizo "significativos ingresos en metálico" en sus cuentas bancarias.
El magistrado acordó citar a Ábalos y a su exasesor de nuevo, al considerar que el informe de la UCO recogía "consistentes indicios" de que entre los patrimonios de ambos "podrían existir significativas zonas de intersección".
Cerdán volverá a pedir su puesta en libertad
Por ahora, el juez Puente solo ha decretado prisión para el ex secretario de Organización del PSOE Santos Cerdán, por el riesgo de fuga y de destrucción, ocultación y manipulación de pruebas.
Cerdán lleva en prisión desde el 30 de junio y fuentes de su defensa han confirmado a RTVE que prevén que salga antes del 15 de noviembre, aunque presentarán una nueva petición de libertad antes.
Sobre como pasa sus días en Soto del Real el exnúmero 3 de los socialistas, estas mismas fuentes han asegurado que los pasa "leyendo, jugando a las cartas y que está más delgado", que no ha recibido visitas de gente del PSOE y han insistido en que es "una persecución política".
