Francia anula la orden de arresto por crímenes de guerra contra el expresidente sirio Bachar al Asad
- El tribunal ha concluido que esta orden fue fallida porque se emitió cuando aún ocupaba el cargo y no en funciones
- Tras la caída de Damasco por las fuerzas rebeldes el año pasado, Al Asad abandonó el país para refugiarse en Rusia
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La Corte de Casación de Francia, el máximo tribunal del país, ha dictaminado este viernes que la orden de arresto emitida contra el expresidente sirio Bachar al Asad es inválida. El fallo anula así una medida que había sido interpretada como un paso importante en la rendición de cuentas por crímenes cometidos durante la guerra civil siria.
La decisión del tribunal pone fin, al menos por ahora, a los esfuerzos judiciales en territorio francés para enjuiciar al exmandatario sirio. El tribunal ha concluido que esta orden fue fallida, ya que se emitió cuando aún ocupaba el cargo. Sin embargo, ha afirmado que ahora se puede emitir una nueva orden, dado que ya no es jefe de Estado en funciones.
"La costumbre internacional no permite ninguna excepción a la inmunidad personal de un jefe de Estado extranjero durante todo su mandato, incluso cuando los presuntos actos constituyan genocidio, crímenes de guerra o crímenes de lesa humanidad", ha declarado el Tribunal de Casación en un comunicado.
Los jueces de instrucción franceses emitieron la orden en noviembre de 2023, tras una investigación sobre los ataques con armas químicas en la ciudad siria de Duma y el distrito de Guta Oriental en agosto de 2013, que causaron la muerte de más de 1.000 personas. El Gobierno del entonces presidente Asad negó haber utilizado dichas armas.
Por otra parte, las autoridades francesas emitieron en enero una orden de arresto contra Asad, ya como exlíder de Siria, por presunta complicidad en crímenes de guerra. En particular, por el lanzamiento de un ataque deliberado contra civiles, como parte de la investigación del caso de Salah Abou Nabour, ciudadano franco-sirio, asesinado en 2017 en un bombardeo en Siria.
Tras la caída de Damasco por las fuerzas rebeldes en diciembre del año pasado, Al Asad abandonó el país para refugiarse en Rusia. Aunque inició su mandato con promesas reformistas y una imagen cercana a Occidente, Asad pronto consolidó un régimen represivo. En 2011, cuando estalló la Primavera Árabe, sofocó las protestas con brutalidad, usando armamento químico y aplicando lo que Naciones Unidas calificó como una "política estatal de exterminio".
La guerra civil que siguió dejó más de 600.000 muertos, millones de desplazados y un país devastado. Pese al aislamiento internacional, Asad se sostuvo en el poder gracias al respaldo militar de Rusia e Irán, recuperando territorio con una estrategia de tierra arrasada. El colapso de su régimen puso fin a casi 25 años de autoritarismo.
EE.UU. y Francia apuestan por el éxito de la transición política siria
Los Gobiernos de Siria, Estados Unidos y Francia han mantenido en París conversaciones calificadas como "francas y productivas", en las que subrayaron la urgencia de garantizar el éxito del proceso de transición política en Siria tras la caída de Bachar al Asad.
El encuentro se ha celebrado días después del cese al fuego en la provincia siria de Sweida, escenario reciente de intensos combates entre fuerzas gubernamentales, milicias drusas y tribus suníes beduinas, que dejaron cientos de muertos. Israel intervino con ataques aéreos, alegando que buscaba evitar una masacre de la población drusa.
La reunión ha estado encabezada por el nuevo ministro de Exteriores sirio, Asaad Al-Shibani, el ministro francés, Jean-Noël Barrot, y el enviado especial estadounidense para Siria, Thomas Barrack. "Este es un momento crítico para Siria", han señalado en una declaración conjunta, donde además han acordado avanzar rápidamente hacia una transición política efectiva en el país árabe.
