Así funciona la moción de confianza de los conservadores a la que Boris Johnson se enfrenta por el 'partygate'

• La moción se convoca al superar el 15 % de solicitudes de los diputados conservadores
• Los rebeldes necesitan el apoyo de la mayoría, 180 votos, para echar al primer ministro
• El 'partygate', el escándalo de las fiestas en Downing Street en plena pandemia

El primer ministro británico, Boris Johnson, sale de su residencia y oficina en Downing Street. 

El primer ministro británico, Boris Johnson, se somete este lunes a una moción de confianza del grupo parlamentario de su partido, el Conservador, a causa del partygate, las fiestas celebradas en Downing Street en plena pandemia.

Graham Brady, presidente del llamado 'Comité 1922', que agrupa a los diputados tories, ha convocado la moción tras recibir por carta la solicitud en tal sentido de más del 15 % de los representantes.

Brady no ha revelado cuántas cartas ha recibido. La Cámara de los Comunes tiene actualmente 650 diputados, de los que 359 pertenecen al Partido Conservador después de que uno de ellos se pasara a los laboristas precisamente por el partygate. Por tanto, era necesario que Brady recibiera al menos 54 cartas.

Los conservadores críticos han sumado más apoyos después del informe de la funcionaria Sue Gray que concluyó que las fiestas en Downing Street en plena pandemia no debieron haber tenido lugar y que el responsable fue Johnson. Este pidió perdón en el Parlamento pero se ha negado a dimitir.

Johnson necesita la mayoría de votos conservadores

En la votación, los críticos necesitan una mayoría simple de 180 papeletas, o el 50 % de los votos, para forzar la dimisión del primer ministro.

Si Johnson gana, puede permanecer en el cargo, y sus compañeros de partido no podrán volver a plantear otra moción hasta un año más tarde. Si, por el contrario, la moción sale adelante, se abriría un periodo de primarias para elegir al nuevo líder del partido y del país, un proceso al que el actual primer ministro no se podría presentar.

El proceso de primarias del Partido Conservador también está fijado: en cada ronda de votación, los diputados van descartando un candidato y los dos últimos se someten al voto de los militantes. Todo el proceso puede durar unos dos meses.

Aunque no hay norma escrita a ese respecto, habitualmente el ganador de estas primarias internas asume la jefatura de Gobierno sin que se convoquen unas elecciones.

El primer ministro probablemente se mantendría en el cargo hasta que la reina Isabel II designara al sucesor, aunque también podría decidir dimitir de manera inmediata. En ese caso, el gabinete designaría a un jefe interino, presumiblemente el viceprimer ministro, Dominic Raab.

A favor y en contra

La votación es anónima, lo que dificulta predecir el nivel de respaldo con el que puede contar Johnson. Entre los conservadores se formó un grupo, formado mayoritariamente por diputados que arrebataron el escaño a los laboristas en 2019 en circunscripciones del norte de Inglaterra, que ha estado organizando a los rebeldes. En los últimos días, este grupo ha hecho circular un documento con 13 razones por las que Johnson debería abandonar el cargo.

Por el contrario, varios miembros del Gobierno ya han mostrado públicamente su apoyo a Johnson. Es el caso de Rishi Sunak, ministro de Finanzas, y Liz Truss, ministra de Exteriores. Alrededor de 160 de los parlamentarios tories ocupan algún cargo gubernamental, que peligra si cambia el jefe de Gobierno.

No obstante, aunque Johnson gane, esto no significa que su futuro político esté totalmente asegurado. En otras ocasiones, primeros ministros conservadores han superado mociones de confianza de su grupo pero finalmente la erosión interna les ha llevado a abandonar el cargo.

En 2018, Theresa May sobrevivió a la votación, pero dimitió meses después ante las presiones de sus propios correligionarios en medio del turbulento proceso para negociar un acuerdo del Brexit.

Candidatos alternativos

Sunak y Truss son dos de los nombres que suenan como favoritos para la sucesión en caso de que Johnson se marche. Michael Gove y Jeremy Hunt son otros dos de los posibles candidatos. Hunt ya se enfrentó a Johnson en las anteriores primarias, y perdió.

Otros posibles candidatos son Nadhim Zahawi, actual ministra de Educación y que fue responsable del rápido proceso de vacunación contra la COVID-19; y la exministra de Defensa Penny Mordaunt, que fue cesada por Johnson cuando llegó al poder, por haber apoyado a Hunt en las primarias.