Orbán condiciona su apoyo a los presupuestos europeos a recibir los fondos de la UE bloqueados
- Al menos 10.000 millones de euros siguen congelados por problemas con el Estado de Derecho en Hungría
- La aprobación de los presupuestos requiere la aceptación unánime de todos los países de la UE
La dirección de esta página ha sido copiada en su portapapeles
Hungría no aprobará el nuevo presupuesto comunitario hasta que no reciba los fondos europeos que la Comisión Europea (CE) sigue bloqueando, según ha advertido el primer ministro húngaro, el ultranacionalista Viktor Orbán.
"No habrá presupuesto europeo hasta que no recibamos nuestro dinero", ha dicho el mandatario magiar en un discurso en la Universidad de Verano de Baile Tusnad, en la vecina Rumanía, donde suele intervenir cada verano.
El proyecto del presupuesto europeo para el periodo 2028 a 2034, que incluye unos dos billones de euros, fue presentado recientemente por la CE y es criticado por varios países. Orbán ha recordado, asimismo, que para aprobarlo se requiere la aceptación unánime por parte de los países de la UE por lo que el voto de su país es esencial.
Hasta ahora, Hungría ha recibido 12.000 millones de euros de los fondos comunitarios, pero la CE mantiene bloqueados al menos otros 10.000 millones de euros por problemas con el Estado de Derecho en Hungría. Las preocupaciones persisten ya que Budapest cumplió solo la mitad de los 27 requisitos negociados con Bruselas para que pueda tener acceso a esos fondos.
Dice que la UE "no podrá ganar la guerra comercial" contra EE.UU.
El primer ministro, muy crítico con la Unión Europea (UE), ha considerado que Bruselas se ha colocado en una situación en la que el presidente estadounidense, Donald Trump, ve al continente como "un adversario político" en lugar de un aliado.
A tan solo un día de la reunión entre Trump y la presidenta de la CE, Úrsula von der Leyen, sobre los aranceles, Orbán ha considerado que la UE solo podrá lograr malos acuerdos con los EE.UU. y que la UE "no podrá ganar la guerra comercial". Apuesta, en este sentido, por "un cambio de liderazgo en la UE" y critica que se mantenga este conflicto "mientras que está en una guerra caliente con Rusia (en Ucrania)".
El Gobierno ultranacionalista de Hungría es el ejecutivo comunitario más cercano a Moscú mientras que mantiene tensas relaciones con Kiev, atacada por Rusia desde 2022. Sobre ello, el primer ministro ha reiterado que la UE no debería integrar a Ucrania, ya que eso significaría importar una guerra al bloque comunitario.
