Lesmes formalizará este lunes su renuncia al frente del CGPJ y del Supremo al no alcanzarse un acuerdo para la renovación

• Deja el cargo para evitar convertirse "en cómplice de una situación que aborrezco y que es inaceptable"
• Sánchez ha convocado de urgencia a Feijóo para una reunión este lunes en Moncloa

Lesmes formalizará este lunes su renuncia como presidente del CGPJ y del Supremo

El presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Lesmes, ha anunciado que este lunes formalizará su renuncia al cargo, después de que se haya cumplido el plazo que dio a los vocales del CGPJ el pasado 29 de septiembre "sin que Gobierno y oposición hayan alcanzado un acuerdo para la renovación del órgano de gobierno de los jueces o para la devolución de sus competencias", ha señalado en un comunicado el órgano de gobierno de los jueces.

Lesmes formulará este lunes su renuncia al cargo al amparo de lo establecido en el artículo 588.2 de la Ley Orgánica del Poder Judicial, que será efectiva una vez publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el real decreto correspondiente.

Su sustituto será Francisco Marín, actual vicepresidente del Tribunal Supremo, en base al informe que el propio Lesmes encargó al Gabinete Técnico del TS, aunque este punto puede ser motivo de fricción, ya que parte del sector conservador no ve con buenos ojos esta posibilidad.

Tras conocerse la renuncia, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha convocado de urgencia al líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, a una reunión en el Palacio de la Moncloa que tendrá lugar este lunes por la mañana.

Según han señalado a TVE fuentes del Ejecutivo, Sánchez va a pedir a Feijóo que desbloque la situación del Poder Judicial y que cumpla "de una vez" con lo que manda la Constitución y la ley.

La Unión Progresista de Fiscales, en un mensaje en su cuenta de Twitter, ha celebrado la dimisión de Lesmes y ha mostrado su confianza en que "este gesto vaya acompañado de la renovación del CGPJ".

"Situación insostenible"

En una declaración, Carlos Lesmes ha asegurado que, después del llamamiento al Gobierno y al PP para que pusieran solución definitiva a la "insostenible" situación del Supremo y el CGPJ y de las exhortaciones en el mismo sentido hechas por el comisario de Justicia de la Unión Europea, Didier Reynders, "los contactos desarrollados estos últimos días, de los que he sido informado, no han dado resultado positivo alguno".

Recuerda que esa no era la primera vez que se pronunciaba al respecto: "Con el afán de asegurar la dignidad y estabilidad institucionales" en 2018, antes de que venciera el periodo de cinco años para el que se eligió al actual Consejo, expresó su "confianza" en que las Cortes cumplirían con su deber constitucional.

A partir de entonces, "y ante la infracción reiterada del plazo", continúa Lesmes en su declaración, se ha dirigido en numerosas ocasiones a los presidentes del Congreso y del Senado "reclamando el cumplimiento del mandato constitucional", lo que también ha recamado "reiteradamente" el Pleno del Consejo".

"Durante el tiempo transcurrido hasta el día de hoy me he dirigido en varias ocasiones y de forma reservada a los principales responsables políticos al objeto de alcanzar la urgente renovación del Consejo o, en su defecto, que este, aun estando en funciones, recuperara las competencias que constitucionalmente tiene atribuidas. Ninguna de estas gestiones ha dado el fruto esperado", asevera.

Las Mañanas de RNE - Ignacio Picatoste (APM): "La dimisión de Lesmes puede ser interpretado como un mensaje sobre la urgencia de renovar el Constitucional" - Escuchar ahora

"Reiterada indiferencia" a sus llamamientos

El presidente del Supremo y del CGPJ remarca que ante la "reiterada indiferencia" a sus llamamientos, "la expectativa que se abre no parece ser otra que el mantenimiento de una situación, quizás durante años, que debilita y erosiona cada vez más a las principales instituciones de la Justicia española".

Destaca que su responsabilidad hasta el momento ha sido "procurar mantener el buen funcionamiento de estas dos instituciones y tratar de revertir la situación", para lo que ha utilizado todos los recursos a su alcance.

"Perdida toda esperanza de rectificación y ante el patente deterioro del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, que no puedo evitar, mi presencia al frente de estas instituciones carece ya de utilidad y sería además contraria a mi propia conciencia profesional", asevera el presidente del Supremo y del CGPJ.

Por ello, añade, "se impone mi renuncia como presidente, ya que mantenerme a partir de ahora en esta responsabilidad solo puede servir para convertirme en cómplice de una situación que aborrezco y que es inaceptable”, ha señalado en su declaración.

Lesmes solicitará de forma inmediata volver al servicio activo en la Carrera Judicial y se incorporará a su destino en la Sala Tercera del Tribunal Supremo, que ya cuenta con 9 vacantes y que de este modo, ante la próxima jubilación de uno de sus magistrados, podrá mantener al menos por un tiempo el mínimo imprescindible de integrantes para constituir sus secciones de enjuiciamiento.

Nueve años en la presidencia

Carlos Lesmes, madrileño de 64 años, deja el cargo tras nueve años en la presidencia, cuatro de ellos en funciones, ante el bloqueo institucional por la falta de acuerdo entre socialistas y populares para renovar el CGPJ.

Su nombramiento se produjo el 11 de diciembre de 2013, promovido por el entonces ministro de Justicia Alberto Ruiz Gallardón (PP), que vio en él un perfil técnico, conservador y próximo a su partido, después de que Lesmes desempeñara diversos puestos en el Gobierno de José María Aznar (1996-2004).

Una de sus primeras decisiones fue la de prescindir de la portavocía del CGPJ en el inicio de un mandato que arrancó con polémica tras unas declaraciones en las que aseguró que a los jueces se les controla con "palo y zanahoria".

Este episodio dio inicio a una tensa relación con las asociaciones judiciales que tuvo su clímax hace dos años cuando pidieron su dimisión si no reforzaba las medidas contra la pandemia en los juzgados pues las instrucciones de entonces generaban "caos".

Como máximo responsable del Tribunal Supremo, destaca el histórico juicio a los líderes independentistas catalanes, aunque vivió uno de sus episodios más amargos cuando la Sala Tercera implosionó en un pleno para revisar un impuesto ligado a las hipotecas.

Lesmes tuvo que pedir públicamente perdón por la "deficiente gestión" de la sentencia, que supuso un golpe terrible a la imagen de la Justicia, que ya venía 'tocada' por la deriva que había alcanzado el asunto de La Manada, en la que salió a relucir su pésima relación con el entonces ministro de Justicia, Rafael Catalá, uno de los cuatro con los que ha convivido en nueve años.

Roces con el Gobierno

El motivo fue una declaración del CGPJ en la que llamó a Catalá a la moderación tras afirmar que "todos" sabían que el juez de Navarra que firmó un voto particular pidiendo la absolución de los integrantes de La Manada "tiene algún problema singular".

Esta reprimenda institucional la utilizó por partida doble contra el exvicepresidente segundo Pablo Iglesias a quien reclamó mesura por decir que los tribunales europeos han humillado a los españoles en el "procés" y por poner en solfa a la Justicia tras la condena a la exdiputada de Podemos de la Asamblea de Madrid Isa Serra.

Los desencuentros con miembros del Gobierno alcanzaron también a la titular de Defensa, Margarita Robles, aunque con ella ya viene de lejos. Su último roce vino cuando ella le criticó por usar una llamada privada del rey con fines políticos, respecto a la ausencia del monarca en un acto de entrega de despacho de nuevos jueces. Lesmes regresa ahora al Supremo, aunque es previsible que más pronto que tarde culmine su trayectoria en el Constitucional.