Enlaces accesibilidad
Arqueología

Se han incautado más de 150 piezas arqueológicas de diversas procedencias que se expondrán en el museo de Almería

Se necesita un título de propiedad para avalar la posesión de este tipo de bienes

Tras una primera evaluación visual, la unidad de policía traslada los fondos al museo de Almería, que los cataloga e investiga

Por
Rescatan más de 100 piezas arqueológicas

Desde que se creó en 1993, la unidad de policía nacional adscrita a la Comunidad de Andalucía de Almería trabaja, entre otras competencias, en la protección del patrimonio histórico de Andalucía. A lo largo de los años, se han obtenido diversas fuentes de información que han puesto en conocimiento movimientos importantes de restos arqueológicos entre particulares. Hay personas que durante años han acaparado este tipo de piezas y, hoy en día, desgraciadamente existen los expoliadores.

Una operación de alto interés arqueológico

La última actuación ha conseguido recuperar más de ciento cincuenta piezas de importante valor. “A raíz de unas fuentes”, según Enrique Mora, jefe provincial de dicha unidad, “se sabía que era una colección importante por la cantidad de restos y la calidad de los mismos”.

Cuando se empiezan a mover estos restos entre particulares, al final se dispersan.

La operación para incorporar todo ese material se desarrolló con la mayor brevedad posible. “La experiencia nos indica que, cuando se empiezan a mover estos restos entre particulares, al final se dispersan o se producen ventas de objetos individualmente”, explica el jefe provincial.

Tras identificar a la persona que poseía los restos arqueológicos y localizar dónde los tenía almacenados, la unidad de policía le realizó una entrevista para que acreditara la posesión legal. “Se sorprendió. Él pensaba que los podía tener en su casa”, afirma Enrique Mora. “La persona que detentaba la posesión inicial de la colección había fallecido y personas de su entorno se lo cedieron a esta otra, que era la que lo tenía en el momento de la actuación policial”.

En el caso de una herencia o de un regalo, se debe obtener también un documento que refleje la legalidad de le propiedad para avalar el legado de posesión. Sin embargo, en este caso, al no poder acreditar la procedencia legal por la falta de título de propiedad, se le informa que los bienes son de titularidad públicas y que van a ser incautados. “De manera voluntaria, hace entrega de los bienes, no haciendo necesario requerir la autoridad judicial”, cuenta Mora.

¿Cómo obtener un título de propiedad?

La Ley de Protección del Patrimonio Histórico de Andalucía del año 2007 dio un año para que aquellas personas que tuvieran bienes de interés arqueológico lo declararan. En el caso de que no se hayan declarado, su posesión es ilícita porque es patrimonio de todos al ser bienes públicos y están a cargo de la administración de todos los ciudadanos.

Sin embargo, los hallazgos casuales tienen otro procedimiento. Se deben comunicar inmediatamente a la Administración competente para adquirir la condición de depositario, es decir, será el poseedor de la custodia de las piezas incurriendo en responsabilidad civil. Este título cesa cuando los objetos sean entregados a la Administración competente o a un Museo público. En la Comunidad Autónoma Andaluza, los restos deben conservarse en el lugar del hallazgo, salvo autorización expresa.

Hay que recordar que se sanciona el uso no autorizado de herramientas, como detectores de metales, que permitan localizar restos en Zonas Arqueológicas o en lugares en los que haya constancia de restos arqueológicos.

La operación de los efectos incautados

Los bienes se intervienen en su totalidad y son trasladados a dependencias policiales, donde, son examinados visualmente por técnicos del museo de Almería, que han verificado la autenticidad de los mismos. José Freniche Pérez, subinspector jefe de protección del medio ambiente y del patrimonio histórico, recalca la variedad existente entre las ciento cincuenta piezas arqueológicas: “Van desde piezas argáricas, como tulipa, cuencos, una copa. Hay también molinos barquiformes. Tenemos también material romano con las ánforas. También tenemos pesas, vasijas romanas. Hay también de la época del cobre. Hay una pequeña colección de material histórico que procede de centroamérica y otra parte de colección de efectos que son más contemporáneos que provienen de África.”

