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Coronavirus

Francia adelanta la edad para recibir la cuarta dosis de la vacuna contra el coronavirus a los mayores de 60 años

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Una mujer recibe la vacuna de Moderna en un centro de Garlan, al oeste de Francia. 
Una mujer recibe la vacuna de Moderna en un centro de Garlan, al oeste de Francia. 

El ministro francés de Sanidad, Olivier Véran, ha anunciado este jueves que se va a proponer a los mayores de 60 años una segunda dosis de recuerdo de la vacuna contra la COVID-19 si hace más de seis meses que se inyectaron la primera. "No es para nada una obligación", ha subrayado Véran en una entrevista a la emisora de radio RTL, sino "una apertura" para que se puedan inmunizar los que quieran.

La razón de que se les proponga es que, según los estudios disponibles, este recuerdo disminuye en un 80% el riesgo de que las personas ese grupo de edad acabe en el hospital o muera en caso de contagiarse, ha señalado. Francia ya había abierto la vacunación con una segunda dosis de recuerdo para los mayores de 80 años que hubieran recibido la precedente al menos tres meses antes.

Véran ha destacado, por otro lado, que Francia ya ha superado el repunte epidémico que se ha vivido en las últimas semanas, con un pico que llegó a 140.000-150.000 casos diarios. Ha hecho notar que desde hace cinco días están disminuyendo los contagios, con un descenso por ahora del 5%.

En ese contexto, ha rechazado las críticas por haber suprimido la obligación de llevar mascarillas en espacios interiores desde el 14 de marzo. Afirmó que se había dado "más libertad a los franceses sin poner en peligro su salud".

De cara a la primera vuelta de las elecciones presidenciales que se celebran este domingo, el ministro de Sanidad ha querido transmitir un mensaje de tranquilidad sobre el riesgo de coronavirus. Además de insistir en que "votar es fundamental, es un deber democrático", indicó que los que se sienten en situación de fragilidad no tienen que dudar en acudir a los colegios electorales porque hay medidas de seguridad.

También ha confirmado que las personas contagiadas pueden ir a votar "con una mascarilla", de la misma forma que pueden ir a hacer la compra.