No esperábamos encontrar tantas piezas. Normalmente hacemos actuaciones que tienen menos entidad ni tan variadas.

Aunque todas las piezas arqueológicas tienen relevancia, el conjunto sorprendió a José Freniche: “No esperábamos encontrar tantas piezas. Normalmente hacemos actuaciones que tienen menos entidad ni tan variadas”.

María del Mar Capel, jefa del departamento de conservación e investigación del museo Almería, distingue las piezas según la procedencia de las mismas: “No es lo mismo que entren fondos que están clasificados que vienen de un estudio, de una excavación que están contextualizados a que entren fondos que proceden de expolios o de haber coleccionado y están sin contextualizado”.

Entre las piezas, se destacan grandes ánforas romanas en las que se contemplan restos de animales marinos y piedras usadas de molinos para generar harina en la cultura argárica cerca de las cuevas del Almanzora. Además, hay una flauta de cerámica centroamericana que conserva sus colores y piezas africanas más modernas.

Capel estuvo presente en el primer asesoramiento a la policía autonómica para el traslado al museo. Nos informa: “Les hemos proporcionado material para su traslado para que, cuando lo traigan aquí, no sufran desperfectos al traerlo”.

El análisis en el museo de Almería

El hecho de que se conozcan las cosas hace que se quieran conservar.

Una vez los efectos incautados han sido catalogados, se ponen a disposición del museo de Almería, que recibe a lo largo del año muchas intervenciones, pero nunca tan numerosas. El incremento de las piezas implica un aumento en los fondos y más enriquecimiento de la cultura. “La difusión también influye en la conservación porque el hecho de que se conozcan las cosas hace que se quieran conservar”, cuenta María del Mar Capel, jefa del departamento de conservación e investigación del museo Almería.

Las mañanas de RNE con Íñigo Alfonso - Empecemos el día con... - Escuchar ahora

A pesar de ser ciento cincuenta piezas, no se ha creado un proyecto específico, así que el personal para el análisis es el mismo que el que trabaja normalmente en el museo de Almería. “Hay muchísimo trabajo y no hay mucho personal. Entonces, hay mucho por hacer”, explica Capel. “El problema es que no podemos dedicar todo el tiempo a ese material concreto”.

El proceso de investigación de las piezas

Primeramente, pasarán un tratamiento para que los restauradores e historiadores lo cataloguen. Si no está en buenas condiciones, hay que restaurar las piezas que están rotas. Además, el museo de Almería les dan un número de inventario y recopilan toda la información que se pueda obtener sobre cada una de las piezas.

“El proceso es largo y poco gratificante, en el sentido de que hay que dedicarle mucho tiempo y luego el resultado a veces es poco. Muchas veces, cuando vemos una pieza muy bonita, podemos decir muy poca cosa de ella y, en cambio, a lo mejor otra pieza mucho más pequeña de una excavación arqueológica nos da muchísima información por el contexto”, confiesa María del Mar Capel, jefa del departamento de conservación e investigación del museo de Almería.

En el caso de piezas de dudosa procedencia, como una tinaja que no aseguran si es musulmana o más moderna, la jefa del departamento de conservación explica: “Si no viene de un yacimiento arqueológico, hay que hacer una investigación por comparación. Los arqueólogos ya tienen el ojo echo a las piezas, por lo que los especialistas sí saben lo que es una terrasijilata, que es una vasija romana, o qué vasijas es por las formas. Eso requiere una investigación”.

Les hemos dicho que echen un vistazo a algunos investigadores.

Además, tiene claro que lo consultarán con especialistas. “Les hemos dicho que echen un vistazo a algunos investigadores que vienen y que están haciendo una investigación sobre cerámica”. El museo también pone a disposición las piezas a los estudiantes, cuya opinión también es escuchada.